ECONOMÍA

FED: ¿Qué representa el alza de las tasas de interés para la economía de Latam?

La Reserva Federal de Estados Unidos (FED) discutió sobre subir la tasa de interés en 25 puntos básicos o dejar esta práctica, que ha propiciado que varios bancos vayan a bancarrota, migrando hacia nuevas propuestas que permitan controlar la inflación a nivel global.

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LatinAmerican Post | David García Pedraza

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Mayo ha comenzado con una nueva maniobra para mitigar los estragos de la inflación y la crisis bancaria que está sacudiendo al sector financiero de Estados Unidos y el mundo. Con la puesta en marcha de subir 25 puntos básicos a las tasas de interés, estas quedaron fijadas entre el 5% y el 5.25%. Este acto constituye la décima subida que se ha presentado en el último año, lo que crea cierta inestabilidad en el sector bursátil.

La presión de los bancos para no declararse en quiebra, sumado a la inflación que cada vez más devalúa varias divisas a nivel mundial, ha puesto en aprietos a la Reserva Federal de Estados Unidos. La FED aspira, a largo plazo, lograr el máximo de empleos en la nación y estabilizar la inflación a una tasa del 2%, la cual actualmente se encuentra en 5%.

No obstante, estas metas están lejos de poder cumplirse debido a la variabilidad constante del comportamiento financiero en el mundo. Estos estragos económicos se divisaban desde el inicio de la pospandemia y, aun así, no se les ha podido hacer un frente sólido. El temor más grande es la recesión económica y la quiebra de más entidades financieras, ocasionando así un ambiente de desconfianza mayor al actual.

La realidad del gigante capitalista 

El caso que marca la penosa situación bancaria en Estados Unidos es la quiebra del Silicon Valley Bank, un banco prometedor para la población norteamericana. A pesar de que la FED reconoció que las supervisiones realizadas a esta entidad no fueron las mejores y que era, y sigue siendo, la encargada de rescatar a los clientes de este banco, esta fuerte pérdida afectó la tensa estabilidad económica que manejaba Washington.

Otro banco que se declaró en quiebra recientemente fue First Republic Bank, entidad que no pudo llevar a cabo un plan óptimo de rescate y la cual perdió más de cien mil dólares entre enero y marzo de 2023, lo que generó un desplome en sus acciones. Este banco será adquirido por JP Morgan, el cual asumirá gran parte de los activos y todos los depósitos de los clientes, incluyendo los no asegurados.

A esta lista se une Signature Bank, dedicado a criptomonedas. Así, son tres las entidades financieras que se han declarado en quiebra, una situación que no se veía desde el 2008 con la crisis a raíz de la burbuja inmobiliaria.

En la actualidad, la Reserva Federal ha anunciado que ofrecerá programas de financiamiento con el fin de otorgar préstamos a las entidades bancarias en época de crisis. Además anunció que los clientes que se encuentren en los bancos en quiebra no tendrán pérdidas monetarias, ya que se devolverán sus dineros de manera paulatina. Los expertos coinciden en que la economía estadounidense está estable y le atribuyen este tambaleo a la carencia de confianza por parte de los clientes.

La situación por debajo del Río Bravo

América Latina fue una de las primeras regiones donde las tasas de intereses tuvieron un alza, para escatimar los estragos que traería la inflación luego de la etapa fuerte de la pandemia. Desde el Fondo Monetario Internacional se ha expresado que la región necesita que estas tasas continúen al alza y se prolonguen hasta el 2024 para controlar el fenómeno inflacionario.

A pesar de que la misma organización prevé que durante el 2023 América Latina alcanzará un crecimiento económico del 1.6% y para el 2024 del 2.2%, el alza de las tasas es un tema muy criticado por los gobiernos de Brasil y de Colombia, principalmente.

Sin embargo, gracias a la caída de los precios de los alimentos en Brasil, la inflación del gigante latinoamericano se ubicó en 4.65%. El gobierno de Lula considera que son muy altas las presiones para seguir incrementando las tasas de interés, además de estar lejos de la meta de 3.65% que se fijó para este año.

Otra nación cuya inflación tiende a la baja es México, la cual marca un sorpresivo 6.85%, la más baja en año y medio. Son los productos agropecuarios y energéticos los que más bajaron. Dos de las naciones más extensas de América Latina muestran una ligera recuperación, aun así no es suficiente para sus gobiernos ni sus pobladores, quienes se alistan con sus respectivas carteras de hacienda para reajustar sus tasas de interés con el fin de no retroceder en su lenta compensación en el mercado bursátil.

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Un efecto de lenta recuperación motiva la confianza inversionista

Con la declaración del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, al decir que se está más cerca del final que del principio en este ciclo de constantes subidas, gracias a las alzas en las tasas de interés, se espera que se retorne la confianza accionaria en los clientes del sector bancario.

Se le suma a este intento de fidelización con la banca, las garantías que ha dado la FED con la respuesta de devoluciones de capital a los clientes de las entidades bancarias que han caído en bancarrota, además de los anuncios de ayudas financieras a estas empresas por medio de préstamos.

No obstante, el mundo sigue pendiente de cada movimiento bursátil y decisión económica de Estados Unidos, ya que la estabilidad del dólar, al ser considerada la divisa universal, afecta la economía mundial. Ya depende del actuar de los gobiernos sobre cómo enfrentar la situación en particular.

La Reserva Federal no pensará dos veces en volver a incrementar las tasas de interés si lo considera necesario. Esta información no cae del todo bien en la opinión pública, especialmente en la clase trabajadora, ya que esto se materializa en la subida de precios desde los alimentos y gasolina hasta la adquisición de créditos o préstamos bancarios. Tal vez esto sea una oportunidad para ahorrar o para dar el paso de invertir en proyectos estables que permitan una leve, pero segura, ganancia individual.

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