Corea del Norte y Corea del Sur: en busca de paz
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Tanto Corea del Norte como su hermana del Sur, se plantearon un solo objetivo: firmar la paz. ¿Qué avances se vislumbraron en este 2018?
El 2018 fue un año agitado en cuanto a relaciones políticas se trata. Por un lado, la OTAN ha sido un centro de batalla entre Estados Unidos y Turquía, por las sanciones que el Gobierno norteamericano ha impuesto a la República de Irán, y la defensa del Gobierno turco a ésta. Al otro lado del mundo, el éxodo venezolano no para y los países vecinos no han dudado en mostrar su inconformismo y rechazo con el régimen de Nicolás Maduro en Venezuela.
Sin embargo, en el continente asiático han surgido buenas noticias, específicamente, en la península de Corea. Las relaciones entre las dos Coreas (del Norte y del Sur) han venido mejorando durante este año, después de que en enero, según la BBC, el presidente norcoreano, Kim Jong-un, aceptó que “estaba abierto al diálogo” con su hermana del Sur.
Más allá del deporte
Ahora bien, para que Kim Jong-un pensara en abrir relaciones con Corea del Sur, primero tuvo que presentarse una excusa mediática y de hermandad entre ambas naciones, y ¿qué mejor que dicho pretexto fuese el deporte?
En febrero de este 2018, ambas Coreas desfilaron juntas como una sola delegación en los Juegos Olímpicos de Invierno, que tuvieron lugar en PyeongChang (Corea del Sur). Este fue el primer gran acercamiento entre ambas naciones en este año.
“Como hemos presenciado todos durante los Juegos Olímpicos de Invierno, los deportes dieron la oportunidad de iniciar unas relaciones intercoreanas mejores", dijo Jeon Choong Ryul, secretario general titular del Comité Deportivo y Olímpico de Corea del Sur (KSOC).
De acuerdo con El País de España, esta muestra de hermandad fue el detonante para que ambas Coreas pensarán en tratar el tema de la paz.
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Paso de fe
El hecho más importante en la relación entre ambos países se dio el pasado 27 de abril cuando, por primera vez desde 2007, sus presidentes se reunieron. El motivo principal era dialogar acerca de un verdadero tratado de paz en la península. Kim Jong-un cruzó la zona desmilitarizada que divide a las dos Coreas para ser recibido por su homónimo del Sur, Moon Jae-in.
De acuerdo con El Tiempo, el hecho histórico se resume en la llamada Declaración de Panmunjom, que, en resumen, tiene como fin fundamental mejorar las relaciones entre las Coreas y afirmar ante el mundo que “no habrá más guerra en la península de Corea”, tal y como lo anuncia el segundo punto de la declaración.
Cabe recordar que el conflicto entre ambas naciones inició en 1950, pero nunca finalizó de manera oficial. Aunque en 1953 se realizó un armisticio que dio fin al conflicto bélico, nunca se firmó de manera definitiva un acuerdo de paz, por lo que la península lleva más de seis décadas en ‘guerra’.
Un traspié
Así como hubo un avance, el idilio también estuvo a punto de acabarse en mayo de este año, luego de una prueba militar que realizó Corea del Sur, en conjunto con Estados Unidos. Los ejercicios militares tuvieron lugar en territorio surcoreano el pasado 15 de mayo, por lo que Kim Jong-un decidió cancelar la reunión que tendría con Moon Jae-in, al día siguiente.
“El motivo de la suspensión de estas conversaciones se debe al presunto desarrollo de ejercicios militares conjuntos entre Seul, capital de Corea del Sur, y Washington, capital de Estados Unidos”, explicó la Agencia Telegráfica Central de Corea del Norte (KCNA, por sus siglas en inglés).
Asimismo, KCNA explicó que estas maniobras se habrían tomado como “un desafío flagrante a la Declaración de Panmunjom”, pues eran “una provocación militar intencionada que va en contra de los acontecimientos políticos positivos de la península de Corea”.
Sin embargo, según expone el periódico La República, el miedo más grande era que el régimen norcoreano también decidiera cancelar su conversación con Donald Trump, el 12 de junio, en Singapur. Afortunadamente, la reunión sí se llevó a cabo y con ella, una de las conversaciones más importantes de los últimos años, alrededor del tratamiento y desmantelamiento de armas nucleares.
¿Unión final?
Durante el resto del año, de acuerdo con el diario El Comercio, los mandatarios de ambos países tuvieron dos reuniones más; las mismas en las que se fue afianzando la relación entre ambos gobiernos, así como la idea de una península mucho más unida política y socialmente.
Ejemplo de ello fue la celebración simbólica de la unión ferroviaria en la estación de Phanmun, en la ciudad fronteriza de Kaesong, con la cual se busca ligar nuevamente los territorios de ambas coreas. Representantes de los dos países se dieron cita en este lugar para establecer lo que se considera como una reinauguración de las vías de transporte en la región.
Sputnik (una agencia de noticias rusa) informó que “en 2003 los ferrocarriles de las dos Coreas se conectaron tras medio siglo de fractura nacional, pero tras el cambio de Gobierno en Seúl y el desarrollo de armas nucleares por parte de Pyongyang, el proyecto se detuvo”. Es por esto que retomar esta unión, luego de 15 años, representa un avance en pro de lograr una verdadera reconciliación entre las dos naciones hermanas.
LatinAmerican Post | Christopher Ramírez Hernández
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