El diario Sinar Harian pretende ayudar a sus lectores a identificar personas de la comunidad LGBTI

“A los homosexuales, les gusta ir al gimnasio para deleitar sus ojos al observar a los demás hombres y a las lesbianas les gusta abrazarse y tomarse de las manos”, eso es lo que afirma Sinar Harian, el periódico más importante del país.  

El artículo presenta una lista de puntos de viñetas que destacan las cualidades, supuestamente, comunes en personas homosexuales y con los cuales puede identificarse a este grupo de personas.

Según el artículo de Sinar Harian, a los hombres gay les encanta ir al gimnasio, no para hacer ejercicio, sino para mirar a otros hombres, así como usar ropa ajustada para presumir sus cuerpos, aman las barbas y usar ropa de marca; sus ojos se iluminan cuando ven hombres atractivos físicamente. Las lesbianas, por su parte, adoran estar solas, odian y menosprecian a los hombres y caminan abrazándose, entre sí, o tomadas de la mano. Sin embargo, las reacciones no han dado espera desde el pasado viernes, 9 de febrero fecha de su publicación.

La activista y estrella de las redes sociales Arwind Kumar arremetió contra el artículo argumentando en un video que "hay asuntos mucho más importantes en este país que deben abordarse. Si realmente quiere educar a la sociedad, entonces explíqueles los rasgos de un pedófilo, un abusador, un asesino, un secuestrador, personas que en realidad ponen en peligro la vida de otros. ¿Cómo diablos una persona gay pone en peligro tu vida?”, afirma Kumar en un video que ya tiene más de 150.000 reproducciones y comentarios a favor, principalmente.

El artículo ha generado críticas y fue ridiculizado por varios activistas que dijeron que se estaban poniendo en peligro las vidas de aquellos pertenecientes a la comunidad LGTBI. La homosexualidad es ilegal en Malasia y es castigada con una pena de prisión de hasta 20 años, según un código penal que criminaliza los comportamientos sexuales "contra el orden de la naturaleza".

En Malasia, los crímenes contra la población LGBTI no son castigados debido al mismo código penal que favorece el orden “natural”, por lo que la población LGBTI no ha logrado disfrutar, realmente, de sus derechos.

Malasia ha experimentado un creciente fundamentalismo religioso en los últimos años, provocando fricciones entre las fuerzas conservadoras y aquellos que luchan por mayores derechos. El país de mayoría musulmana se ha opuesto a la comunidad LGBTI varias veces en los últimos años, saliendo favorecida la comunidad musulmana conservadora por su amplia influencia en las decisiones políticas.

En junio de 2017, el Ministerio de Salud del país lanzó un concurso titulado "El Concurso Nacional de Video Creativo sobre Salud Sexual y Reproductiva del Adolescente" con el objetivo de "prevenir" la homosexualidad y la multiplicación de transgéneros en el país. No solo fue criticada internacionalmente la propuesta, sino que a nivel interno la sociedad se dividió a favor y en contra del concurso.

Ese mismo año, el viceministro del interior del país atacó a Walt Disney por la película de "La bella y la bestia" porque contenía un "momento gay". A pesar de las demandas de la junta de censura de Malasia, Disney se negó a eliminar la escena. La publicación de la película se retrasó, pero finalmente se proyectó sin cortes escenográficos.

En 2015, la corte más alta de Malasia confirmó un fallo que prohibió el travestismo y lo penalizaba con cárcel. En 2011, se lanzó un "campamento anti-gay" en el país después de que profesores identificaran a más de 60 adolescentes como "demasiado femeninos".

A pesar de las críticas, Sinar Harian aún no ha emitido respuesta a la controversia suscitada por el artículo. Los reproches a la publicación de este se han manifestado en todos los continentes y las críticas al periódico no han dado espera en las redes sociales.

Latin American Post | Carlos Eduardo Gómez Avella

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