Kara-Murza: el último gran opositor de Vladimir Putin condenado a 25 años de prisión
Desde abril de 2022, Kara-Murza se encontraba detenido a espera de una decisión que lo dejase en libertad o lo privara de esta. Un año después, un tribunal de Moscú lo condenó a dos décadas y media de cárcel por alta traición y falsas informaciones sobre el ejército ruso
Foto: Michał Siergiejevicz
LatinAmerican Post | David García Pedraza
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La oposición política rusa, o concretamente hacia el gobierno de Vladímir Putin, no la ha tenido fácil en la última década. Con la poderosa fuerza que tiene el presidente ruso en el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial se podría decir que es intocable y sus órdenes se pueden dar como un hecho. El poder de Putin esta vez se hace tangible con el encarcelamiento de uno de sus detractores más conocido, su homónimo Vladimir Kara-Murza.
Miembro del Partido de la Libertad Popular, Kara-Murza ha sido un férreo opositor a la guerra entre Moscú y Kiev, a las acciones tomadas por Putin para ejercer control sobre la sociedad rusa y a la falta de garantías de libertad democrática desde el Kremlin. Esta oposición la viene forjando desde el año 2000, cuando Putin fue elegido para su primer mandato presidencial.
Kara-Murza también se desempeñó como coordinador de la organización Rusia Abierta, una comunidad dedicada a defender y proteger los derechos humanos en esa nación. Actualmente, se encuentra inactiva debido a que en 2017 la Oficina del Fiscal de Rusia la categorizó como ‘indeseable’ por lo cual tuvo que cesar sus actividades en la nación.
Político y periodista, Kara-Murza fue detenido en abril de 2022 por desobedecer a un oficial de policía. Al quedar detenido se le imputaron más cargos como colaboración con la OTAN y divulgador de información falsa contra el Ejército ruso y alta traición. Por estas, se le sentenció a 25 años de prisión, una condena radical, según la opinión pública.
Kara-Murza: La nueva cara de la opresión a la oposición rusa
En la dos cámaras de la Asamblea Federal de Rusia, que es el órgano legislativo de la nación, el partido de gobierno goza de inmensa mayoría, tanto en la cámara alta con 142 sobre 178 legisladores, y en la baja con 326 sobre 450. Es imposible llegar a considerar que la oposición rusa llegue siquiera a ser tenida en cuenta para radicar leyes. Además de ser minoría, la persecución política es evidente, tanto así que los parlamentarios contrarios a Putin deben pensar dos veces lo que dirán y cómo lo dirán.
El gobierno ruso se ha caracterizado por detener, encarcelar e incluso atentar contra los opositores a la Rusia de Putin, tanto así que Kara-Murza es uno más en la lista de los detractores del presidente ruso atrapado en el sistema judicial.
Estando cerca de la muerte dos veces, por culpa de envenenamientos atribuidos a órdenes de Putin, Kara-Murza quedó con lesiones físicas y patologías neuromusculares, por lo cual la cárcel sería más difícil de afrontar en esta situación. Además, según el abogado experto Vadim Prokhorov, el encarcelamiento en una prisión de máxima seguridad podría acabar con la vida de Kara-Murza.
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Los nombres de la oposición de Putin que permanecen en el recuerdo de la impunidad
Antes de Kara-Murza otros opositores destacados al gobierno de Putin se hicieron célebres a nivel mundial tanto por su esfuerzo en contra del régimen ruso como por sus finales fatales.
Uno de ellos fue quien inspiró a Kara-Murza a defender a Rusia de Putin y a convertir a la nación más extensa del planeta en una verdadera democracia, su nombre: Boris Nemtsov. Político y ex viceprimer ministro, fue un gran opositor de la anexión de Crimea a la geopolítica rusa en 2014, además de ser una cara conocida en las protestas antigubernamentales. Por estas acciones fue asesinado en 2015 en medio de las calles de Moscú.
El activista mundialmente conocido, Alexei Navalny, fue envenenado en 2020 en territorio ruso, al encontrarse en un avión y fue trasladado a Berlín para su tratamiento y recuperación. En 2021 retornó a Rusia y fue detenido por las autoridades federales. Actualmente, se encuentra condenado por presunto fraude. Recientemente, sus partidarios han denunciado que se le ha internado envenenar estando en prisión.
Los periodistas también tienen a su mártir rusa. Anna Politkovskaya, reportera de nacionalidad rusa y estadounidense, fue asesinada en el ascensor del edificio en donde vivía estando en Moscú. Sus reportajes y opiniones sobre el actuar del ejército ruso en medio de la guerra en Chechenia sellaron su muerte el 7 de octubre de 2006. Varios personajes apuntan a que este crimen fue un regalo de cumpleaños para Vladímir Putin, ya que ese día el mandatario celebraba sus 54 años. Politkovskaya había sido envenenada tiempo atrás con mercurio, lo que concluye que esta práctica no es nueva.
Un caso atípico es el del opositor Yevgeny Roisman, exalcalde de Ekaterimburgo, quien actualmente se encuentra en libertad, y quien se encuentra enlistado como ‘agente extranjero’ por el ministerio de Justicia ruso. Detractor junto con Kara-Murza de la guerra entre Ucrania y Rusia, a Roisman también se le ha tildado de desacreditar al ejército ruso. Por ahora no ha tenido atentados contra su vida.
El autoritarismo de Rusia se hace más visible con el pasar de las horas. La lista de opositores al gobierno de Putin va creciendo en el mundo a tal punto de ir restringiendo vínculos políticos, económicos y sociales con Moscú. Con el fallo del tribunal que ordenó encarcelar a Kara-Murza, ya se han pronunciado Estados Unidos, Alemania y la ONU, en contra del mismo.
Con la actual guerra contra su vecina Ucrania, Rusia en un futuro cercano deberá hacerle frente no solo a su posición global y diplomática, sino también financiera y social. Siendo el país más destacado de Europa Oriental, Rusia tiene una riqueza histórica que los libros no le podrán quitar. No obstante, el gobierno de Putin podría estar creando una sombra, la cual sea muy difícil de borrar y enmendar.