Julian Assange: entre la espada y la pared
Escucha este artículo
Después de su expulsión de la embajada ecuatoriana, Assange está en el foco internacional con la reactivación de procesos legales que pueden significar la extradición
El pasado 11 de abril, Julian Assange fue capturado por las autoridades británicas después de que el presidente ecuatoriano, Lenin Moreno, hiciera oficial que el gobierno ecuatoriano le quitaba el asilo político. En una entrevista con The Guardian, Moreno afirma que lo anterior fue motivado por los constantes insultos que le hizo a Ecuador, al llamarlo país insignificante, y por ofensas con el personal de la embajada como tirar heces en la pared.
Read in english: Julian Assange: between a rock and a hard place
Como explica Le Monde, traduciendo lo anterior a términos legales, las razones de su expulsión son dos: primero, el desconocimiento de las convenciones internacionales, lo que puede significar la intervención en asuntos internacionales sin autorización; segundo, el irrespeto del protocolo de cohabitación, como se deduce de los comentarios de Moreno.
Tras su expulsión, Assange fue condenado por las autoridades británicas a 50 semanas de prisión por violar la libertad condicional que se le otorgó en 2012 cuando el gobierno sueco pidió su extradición. La reactivación de los procesos, tanto con el gobierno sueco, como con el americano, es lo que le espera en los próximos años. ¿Será extraditado a EE.UU o a Suecia?
Assange antes del asilo
El australiano de 47 años es reconocido por haber sido el fundador de Wikileaks, una plataforma que se dedica a la publicación de documentos filtrados de organizaciones y gobiernos que los mantienen confidenciales.
En 2010, el portal del australiano filtró a medios de comunicación 450.000 documentos secretos de miles de comunicaciones internas de EE UU sobre las guerras de Afganistán e Irak; los conocidos como Warlogs y Cablegate de la milicia y la diplomacia Americana. Consecuencia de esto fue que se le acusara a Assange de haber ayudado a Chelsea Manning, exmilitar acusada de filtrar los documentos, a piratear computadores del Ministerio de defensa americano, según Le Monde.
Sin embargo, en su momento no se inició un proceso por esto, sino por unas acusaciones de violación a dos mujeres en Suecia. Después de estar en proceso y de haber pagado una fianza, afirma la BBC, pasó por un largo proceso legal que terminó en el asilo político en la embajada de Londres, que le dio el entonces presidente de Ecuador, Rafael Correa. Por esto, todos los procesos legales a los que se enfrentaba Assange se congelaron mientras mantuviera su condición de asilado.
Puede interesarle: 'Change UK': el partido anti Brexit
Entre la extradición a Suecia o a Estados Unidos
Tras su expulsión de la embajada ecuatoriana, los gobiernos que habían tenido procesos contra él no demoraron en manifestarse. Por un lado, Estados Unidos volvió a demandar que la extradición de Assange. Por otro, el gobierno sueco reactivó el caso de violación.
Como recuerda El País, el gobierno americano acusa al fundador de Wikileaks “de un delito de intromisión informática penado con hasta cinco años de cárcel”. En el primer juicio en relación a este caso, que se llevó a cabo el pasado 2 de mayo ante un tribunal londinense que se comunicó con él en la cárcel, Assange negó formalmente su consentimiento a la extradición del gobierno americano. Según The Guardian, él afirmó que “No deseo rendirme a la extradición por hacer periodismo que ha ganado tantos, tantos premios y protegido a tantas, tantas personas”
Sin embargo, el gobierno de Estados Unidos no se ha quedado con los brazos cruzados, ya que ha movido sus fichas por otros lados. Por ejemplo, según información de El País, el próximo 20 de mayo a las 9am “la Fiscalía General del Estado de Ecuador ha acordado registrar una de las estancias de la embajada de ese país en Londres, en la que el ciberactivista ha residido durante los últimos siete años, y entregar a EE.UU todos sus documentos, teléfonos móviles, archivos informáticos, ordenadores, unidades de memoria, CD y cualquier otro dispositivo”. La información que puede adquirir el gobierno estadounidense de estos documentos puede servirles para reforzar las acusaciones y saber cómo ha gestionado Assange el caso con sus abogados.
Por el lado sueco también se reactivaron los asuntos en los últimos días. Como afirmó la vicefiscal general de Suecia el pasado lunes, según El País, "después de revisar las investigaciones preliminares en su estado actual, mi conclusión es que siguen existiendo evidencias suficientes como para sospechar que el Sr. Assange cometió una violación o un delito de menor grado”. Esto significa que la petición de extradición del gobierno sueco puede reactivarse, lo que pondría a Assange entre la espada y la pared, entre dos países que lo buscan enjuiciar bajo sus reglas.
Ahora depende del gobierno británico decidir a cuál extradición dará preferencia como establece el Acta de Extradición, según The Guardian. El encargado de la decisión, Sajid Javid, deberá “tener en cuenta la relativa seriedad de las alegaciones, el lugar en que cada ofensa alegada tomó lugar, la fecha de cuando cada solicitud se expidió o fue recibida y si la persona es acusada o convicta por cada ofensa alegada”.
LatinAmerican Post | Juan Gabriel Bocanegra
Copy edited by Juliana Suárez