Ecuador: al borde de un caos similar a Perú

El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, se enfrenta a la posibilidad de un juicio que podría terminar en un caos político similar al de su vecino del sur. Al mandatario se le acusa de peculado y la asamblea prepara un impeachment que podría terminar con la salida del mandatario.

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Estos últimos días, los asambleístas opositores han presentado sus pruebas y testigos. Desde hoy, miércoles, será el propio gobernante y su equipo los que presenten su defensa. En principio, Lasso no será requerido en esta instancia y podrá ser su abogado, Édgar Neira, quién tramite la defensa. Posteriormente, será la Comisión de Fiscalización la encargada de realizar un informe con base a las pruebas presentadas. 

¿Por qué se busca destituir a Guillermo Lasso?

Al presidente ecuatoriano se le acusa de peculado por haber mantenido un contrato público entre la empresa pública de transporte de petróleo (Flopec) y la empresa Amazonas Tanker Pool. Según los congresistas que buscan someter a Lasso a una votación para removerlo del cargo, el presidente conocía de irregularidades al interior de Flopec y no actuó sobre el caso.

Este hecho ha generado también una investigación paralela por parte de la Fiscalía. El ente acusador ecuatoriano abrió el caso cuando el portal La Posta reveló audios entre altos cargos de la empresa y que salpican al cuñado de Guillermo Lasso.

En su defensa, el mandatario y su equipo insisten en que la firma del contrato ocurrió en administraciones pasadas, desde el 2018, durante la administración de Lenin Moreno. El pasado 30 de marzo, la Corte Constitucional de Ecuador determinó que el juicio político por peculado era posible. Sin embargo, a su vez, desestimó otras dos acusaciones por delitos de concusión.

Un Dejavú con Perú

Perú lleva más de 4 meses en crisis política e institucional luego de que el presidente Pedro Castillo fuera destituido por el congreso peruano. Esto sucedió después de que él mismo intentó disolver el congreso. No obstante, la crisis institucional venía desde hace mucho antes, cuando el mismo Castillo estaba sobreviviendo a varios intentos de juicios políticos.

A pesar de las similitudes entre ambos juicios políticos y las amenazas de convocatoria a nuevas elecciones, también hay diferencias entre ambos procesos. En primera medida, Ecuador no atraviesa la profunda crisis institucional que ocurre en Perú. La inestabilidad de los últimos gobernantes plantea un panorama casi imposible de que en Perú un presidente cumpla su periodo constitucional, mientras que en Ecuador, no hace mucho, hubo una transición democrática entre Lenin Moreno y Guillermo Lasso. A su vez, Moreno recibió el cargo de su exlíder político y ahora enemigo, Rafael Correa.

De llegar al caso en que la Asamblea vote favorablemente y Lasso cumpla con su advertencia de disolver al legislativo, la comunidad latinoamericana deberá saber si toman la misma postura que tomaron en Perú. Aquellos que están en contra de la destitución y captura de Pedro Castillo, deberán tomar posición con Lasso y viceversa.

¿Qué se necesita para que el juicio político llegue a “buen puerto”?

Luego de que la Corte Constitucional ecuatoriana diera vía libre a un juicio político por peculado, los legisladores tienen 45 días realizar el proceso. Ahora se presentaron los argumentos y posteriormente deberá existir una votación de la plenaria.

Para destituir a un presidente, se requiere de dos terceras partes de la Cámara, lo que significa 92 votos a favor. En estos momentos, los principales partidos de oposición: Movimiento Revolución Ciudadana (47) y el Partido Socialista Cristiano (15) suman 62 votos, lo que da una mayoría simple. Sin embargo, podrán buscar los votos del Movimiento de Unidad Plurinacional Pachakutik (24) y de Izquierda Democrática (15), que a pesar de tener acuerdos con el gobierno Lasso, tienen ideología progresista. De lograr todos los apoyos, sumarían los votos necesarios. No obstante, el Gobierno de Lasso igual tendrá que mantener el apoyo de, al menos, 10 legisladores de oposición.