El cambio climático es un fenómeno inevitable y existen datos científicos que lo comprueban, por esto se debe actuar para que los cambios no sean tan dramáticos

El tema del cambio climático no es algo nuevo, en realidad se viene tratando desde hace varios años atrás. La diferencia es que para el siglo XXI se tienen cada vez más datos científicos sobre estos cambios; a saber, el aumento de las emisiones de CO2, más glaciares derretidos, terremotos, maremotos, entre otros eventos que ocurren de manera natural. Sin embargo, otros eventos ocurren de manera acelerada debido a las actividades humanas que están afectando el medio ambiente. Cabe preguntarnos: ¿qué podemos hacer nosotros en nuestra vida cotidiana para mitigarlo?
 

Según el sexto informe del 2016, hecho por el Programa de las Naciones Unidas para el Ambiente, sobre las perspectivas del medio ambiente mundial, da cuenta de los adelantos y aspectos que están pendientes por cumplir en cada una de las regiones del mundo, teniendo en cuenta los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos en los Acuerdos de París.

En lo que respecta a la zona de América Latina y el Caribe se evidencia lo siguiente:

• Es de gran riqueza biológica y un tapiz complejo de contrastes políticos, sociales y económicos.
• A pesar de dicha diversidad, sus economías dependen de la explotación de sus recursos debido a la demanda de café, carnes, metales o minerales, aumentando su exportación de un 24% al 40% entre 1990 y 2015.   
• Las zonas urbanas siguen expandiéndose. La población ha alcanzado los 35 millones, por lo que se prevé que en total sean 567 millones en el 2025, lo que genera degradación en el medio ambiente.
• La calidad del aire en las ciudades ha empeorado debido a la acumulación de partículas o gases, pues se encuentran por encima de los niveles establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), lo cual incrementa los problemas respiratorios en sus habitantes.

Aunque la región Latinoamericana y el Caribe producen el 5% de las emisiones mundiales de gases de efecto invernadero, algo muy poco comparado a otras regiones, esas cifras van en aumento por demandas en el sector industrial y transporte. Según datos del Banco Mundial del 2015, las emisiones de CO2 debido a la quema de fósiles y producción de cemento aumentaron de manera absoluta (+14,18%).

¿Qué puedes hacer tú para reducir las emisiones de CO2?

Si bien es cierto que los gobiernos de las regiones deben adaptar herramientas de apoyo y construir políticas frente a los cambios ambientales, también cada uno de nosotros tiene la responsabilidad de hacerlo. Si tu país se encuentra en la lista de países latinoamericanos que emiten CO2, te invito a que realices las siguientes actividades y reduzcas tu huella de carbono:

1. Mejora el uso eficiente de la energía:

• Cambia los bombillos de tu casa por bombillos ahorradores. Además asegúrate que tenga una etiqueta que indique que contienen bajo mercurio.
• Desenchufa tus electrodomésticos cuando no los uses.
• Considera usar energías alternativas como eólica, solar o hidráulica.
• Seca tu ropa al aire libre

2. Ten en cuenta tus hábitos alimenticios para el uso eficiente de energía

• Compra alimentos locales y de temporada, para evitar que estos se trasporten desde muy lejos.
• Empieza tu propio huerto.
• Disminuye el consumo de carne roja, ya que la ganadería emite el 18% de emisiones de CO2.
• Asegúrate que la comida que compras no tenga tanto empaque y utiliza bolsas reutilizables.

3. Viajes para reducir el uso de energía

• Encuentra medios de transporte ecológicos como bicicleta, transporte público o considera compartir tu vehículo con compañeros de trabajo.
• Lleva tu vehículo al taller periódicamente para hacerle mantenimiento.

4. Recicla y reutiliza

• Compra cosas nuevas cuando realmente las necesites.
• Busca un nuevo uso a tus muebles u otros objetos antes de desecharlos.
• Separa la basura de materiales orgánicos e inorgánicos.
• Aprende cómo desechar las baterías u otros aparatos electrónicos.

Por lo tanto, los habitantes de los países Latinoamericanos y los países industrializados tenemos un gran reto para que la preservación de la vida se haga una realidad en los próximos años.

LatinAmerican Post | Luisa Boada Téllez
Copy edited by Marcela Peñaloza