Costa Rica: 48 días en protestas

Durante más de mes y medio, Costa Rica se ha enfrentado a una de sus huelgas más importantes de las últimas décadas

Desde el 10 de septiembre, las calles de Costa Rica se han inundado de miles de personas que protestan en contra del proyecto de reforma fiscal, también llamado "combo fiscal". Esta reforma, presentada por el presidente costarricense Carlos Alvarado, pretende tratar de salvar la economía de ese país, dado que a comienzos de este año el país poseía una deuda de  ₡16 millones de colones costarricenses, como lo indica la Nación.

Sumado a esto, el mismo medio afirma que Costa Rica se encuentra en el peor déficit fiscal de los últimos años, teniendo así que los gastos del estado son mayores a los ingresos que el Gobierno registra. La intención de Alvarado es hacer la economía costarricense atractiva "para los financista internacionales para mejorar las condiciones de la deuda", como lo reporta El País.

Así, mediante "la transformación del impuesto de ventas en un impuesto sobre valor agregado (IVA) lograría poner un 1% a los productos agropecuarios de la canasta básica y un 2% a los demás productos de la misma", según la Nación. Además de elevar el impuesto de renta, ampliar la renta de ventas a nuevos sectores y limitar el crecimiento de beneficios salariales de empleados estatales.

De inmediato varios sectores de Costa Rica decidieron realizar protestas para evitar el aumento y la creación de nuevos impuestos. Los sindicatos se pronunciaron afirmando que esas reformas sólo serían beneficiarias para sectores altos de la población, mientras que la clase media y baja serían realmente los afectados.

El presidente del Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Educación Costarricense (SEC), Gilbert Díaz y en declaraciones con BBC, afirmó que "No resuelve el problema" y añade que "Le han vendido a la población que urge ya ya esa aprobación, porque no hay liquidez, pero en definitiva es un ataque totalmente al pueblo. Esto viene a dar más pobreza, a contraer la economía, viene a dar más desempleo. Por eso estamos en las calles".

Reforma inminente

A los sindicatos de trabajadores se les unieron miles de profesores que son los que alimentan la huelga, tras ir perdiendo apoyo de algunos sindicatos. Son los educadores quienes apoyan de manera incondicional la protesta, y junto con el grupo que coordina la huelga decidieron seguir protestando hasta que el presidente decida retirar la propuesta de la reforma fiscal.

Frente a lo anterior, el presidente Alvarado se manifestó afirmando al medio Noticias Columbia que: "He hecho todo, absolutamente todo lo posible por impulsar la reforma fiscal para proteger a Costa Rica de una crisis que empobrecerá a todos, en especial a los que menos tienen".

A pesar de las constantes discusiones en torno a la ley, pareciese que dentro del Congreso también existiera una especie de polarización. Pues si bien fue apoyada con un 61%, existen magistrados de la Corte Penal que piensan que el proyecto "perjudica al funcionamiento del Poder Judicial", como lo afirma AM Prensa.

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¿Es la solución?

El presidente Alvarado ha defendido y recalcado la importancia de la reforma, afirmando a Noticias Columbia que "Es un problema que hemos postergado por más de 18 años y que tenemos que resolver ya. Hay presiones sobre el tipo de cambio. Hay presión sobre las tasas de interés. Las calificadoras de riesgo han alertado sobre la situación. No nos vengan a decir ahora que esto es un invento porque el Ejecutivo no controla estos signos". No obstante, pareciera que la solución no es tan efectiva.

Según el Instituto Centroamericano de Estudios Fiscales (Icefi), la reforma fiscal que se pretende hacer no es suficiente frente al constante crecimiento de la deuda. Uno de los economistas del Instituto, Abelardo Medina, manifestó en una rueda de prensa que "La propuesta no es suficiente para alcanzar la sostenibilidad y descuida la suficiencia fiscal. No es una modernización del sistema tributario, sino una ligera transformación que mantiene privilegios históricos".

No cabe duda que Alvarado está sacando a flote la economía de Costa Rica ya sea a corto y mediano plazo. Como lo afirma El País "Alvarado trata de frenar el severo deterioro de las finanzas públicas y poner límite al déficit público, que ya está dejando sentirse sobre la economía, en plena fase de desaceleración".

Entretanto, Alvarado tendrá que llegar a un acuerdo con lo miles de protestantes que durante más de mes y medio han inundado las calles de Costa Rica. La reforma será un primer paso para tratar de estabilizar la economía y tal vez, sea la primera de varias.

Según lo dicho por Medina "será necesaria una segunda reforma aún si se cumplen las proyecciones del Banco Central de Costa Rica, que indican que con los ajustes de gastos que contiene la reforma sumado a los ingresos frescos, se reducirá el déficit en 3.7 puntos del PIB al año 2022".
 

LatinAmerican Post | Laura Viviana Guevara Muñoz

Copy edited by Diana Rojas Leal

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