Reseña de “Un mundo extraño”: Una película con buenas intenciones que se queda corta

“Un mundo extraño” es la más reciente película de Disney Studios, que, en comparación a otros títulos como “Encanto” o “Lightyear”, parece que no ha tenido tanto alcance a nivel mediático. Incluso cuando esta nueva película tiene un personaje abiertamente gay (como en “Lightyear”) y fue amenazada de boicot por grupos de derecha. ¿Pero a qué se debe esto?

La película dirigida por Don Hall (“Big Hero 6” y “Moana”) y co-dirigida y escrita por Qui Nguyen (“Raya y el último dragón”) narra la aventura vernesca que emprende la familia Clade para averiguar qué sucede con el Pando. Esta es una planta que da energía a su país en medio de las montañas, Avalonia, y que ha generado un avance tecnológico sin precedentes desde su descubrimiento. A lo largo de la aventura, los personajes principales, abuelo, padre e hijo, enfrentan y resuelven las diferencias que han generado conflictos en su vida familiar y descubren que el monocultivo del Pando es un peligro para la subsistencia de su mundo. 

Los aciertos

A primera vista, “Un mundo extraño” podría parecer una película que se ganaría un público fiel por los temas que trata. Como podemos ver, tiene un claro mensaje eco-amigable, además lo da muy directamente al hablar de las consecuencias directas e indirectas del extractivismo y del monocultivo. Todo esto se da de una manera muy simpática y entretenida, a partir de elementos visuales que generan emociones fuertes en el espectador. 

Además, la película logra ser vanguardista en términos de representación: en primer lugar, tenemos a Ethan Clade, el más joven de la familia, un adolescente que es abiertamente homosexual. Lo más interesante de esto es que el problema que rodea al personaje no es su homosexualidad, pues ni su familia ni sus amigos ven esto como un problema o una anomalía. En ese sentido, la película normaliza un elemento que ha sido usado históricamente en el cine para revictimizar a esta minoría. La orientación sexual de Ethan en la película no es más que una característica del personaje. 

Por otro lado, los personajes masculinos son diversos. Jaeger Clade, el abuelo, es un hombre aventurero que abandonó a su familia para descubrir lo que había más allá de Avalonia, mientras que Searcher Clade, el padre, es un hombre sensible y familiar que ama las plantas y la granja. Así, Ethan, es aventurero como su abuelo, pero también tiene la sensibilidad de su padre y logra mediar las diferencias generacionales de su familia. Asimismo, aunque se desarrolla menos, “Un mundo extraño” cuenta con personajes femeninos fuertes.

Todo lo anterior se une a la maravilla visual que es la película, el diseño de personajes, de criaturas, del mundo e incluso de vestuario es siempre coherente, mantiene una estética muy bien definida y la verdad deja con la boca abierta. 

Sin embargo, esto no fue suficiente.

Lee también: Las series más esperadas para 2023 en plataformas de streaming

Los errores

Si algo es muy evidente es que en los últimos años, las producciones animadas a las que ha apostado Disney, tanto de parte de Disney Studios como de Pixar, son aquellas que tienen problemáticas de divisiones superadas a través de la aceptación, y no esas en las que hay un villano al que se deba superar. 

Sumado a esto, el drama generacional es el que más ha sido explotado por Disney en sus últimas cintas. Al igual que “Encanto” y “Red”, “Strange World” encuentra su problema argumental en las diferencias generacionales que ponen en riesgo la integridad de cada individuo de la familia, no de la familia en sí. 

En “Un mundo extraño”, lastimosamente, y a pesar de sus evidentes y buenas intenciones, sucede algo similar a lo que pasa con “Encanto”, la ejecución del argumento se queda corto, no se desarrolla lo suficiente para que la película pase de ser entretenida a realmente buena. Esto es completamente lo opuesto a lo que sí sucede en “Red”, en donde los personajes son explorados de maneras reales y profundas.

Incluso, me atrevería a decir que “Encanto” logra superar a “Un mundo extraño”, por lo menos en lo que respecta a su alcance. Quizás “Encanto” no logró tener una ejecución lo suficientemente fuerte para sostenerse por sí misma, pero su alcance mediático y el mínimo sentido y coherencia en su argumento lo logró. Sin embargo, “Un mundo extraño” se queda corta. Si no fuera por su potencia visual, la película se caería fácilmente. 

Esto sucede porque los personajes quedan desarrollados a medias. Parece que el esfuerzo del director y del guionista se centró en crear un mundo llamativo y hermoso, pero la historia, a pesar de su potencial, es floja y en algún punto incluso aburrido. 

Es una lástima que sea así, pues la película tiene aciertos. Sobre todo cuando se sabe que una historia que profundice en estas problemáticas y representaciones es tan necesaria. Esperemos que en una próxima ocasión Disney Studios logre superarse a sí misma no solo en lo visual, sino también en lo argumental.