¿Cuál es la situación económica de Cuba durante la pandemia?

El coronavirus mantiene en jaque al planeta, incluyendo a América Latina. En un principio, algunas regiones mostraban números alentadores, como era el caso de Cuba. Según destacaba Clarín, el régimen comunista tenía “su receta”, gracias a la biotecnología, un fuerte sistema de salud público y un rastreo puerta por puerta, sin que haya un interés privado por detrás.

A pesar de que al comienzo los números sonaban alentadores, el último tiempo comenzó a generar preocupaciones en la región. Desde Infobae destacan que se reportó una “cifra récord en casos autóctonos en un día”, siendo 92 nuevos contagios, de los cuales 91 son de ciudadanos de la isla, por lo que hay una alerta máxima ante la posibilidad de que estos aumenten.

Aunque los números de contagios todavía parecen ser favorables a diferencia de lo que ocurre en otros territorios, muchos se preguntan qué sucede en materia económica. Desde The New York Times advierten que la pandemia “agrava la situación económica en Cuba”, debido a que se ahorcó todavía más a un lugar ahorcado por las sanciones estadounidenses y la mala gestión, provocando una crisis alimentaria por la caída del turismo. Veamos, entonces, qué implica esta situación.

La situación económica de Cuba y el coronavirus

Como bien mencionamos, lo primero que se debería analizar es la cuestión de los contagios, fundamental para comprender la situación económica actual. Desde la web de Telesur TV mencionan que se pidió elevar la “responsabilidad individual” frente al COVID-19, debido a que cada persona tiene en sus manos el control de la pandemia.

Todo esto provoca que desde el medio NUSO destaquen que se genere un “rompecabezas económico cubano frente a la pandemia”. Es decir, si bien las compras externas de los países son fundamentales para sostener el consumo y la producción, la situación cubana es única en el mundo, ya que empeora el precario estado de la balanza de pagos que tiene la isla.

Esto se ve, especialmente, en la contracción económica de la mayoría de los países, lo cual genera una menor demanda externa. La mayoría de las exportaciones se vinculan con el área de la salud y las personas, aunque el resto del escenario parece ser desfavorable para un territorio que tiene una fuerte perspectiva sanitaria, pero que no está sabiéndola aprovechar.

Se trata de un país que, además, tiene una gran ganancia por parte del turismo, además de una fuente fundamental de divisas. Tal es así que, según informa la web de Escambray, decidieron “priorizar la atención al turismo”, reorganizando la actividad bajo estrictas medidas de seguridad y protección. Se trata de un desafío totalmente necesario, donde el foco ya no parece estar enfocado en la extrema seguridad higiénica, sino en la necesidad económica de sus habitantes.

Lea también: 7 consejos para mejorar la interaccion con el cliente en la banca

Desde Cubanet también informan el tránsito de la “peor crisis alimentaria que se recuerda en 25 años”. Como bien habíamos mencionado, la isla ya había tenido problemas en el 2019 con el abastecimiento de productos de primera necesidad. No obstante, el paro productivo actual implica que la gente, actualmente, vaya a los mercados a comprar “cualquier cosa”, donde hay productos que ya no abundan, como la pasta de dientes o la carne enlatada.

Todo este contexto está provocando cambios inesperados dentro del territorio, que siempre intentó apostar a la autosuficiencia. Uno de ellos se da, tal y como revela la web de RFI, en el intento de evadir la crisis con una “dolarización parcial de la economía”. Es decir, comenzaron a habilitarse tiendas para vender productos de primera necesidad en dólares, euros y otras divisas.

Con este panorama complejo, la incertidumbre de cara al futuro es muy grande. Por ejemplo, desde DW hablan de un “colapso económico inevitable”, en el sentido en que hay un parón importante en la producción local, como ocurre con la agricultura. Por lo tanto, resta por ver cómo Cuba busca solucionar sus inconvenientes, tanto en materia económica como sanitaria.