En septiembre, 13 países latinos se reunieron en Quito con el objetivo de encontrar vías para garantizar la protección de los derechos humanos de los venezolanos

El 3 y 4 de septiembre se realizó en Quito la "Reunión Regional sobre movilidad humana de ciudadanos venezolanos en las Américas", la cual fue inaugurada por el canciller ecuatoriano en funciones, Andrés Terán, quien reemplaza al canciller José Valencia, quien se encuentra acompañando al presidente Lenín Moreno en su visita oficial a Japón.

Read in english: 11 countries will welcome Venezuelans with expired documents

En dicha reunión, representantes de 13 países de América Latina se reunieron con el propósito de intercambiar información, criterios, conocimientos y experiencias, para hallar la forma de articularse regionalmente e intentar armonizar respuestas con respecto al históricamente inusual y considerable incremento del flujo migratorio de ciudadanos venezolanos en la región.

Al finalizar, los países hicieron pública la Declaración de Quito, un documento en el que expresaron sus intenciones de fomentar la "apertura de un mecanismo de asistencia humanitaria que permita descomprimir la crítica situación, brindando atención inmediata en origen a los ciudadanos afectados". Además, ratificaron el compromiso de los Estados de la región de proveer a los ciudadanos venezolanos en situación de movilidad humana, el acceso a los sistemas de justicia, a los servicios de salud y educación pública y finalmente a las oportunidades en el mercado laboral.

Para el canciller existe un gran número de venezolanos que por diversas razones no tienen regularizado su estatus migratorio y son altamente vulnerables a la trata de personas, al tráfico ilícito, la explotación laboral o a cometer delitos internacionales como migración irregular o clandestina.

Según cifras de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM) y de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), aproximadamente 2,5 millones de venezolanos han salido del país en los últimos cuatro años y se ha incrementado de forma considerable durante este último año.

El representante de la Organización de las Naciones Unidas en Ecuador, Arnaud Peral, aplaudió la convocatoria del gobierno de Ecuador y expresó su esperanza de que los países encuentren las vías apropiadas para garantizar la protección de los derechos humanos de esta ola migratoria, y que logren desarrollar "rutas de protección específica para niños", al tiempo que se logren acuerdos para luchar contra la discriminación y la xenofobia.

Para el representante, hoy son los venezolanos los que enfrentan esta crisis, pero mañana podrían ser los ciudadanos de otro país latinoamericano, por eso es importante el apoyo regional.

La declaración fue firmada por representantes de los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, Ecuador, México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay. Cabe destacar que la invitación no fue bien recibida por el gobierno de Venezuela, que no asistió ni envió algún tipo de justificación por su inasistencia.

Le puede interesar: Argentina: ¿Por qué hay polémica con las medidas de Macri?

El papel del gobierno venezolano

A pesar de las cifras de organizaciones dedicadas al estudio de la migración en la región, durante los últimos días el gobierno venezolano ha negado contundentemente y en reiteradas ocasiones que exista un éxodo venezolano. Ante la Declaración de Quito, la República Bolivariana de Venezuela, según declaró la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez, enviará una nota diplomática en la que se presentará una protesta formal ante esta reunión, ya que a su parecer, promueve "las campañas de xenofobia contra los venezolanos en el exterior y atenta contra la dignidad de los venezolanos".

Diosdado Cabello, el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente que a fines del gobierno reemplaza al Parlamento, también rechazó enérgicamente la declaración, al tiempo que cuestionó la moral de estos países, principalmente la de Brasil y Colombia, para referirse a los asuntos del país bolivariano.

"Esa declaración de ese grupo da asco y da vergüenza, se les va a revertir (…) Quieren matar a la Unasur, al Alba y renacer la CAN", dijo Cabello desde el Palacio Federal Legislativo en Caracas, donde tuvo lugar una sesión especial del órgano legislativo en respaldo al Plan Vuelta a la Patria que impulsa el presidente Nicolás Maduro.

El Plan Vuelta a la Patria aprobado el 4 de septiembre por decreto constitucional de la Asamblea Nacional Constituyente, la cual según la Constitución de la República no tiene poder en esta materia, tiene como objetivo apoyar a los venezolanos que emigraron y tienen el deseo de regresar a Venezuela.

Durante la sesión en la que se aprobó dicho plan, el presidente de la ANC, Diosdado Cabello, informó que "la Revolución Bolivariana tiende la mano a los venezolanos que partieron a otras naciones y hoy deciden regresar". Asimismo, el diputado de la ANC, Angelo Rivas, expresó que "la creación de este plan forma parte de una contraofensiva para desmontar la matriz de opinión de una supuesta crisis humanitaria por la migración de venezolanos para justificar una intervención extranjera".

"No existe crisis humanitaria en Venezuela y denuncio que EE.UU. ha promovido esta matriz de opinión, siendo Colombia de los primeros países en hacerse eco de ello", declaró el constituyente.

Por otra parte, la Asamblea Nacional, de forma unánime, emitió un acuerdo el 29 de agosto en el que se declaraba que “deben considerar prorrogados los pasaportes vencidos” de los venezolanos hasta por un lapso de cinco años a partir de la emisión del acuerdo.

Esta decisión se tomó teniendo en cuenta a los millones de venezolanos que han salido del país durante los últimos años, los cuales “no reciben respuesta apropiada, eficaz y eficiente por parte de las autoridades consulares en los países en los que se han radicado”, en especial en materia de emisión de pasaportes, lo que pone en riesgo el estatus legal de los venezolanos en el extranjero.

LatinAmerican Post | Camila González C.

Copy edited by Diana Rojas Leal