Brasil: la enmienda que podrá cambiar las reglas del aborto
Cada 10 minutos una mujer es asaltada sexualmente en Brasil, pero el país estudia cambiar reglas del aborto para estos casos
El letrero sostenido por la joven mujer en las calles de Río de Janeiro tenía escrito: “Eu não vou ter um filho do meu estuprador” (“No voy a tener un hijo de mi violador”). A su lado, otra joven llevaba un cartel con la inscripción “É pela vida das mulheres” (“Es por la vida de las mujeres”).
Las dos, junto a otras miles de mujeres (y también hombres) en Brasil, son parte de un movimiento que se ha manifestado y marchado en las principales ciudades del país recientemente, para protestar contra un proyecto de enmienda constitucional que busca prohibir el aborto en tres circunstancias que hoy son legales: cuando el embarazo se haya generado a través de una violación sexual, cuando haya riesgo vital para la madre o cuando el feto es anencéfalo. De acuerdo con el proyecto, el aborto debería pasar a ser prohibido incluso en estos casos.
El proyecto, la PEC 181, todavía está bajo análisis de una comisión especial de Diputados encargada de definir el texto final de la enmienda. En la primera votación para la aprobación del texto, 18 Diputados votaron a favor y solamente 1 votó en contra. Los 18 en favor son hombres y la única en contra es mujer.
Por esa razón, durante las recientes marchas en Brasil, las redes sociales se inundaron con la hashtag #TodasContra18, alegando que 18 hombres no deberían estar encargados de definir el futuro de las mujeres. La comisión todavía hará una nueva votación. Después el texto de la emenda sigue para la aprobación en la Cámara de Diputados y en el Senado (Cámara Alta).
El momento no podría ser peor para discutir ese cambio de ley. Hace algunas semanas, a finales de octubre, fue publicado en Brasil el Anuário Brasileño de Seguridad Pública, un reporte con las estadísticas de la violencia en el país referentes al año anterior. Los números acerca de la violencia de género informados en este boletín fueron, para decir lo mínimo, asustadores.
Hubo en 2016 en Brasil un total de 49.497 casos de violación sexual, lo que significa que una mujer es violada cada 10 minutos en el país, aproximadamente. Así es: cada 10 minutos, una nueva víctima, lo que representa un aumento de 3,5% para el año anterior. Además, el boletín reveló que 4.657 mujeres fueron asesinadas en el país durante el mismo período, es decir, una víctima cada dos horas.
Mientras estadísticas como estas salen a flote, un grupo de Diputados, hombres, estudia la posibilidad de prohibir el aborto incluso en caso de violación sexual, utilizando el argumento de la protección a la vida. Más de 4.600 mujeres fueron asesinadas en Brasil en 2016. Podríamos haber protegido a estas vidas también.
Latin American Post | Caio Ferretti
Copy edited by Laura Rocha Rueda