Yoga: ¿Cómo potenciar habilidades humanas?
Hay cinco aspectos esenciales que ofrecen las practicas somáticas para los yoguis que mejoran y fortalecen su calidad de vida
La práctica del yoga se ha convertido en una actividad recurrente para cada uno de los seres humanos ya que les permite meditar, evitar el estrés y también ofrece una serie de ventajas a nivel corporal y cerebral. Aplicarla se complementa de gran forma con la somática.
¿Qué es somática?
El concepto de Soma es griego y se refiere más que todo a una idea de cuerpo integrado, habitado y sensible al mundo interior y exterior. Es vida y significa que la persona se siente a si misma y de esta forma tiene una clara percepción interna sobre lo que ocurre en su cotidianidad.
La misión del movimiento somático se enfoca en enriquecer la conciencia sensorial y motriz de la persona para que se autoconozca, se autoreorganize, se autosane y le de una dirección importante a su vida para que fortalezca su actuar en la sociedad, pero, ¿cuáles son las cinco ventajas de las practicas somáticas para los yoguis?
1. Identificar y relajar tensiones profundas: primero que todo, estas practicas hacen que las personas puedan ampliar la percepción del ser-cuerpo y el movimiento. De esta manera es posible reconocer las causas de los dolores y de las obstrucciones que impiden el movimiento libre. También se construye un trabajo corporal profundo que mantiene el sistema nervioso en equilibrio, y de esta manera mantiene estable a cada uno de los órganos que componen nuestro cuerpo.
2. Sentir y habitar zonas desconocidas: en segunda instancia, gracias a la meditación somática, los practicantes de yoga pueden conocer de una mejor manera diversas partes del cuerpo como los órganos, huesos, ligamentos, muslos, glándulas, diversos componentes del sistema nervioso, entre otros. De esta forma, la persona aprende a trabajar mejor sus formas de respiración, modificando el ritmo intenso de su actividad diaria.
3. Encontrar formas de movimiento: el tercer aspecto es que se pueden hallar maneras más eficientes de moverse a la hora de caminar y sentarse, construyendo un aprendizaje para que la persona se relacione mejor con la fuerza de gravedad y logre movimientos alineados y livianos. Además, la persona crea un espacio personal gracias a los movimientos que realiza, reencontrándose consigo misma y dándole la oportunidad de que tenga una visión clara y rompa con diferentes hábitos cotidianos que en muchas ocasiones congelan su vida.
4. Conexión con el cuerpo: es una de las funciones más primordiales, ya que estas técnicas de meditación hacen que los seres humanos se autoexploren y generen diversos hábitos que fortalezcan sus condiciones de vida. Asimismo, se accede a niveles más profundos del ser por intermedio de visualizaciones, meditaciones, sonido o cantos. Otra de las ventajas es que el individuo equilibra las funciones de los hemisferios cerebrales y vuelva más fácil cualquier tipo de aprendizaje ya sea de tipo motriz e intelectual.
5. Desarrollo del autoestima: gracias a su aprendizaje, las personas aprenden a valorarse a si mismas, ya que se pueden conocer y explorar, sabiendo que quieren y a donde pretenden llegar. Por esa razón, incrementan su capacidad para actuar y tomar buenas decisiones. Es determinante en el desarrollo de la libertad y la autonomía puesto que hace que la persona haga cosas por elección y no reaccione por hábitos. Por ello, el ser humano potencia capacidades que hagan posible toda clase de cosas que parezcan imposibles y se pueda realizar lo que se pretende.
En fin, lo que se pretende en las practicas somáticas para los yoguis es que haya una integración conjunta del cuerpo, la mente y el espíritu con el objetivo de que las personas potencien cada una de sus habilidades. Por ello estos cinco componentes mejoran diferentes funciones de los seres humanos.
Latin American Post | Daniel Cuevas
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