España: Pedro Sánchez y la crisis independentista
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El domingo 10 de febrero, miles de españoles salieron a las calles a exigir que el presidente convocara elecciones, ¿Qué está pasando?
Alrededor de 45.000 personas, simpatizantes de diferentes partidos políticos como el PP (Partido Popular), C’s (Ciudadanos) y Vox, acudieron a las calles de madrid para exigir “elecciones inmediatas y mano dura con quienes pretenden romper España con el independentismo catalán”, como lo afirma La Voz de Galicia.
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Los partidos tradicionales de derecha exigen que Pedro Sánchez, presidente de España, rompa relaciones con cualquier tipo de fuerzas independentistas.
Sánchez llevaba una serie de diálogos con los independentistas de cataluña, en las cuales se proponía dos espacios, siendo el primero de carácter institucional (Comisión Bilateral Estado-Generalitat) y el segundo una mesa de diálogos. Éste trataba que dentro de la conformación de la mesa de partidos existiera una representación en Cataluña, “dos por partido, pero especificando que deben tener capacidad de decisión en los dos ámbitos territoriales (estatal y catalán)”, según ABC España.
Sin embargo, el gobierno español decidió frenar los diálogos manifestando que la culpa es de los Generalitat, puesto que no aceptaron el marco propuesto. Cabe destacar que uno de los principales problemas entre España y Cataluña, es el interés de la segunda en realizar movimientos independentistas. Con respecto a lo anterior, desde un principio, Sanchez excluyó la posibilidad de un referéndum de autodeterminación dentro del marco de los diálogos.
Este Gobierno no aceptará nunca un referéndum de autodeterminación.
Trabajamos por tender todos los puentes posibles desde la política. Esta es la propuesta del Gobierno de España para Cataluña: convivencia, dialogo y ley. Constitución https://t.co/1iXBt7oqEB— Pedro Sánchez (@sanchezcastejon) 8 de febrero de 2019
A pesar de lo anterior, el gobierno español señaló que la posibilidad de reanudar los diálogos es posible siempre y cuando los negociadores pertenecientes a la Generalitat, acepten el marco de lo propuesto.
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Más leña al fuego
Con la marcha del pasado domingo, no solo la derecha española pone en jaque al gobierno socialista de Sánchez, sino que la “pausa” en los diálogos, llega en un momento clave para el presidente español, puesto que el miércoles 13 de febrero se llevarán a cabo las votaciones de los Presupuestos Generales del Estado. En estas votaciones se aprueba el presupuesto de España, y allí, el apoyo catalán resulta imprescindible para el gobierno de Sánchez.
De no obtener el apoyo necesario, la vicepresidenta española, Carmen Calvo, ya afirmó que “seguirán gobernando a golpe de decreto de ley para cumplir con su agenda”, de acuerdo con 20 minutos. Además, al terminar la reunión del Consejo de Ministro y de acuerdo al mismo medio argumentó que "este Gobierno lo ha hecho con leyes y reales decretos negociados y validados con todos los grupos políticos de la cámara. Este Gobierno ha llegado para quedarse. Sería un fraude derribar un Gobierno y convocar elecciones".
Sin una votación necesaria, el gobierno español no dará marcha atrás ni cederá ante las presiones de convocar elecciones anticipadas, simplemente reevaluará cómo podrá llevar a cabo las propuestas políticas, ya que en palabras de Calvo, “el tiempo de legislatura se acorta”.
La respuesta de Sánchez
Frente a lo anterior, Pedro Sánchez afirmó que su gobierno trabaja para la unidad española lo que significa “unir a los españoles y no enfrentarlos, como lo hicieron las derechas en las marchas”. Igualmente, afirmó que la crisis es producto del gobierno liderado por el gobierno de Mariano Rajoy (perteneciente al PP), “lo que hago como presidente del gobierno es resolver una crisis de Estado que el Partido Popular agravó cuando estuvo en el poder”, como lo afirma La Jornada.
Así pues, Sánchez trata de balancear entre la oposición de la derecha, la cual se opone al gobierno actual con cada situación que involucre a los independentistas; y una izquierda que le recuerda que gracias a ellos Sánchez pudo llegar al poder, tras desbancar a Mariano Rajoy. Una situación desfavorecedora, que sumada a las marchas del domingo pasado, no dejarán que Sánchez salga ileso.
LatinAmerican Post | Laura Viviana Guevara Muñoz
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