El español Alejandro Cao de Bernós explica la posición del país asiático

Recientemente se habla mucho sobre la política exterior de Corea del Norte, pero lo cierto es la información oficial de la que se dispone es muy poca ¿Qué tiene para decir uno de sus diplomáticos más reconocidos? ¿Cómo ve Corea del Norte la situación internacional actual?

No será una novedad hablar de la poca información que se tiene sobre Corea del Norte. A través de la prensa hemos conocido que es un país de economía socialista, gobernado por una familia que se cede el poder por descendencia y que se caracteriza por sus gustos y comportamientos particulares.

El líder político de la República Popular de Corea del Norte se llama Kim Jong-un, de 34 años, en el poder desde 2012 tras la muerte de su padre, quien a su vez había estado en el cargo desde 1994. Recientemente sabemos algunas cosas sobre él, principalmente que mantiene una constante tensión militar con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump. Justamente esta aparente posibilidad de enfrentamiento ha sido fuente suposiciones y preguntas en torno a lo que podría ocurrir si “se apretara el botón”, como decían las canciones de rock de los ochenta refiriéndose a la posibilidad de que algunas de las potencias empezaran la guerra, en plena Guerra Fría.

Las constantes pruebas de armamento por parte del ejército de Corea del Norte y los bloqueos económicos de Donald Trump han envilecido aún más el ambiente. Los medios de información en su amplia diversidad han intentado ofrecer análisis de la situación y, en esa dinámica, ha aparecido como referente la voz de Alejandro Cao de Benós, Delegado Especial del Comité para las Relaciones Culturales con Países Extranjeros de Corea del Norte. Cao es español, nació en Tarragona hace 42 años y desde hace 20 que selló relaciones con el país asiático por medio de su militancia política. Ante un panorama con poca información oficial desde ese país, este representante diplomático se convierte en una especie de testimonio a la hora de hablar de lo que está ocurriendo.

Para Cao de Bernós, la tensión que se vive entre Corea del Norte y los EEUU se debe al interés estratégico que tiene el gobierno de Donald Trump en el país de la península asiática. En una entrevista concedida a la radio pública española, el representante de norcorea sostiene que esto se explica en dos factores fundamentales. El primero y más importante para el gobierno coreano es la posición geoestratégica que ocupa Corea. De hecho, esta no es la primera vez que la península se convierte en territorio de interés: históricamente el imperio chino, el mongol y el japonés intentaron tener un control militar y económico en la península. Dice Alejandro Cao que Corea es un lugar de paso estratégico en el sudeste asiático: por ejemplo, por allí atraviesan los gasoductos rusos y, en invierno, las aguas de los puertos coreanos no se congelan como sí ocurre con los de otros países de la región. En segundo lugar, el gobierno de Corea del Norte ha insistido en que los EEUU tienen un interés en los yacimientos de oro del país y principalmente, en tierras raras, unos extraños metales que son fundamentales para el desarrollo de la tecnología aeroespacial.

A lo anterior, debemos sumar la tensión ideológica constante entre lo que representan los EEUU y Corea del Norte, es algo así como el último rezago de la Guerra Fría. Así las cosas, de darse un enfrentamiento directo, ¿cuáles serían los aliados? ¿Qué bloques se conformarían?

Con respecto a este tema, el representante del gobierno de Corea del Norte es bastante cauto. Insiste en destacar las buenas relaciones comerciales que sostienen con Rusia e insiste en que esa relación es un ejemplo perfecto de cómo un país con economía capitalista puede desarrollar relaciones cordiales con uno socialista. Aunque no se anima a decir que Rusia está de su lado, hace entender que el dinero de los rusos invertido en Corea del Norte en materia de infraestructura y en materia militar es demasiado importante.

El dinero que invierte Corea del Norte en su desarrollo militar no es poco: corresponde al 15% de su Producto Interno Bruto. La explicación de ese elevado porcentaje es clara. Dice Cao de Bernós que desde la caída de su socio histórico, la Unión Soviética, han visto la necesidad de enfocarse en el campo militar: de hecho, insiste, el desarrollo de la bomba termonuclear a la que todo el mundo está temiendo hoy, es una garantía de paz pues esto garantiza que sus antagonistas internacionales se lo pensarán dos veces antes de atacarlos: “lo que tenemos es un arma 100 veces más fuertes que la que conocemos de Iroshima. Las consecuencias de su detonación serían fatales para todo el mundo, eso nos da la garantía de que no se meterán con nuestro país”, le manifestó Cao a la radio.

Pese a esta tensión militar, el representante de Corea del Norte insiste en que paralelamente trabajan en buscar una solución diplomática a la actual tensión. Son más de 25 delegados norcoreanos que se encuentran actualmente en Nueva York adelantando diálogos con representantes de ONU y de la Secretaría de Estado de los EEUU. Una mano en el botón y la otra en el ramo de olivo, así trabaja en este momento la diplomacia de Corea del Norte.

Latin American Post | Pedro Rojas Oliveros

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