Elecciones en España: ¿Es el momento del independentismo?

El pasado 23 de julio los españoles fueron convocados para unas elecciones anticipadas llevadas a cabo por el presidente Pedro Sánchez. El líder del Partido Socialista tomó esta decisión luego del revés electoral en las elecciones regionales, en las cuales el PP se fortaleció y muchos estimaban una clara derrota de Sánchez en las próximas votaciones. Esta jugada parece haberle dado resultado.

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Pese a lo esperado por las encuestas, los resultados del Partido Popular no fueron tan positivos como se esperaba. Esto, principalmente por el rendimiento final del PSOE, quienes lograron un mejor resultado.

Partidos Catalanes

Luego de los 4 partidos grandes, PP, PSOE, VOX y Sumar, quedaron 2 partidos que podrían desequilibrar la balanza: Junts per Catalunya y Esquerra Republicana Catalunya. Ambos con 7 puestos en el congreso. A pesar de que ambos perdieron puestos en el Congreso (1 y 6, respectivamente) mantienen relevancia. Con solo uno que decida entrar a la coalición de derecha (poco probable) podrían darle la presidencia a Alberto Núñez Feijóo inmediatamente. Por su parte, Pedro Sánchez deberá contar con el apoyo de ambos si quiere evitar una segunda convocatoria a elecciones. Incluso, según las suficientes abstenciones, podría llegar en segunda votación.

Ambos movimientos son de inclinación independentista, tanto así que el exlíder de Junst Carles Puigdemont fue quien convocó al referendo independentista que Madrid consideró ilegal y por ende, el político catalán hoy vive en el exilio.

Los dos movimientos luchan y tienen el máximo ideal de una independencia pacífica del poder central en Madrid. Tanto Junts como ERC buscan la conformación de una Cataluña independiente y republicana. En la segunda votación del 2019, Junts votó negativamente la investidura de Pedro Sánchez, mientras que ERC se abstuvo para facilitar la mayoría simple al líder del PSOE. Para este año, Sánchez deberá contar con un mayor apoyo.

Por ahora se baraja que ambos partidos negocien en bloque con Sánchez para una posible investidura. Sus líderes dejaron entrever que serán más exigentes que en el pasado y que buscan varios logros.

Partidos Vascos

Luego de los partidos catalanes, los movimientos vascos también sumaron importantes apoyos. EH Bildu. De Mertxe Aizpura; y el Partido Nacionalista Vasco igual pueden determinar el resultado electoral en el Congreso. Eh Bildu obtuvo 6 diputados (1 más que las pasadas elecciones) y el PNV llegó a 5 (1 menos que hace 4 años). Esto significa que juntos pueden darle la victoria a Feijóo, o que, por lo menos EH Bildu es necesario para que Sánchez sea reelecto (y con las suficientes abstenciones).

En 2019, el PNV votó a favor de Pedro Sánchez, mientras que EH Bildu se abstuvo. Ambos votos fueron esenciales para que el PSOE conformará gobierno.

Partidos minoritarios

También en el Congreso quedaron grupos como la Coalición Canaria (1 diputado), la Unión del Pueblo Navarro (1) y el Bloque Nacionalista Galego (1). Actualmente, no representan mayor diferencia para una candidatura de derecha, pero sí serán vitales para Pedro Sánchez.

Coalición Canaria, no es un partido con ideología independentista, si se compara con los movimientos catalanes o vascos, pero sí lucha por mayor autonomía en las Islas Canarias. Por su parte, el BNG sí busca una independencia de la región gallega en España, pero bajo parámetros de izquierda, lo que la acerca al PSOE. Mientras que el UPN son más cercanos al PP y posiciones conservadoras.

En 2019, el UPN y Coalición Canaria  votó en contra de Sánchez; mientras que el Bloque Nacionalista Galego votó a favor. 

Un resultado incierto

A pesar de que tanto para el PSOE como para el PP ceder ante una consulta o referéndum separatista en Cataluña o el País Vasco o en cualquier otra comunidad autónoma sería contraproducente, hoy estos partidos tienen la fuerza necesaria para lograr acuerdos favorables. Ya sea que busquen mayor presupuesto para los gobiernos autonómicos, o mayor autonomía, o hasta participación en el Gobierno. Incluso, posibles indultos a líderes políticos (como Puigdemont) podrían ser puntos posibles para estas elecciones.

No obstante, ceder demasiado podría convertirse en la pérdida de apoyos en el resto de España. Sería comprometer las elecciones a futuro por ganar las más inmediatas. Los partidos independentistas no tienen mucho que perder y podrán poner líneas rojas y bloquear la elección de presidente de Gobierno y obligando a otra votación. No obstante, si esto llegase a pasar, podrían perder puestos en el Congreso, cuando posiblemente aumente el voto útil.