La multa contra el Barcelona y otras 3 multas absurdas
En días pasados se dio a conocer que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) multó al Barcelona con 300 euros, a raíz de las irregularidades en el fichaje del francés Antoine Griezmann, proveniente del Atlético de Madrid.
Jugador del FC Barcelona, Antoine Griezmann. / Tomado de: futboltotal.com
LatinAmerican Post | Laura Viviana Guevara
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Mediante un comunicado, el comité afirmó que el equipo blaugrana tan solo había cometido una “infracción leve” del artículo 126 del código disciplinario durante las negociaciones, como lo explica Marca.
La irregularidad fue denunciada por el Atlético de Madrid, quien acusó al Barcelona de realizar las negociaciones directamente con el jugador y sin respetar los tiempos estipulados, puesto que anuncian que el Barca se había acercado al jugador desde marzo y no habría esperado hasta julio, tiempo donde el mercado de verano abre.
De esta manera, habían evitado pagar 80 millones de euros más de lo que realmente pagaron por el jugador, pues el francés tenía una cláusula de liberación de 200 millones de euros. El acuerdo entre los ‘colchoneros’ y los blaugranas se dio por 120 millones de euros y se anunció en mayo 14, seis semanas antes de que el mercado de verano comenzara.
A pesar de lo anterior el comité, si bien afirmó que el Barca había actuado mal, decidió que no había pruebas suficientes para comprobar las acusaciones, y que la multa, de 300 euros, era más simbólica.
Un monto relativamente insignificante comparado frente a los 600.000 francos suizos que el Chelsea tuvo que pagar por las irregularidades de la transferencia con jugadores menores de 18 años; o por el mismo motivo, del Manchester City al tener que pagar 315.000 libras.
Pero, ¿qué otras multas absurdas han sucedido en el fútbol?
Que no te aprueben tu ropa interior
Este es el caso del delantero danés Nicklas Bendtner, quien en el encuentro de la Eurocopa 2012 entre Dinamarca y Portugal, y al anotar un gol, decidió enseñar su ropa interior. No completa pero sí dio un pequeño vistazo.
At Euro 2012, Nicklas Bendtner was banned for one match and fined , for flashing underwear with 'Paddy Power' on them. I'm not sure how Huddersfield Town will get away with this abomination … #HuddersfieldTown #PaddyPower #EFL pic.twitter.com/hwFn8TnemD
— Raphael Wilson (@089968Raph) 17 de julio de 2019
Pensarás que la decisión de la UEFA fue acertada si se tratara de un caso de exhibicionismo, pero “Lord Bendtner”, como es apodado en las redes sociales, fue multado con una suspensión de un juego y una sanción económica de alrededor de 110.000 euros por usar la marca de ropa interior equivocada, no en la celebración en sí.
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Decirle a la gente que no sea racista
El polémico futbolista italiano Mario Balotelli puede ser todo lo excéntrico que quieras, pero también ha tenido que soportar cantos racistas que aún hoy en día se escuchan en las canchas. Pues bien, en 2014 subió una foto a Instagram en donde le pedía a la gente que no fuera racista.
Soccer: Mario Balotelli investigated by British FA over racist #AntiSemitic #Instagram post http://t.co/V4SH3eJLXU pic.twitter.com/eRpeMhXxcI
— Lisa Daftari (@LisaDaftari) 1 de diciembre de 2014
( my Mom is jewish so all of u shut up please)
— Mario Balotelli (@FinallyMario) 1 de diciembre de 2014
La foto se volvió tan viral que el delantero no tuvo de otra que eliminar la publicación y defenderse en Twitter. Sin embargo, no le bastó para que fuera multado con la suspensión de un partido y un sanción económica de 36.000 euros.
Por usar el baño del árbitro
Como lo cuenta Soccity, el ex delantero del Leicester City, Robbie Savage, tuvo que usar el baño del árbitro sin permiso de éste al encontrarse mal del estómago. El mismo medio relata que el futbolista estaba tomando unos medicamentos y que le urgía ir al baño. Sin embargo, al revisar los baños del vestuario e inclusive los de la sala de fisioterapia, no vio ninguno desocupado.
Fue entonces cuando pensó entrar en los aposentos del árbitro, era el único baño y realmente necesitaba ir. Entró y al salir, el árbitro, quien durante todo el partido estaba riendo de la situación, se dio cuenta de lo sucedido. Al final de las risas, Savage fue notificado con una multa por 11.000 euros por entrar a la habitación, y al baño, del árbitro.