CONMEBOL quiere un fútbol de UEFA en Suramérica. ¿Error o acierto?
Establecer la final única en la Libertadores y en la Sudamericana, así como incluir a las selecciones que la conforman en la Nations League, hacen parte de las medidas con las que la CONMEBOL pretende mantener un nivel competitivo que atraiga a los fanáticos.
Foto: Conmebol
LatinAmerican Post | Juan Andrés Rodríguez Murillo
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La Confederación Sudamericana de Fútbol, CONMEBOL, a cargo del paraguayo Alejandro Domínguez, ha tenido muchos cambios en la última década. Varias medidas tomadas han mostrado una tendencia de acercar, tanto como es posible, el fútbol sudamericano al fútbol europeo. Como ejemplo está jugar todo el año los dos torneos de clubes a su cargo y elegir una sede para la final de esos torneos.
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En cuanto a selecciones, la firma de un acuerdo de colaboración con la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol (UEFA, por sus siglas en francés) ha permitido revivir la Finalissima (la Copa de Campeones CONMEBOL-UEFA que este año ganó Argentina ante Italia) e incluir a los diez países sudamericanos en la Nations League. ¿Qué tan acertada ha sido la federación sudamericana?
Final única, como en la Champions
Este sábado 29 de octubre se jugará la final de la Copa Libertadores 2022 entre el Flamengo y el Atlético Paranaense. Se trata de la tercera final consecutiva entre equipos de Brasil y la cuarta con final única en una plaza elegida con anterioridad: el Estadio Banco Pichincha de Guayaquil, Ecuador, casa del Barcelona.
Desde que la CONMEBOL decidió establecer la final única para el torneo de clubes más importante del continente, al estilo de la Champions League, se ha cuestionado si es la manera que más conviene al torneo. Entre las dudas que surgen está el tema de la boletería: para el sábado se han vendido 11 mil boletas, lo que deja un excedente de 44 mil disponibles. Estimaciones previas hechas por el gobierno de Ecuador, hablaban de 50 mil personas; lo que se traducía en 50 millones de dólares, según el ministro de Turismo, Niels Olsen.
De acuerdo con Andrés Luna, periodista deportivo ecuatoriano, el problema de la final única está en el enfoque que la CONMEBOL pretende, dando prioridad a los turistas y dejando de lado a los fanáticos del fútbol de la ciudad de turno. El costo de las boletas (245 dólares, la más económica) aleja a los fanáticos ecuatorianos. “Probablemente, sea la boleta más cara de la historia del fútbol ecuatoriano”, afirma.
Para la final de la Copa Sudamericana de este año, que disputaron el Independiente del Valle (Ecuador) y Sao Pablo (Brasil), se abrieron las puertas para que el estadio Mario Alberto Kempes (Córdoba, Argentina) tuviera más fanáticos en las gradas, indica Luna. Pese a lo anterior, en las transmisiones se pudo ver gran parte del estadio vacío.
El periodista ecuatoriano advierte que en Guayaquil no podría permitirse el libre acceso por los problemas de seguridad que enfrenta el país: “Diariamente, hay entre 20 y 30 asesinatos”. La mente de los ecuatorianos no está enfocada en el evento, sino en los problemas que enfrenta cada día: robos, asesinatos, enfrentamientos de bandas. Esto, sumado a los costos, alejan a la fanaticada local.
Sudamérica vs. Europa más seguido
En contraste con las críticas que han surgido con decisiones a nivel de clubes, el acuerdo entre la CONMEBOL y la UEFA incluir a Sudamérica en la Nations League a partir del 2024 no ha generado tantas opiniones en la prensa.
El torneo, que empezó a disputarse en 2018, sustituyó las fechas de juegos amistosos para establecer mayor competitividad y ofrecer mayores beneficios económicos por transmisión de partidos y premios, ya que la venta de los derechos se hace por la competición, no por partidos individuales.
La Nations League se divide por ligas —A, B, C y D— con ascensos y descensos. Seis países de Conmebol entrarán a la liga A: Brasil, Argentina. Uruguay, Paraguay, Chile y Colombia; las otras cuatro lo harán en la liga B: Ecuador, Perú, Bolivia y Venezuela, según lo dicho por el vicepresidente de la UEFA, Zbigniew Boniek.
La posibilidad de jugar de manera frecuente con selecciones de buen nivel llamó la atención de la prensa mexicana. México ha sido un participante recurrente de la Copa América y, en su momento, de la Copa Libertadores y de la Copa Sudamericana. El periodista Uriel Salmerón publicó el año pasado en 90min una columna titulada “Los beneficios que el futbol mexicano obtendría si participa de la Nations League junto a CONMEBOL” donde explicaba la necesidad de medirse con Alemania, Francia, Bélgica, etc. Cruces obligados para las selecciones de la liga A.
A la espera de resultados
De acuerdo al ranking FIFA y a las casas de apuestas, Brasil y Argentina están entre las cinco selecciones más opcionadas para ganar el Mundial de Qatar 2022. El desempeño de las otras dos clasificadas, Ecuador y Uruguay, más la confirmación de las candidatas, mostrarán qué tan cerca o lejos está Sudamérica del nivel europeo.
En clubes, por el contrario, la brecha parece inamovible: desde el Corinthians del 2012, la UEFA ha dominado el Mundial de Clubes. Incluso se han colado equipos de la Confederación Asiática de Fútbol y la Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol, Concacaf.
La final a partido único no parece atraer al público del continente, que sigue recordando las distancias y costos de traslado entre los países sudamericanos, donde no existen líneas de trenes que conecten y hay 7 mil millones de kilómetros más de superficie. A falta de datos que unifiquen la audiencia televisiva a nivel sudamericano, queda preguntar a las personas cercanas si recuerdan la final que ganó Independiente del Valle o si están programados para disfrutar la final de libertadores este fin de semana.