Januhairy: ¡Basta de depilarnos!
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El movimiento Januhairy busca incentivar a las mujeres a que no se depilen durante el mes de enero, como forma de aceptación y empoderamiento femenino
Aunque es una tendencia por la que se viene luchando en los últimos años, Januhairy nace como un movimiento que busca masificar esta tendencia. Su nombre, “januhairy”, es un juego de palabras en inglés, uniendo janu de January (enero), y hairy (peludo).
La idea surgió de Laura Jackson, una estudiante británica que tuvo que dejarse crecer pelo en las axilas para una presentación y se dio cuenta que tenerlo no era tan malo como siempre lo había pensado. A partir de esto, Januhairy busca que más mujeres se unan como forma de aceptación y normalización del pelo en el cuerpo femenino.
Según BBC, el movimiento busca recoger donaciones para la organización Body Gossip que tiene el slogan: “combina arte y educación para empoderar a través del cuerpo a crear la mejor versión de cada uno”.
La razón de que sea en enero no es más que una forma de que llegue a más personas a través de redes. Busca, además, basarse en la ya conocida tendencia “No-Shave November” (Noviembre sin afeitarse), donde los hombres no se afeitan durante noviembre como muestra de normalización de los pacientes con cáncer, quienes no se dejan crecer el pelo porque la quimioterapia lo daña.
Anteriormente, algunas actrices ya se han mostrado en pro de estas acciones. Actualmente, con los movimientos feministas recientes se han posicionado este tipo de acciones, pero incluso en los años 60, Madonna fue controversial por salir en una sesión de fotos sin las axilas depiladas. Todo recae en la aceptación del cuerpo, empoderando así a la mujer, ya que esta acción de depilarse ha sido históricamente una creación social.
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Una construcción social
Aunque desde siglos atrás se veían algunas prácticas culturales de depilación, no era una cuestión exclusiva de las mujeres. En esta cultura, utilizaban cremas, tanto hombres como mujeres, para mantener la piel sin vello.
Sin embargo, es en el siglo XX donde esta práctica se vuelve popular en el mundo, y prácticamente exclusiva de la mujer. Previo a 1920, las mujeres no se quitaban el pelo del cuerpo ya que la ropa lo cubría, y en la intimidad no era visto como “sucio”, a diferencia de como se percibe actualmente.
Pero el simple hecho de que las mujeres al empezar a vestir prendas de ropa que mostraran más su cuerpo tuvieran que empezar a depilar esas partes implica que ya había un prejuicio hacia los pelos en el cuerpo femenino. Incluso antes de 1920, las primeras mujeres en depilarse eran las actrices y modelos, que en ocasiones debían mostrar ciertas partes de su cuerpo, para lo cual se quitaban el pelo.
En 1920, la moda comenzó a cambiar, y las prendas sin mangas y las faldas más cortas empezaron a ser utilizadas, por lo que la estética comenzó también a cambiar. Según PlayGround, en esta década, la publicidad empezó a incitar a la mujer a depilar su cuerpo. El mismo medio ejemplifica esto con una pieza publicitaria de la revista Harper’s Bazaar en donde se ve el anuncio: “La mujer de moda dice que las axilas deben ser tan suaves como la cara”.
Desde entonces, se empezó a considerar el pelo en el cuerpo, especialmente en las piernas, ya que las medias transparentes lo dejaban ver, algo exclusivo de los hombres. Así, las empresas comenzaron a sacar a la venta cremas depilatorias y espumas que complementaban la aparición de la cuchilla desechable, cuya aparición fue pocos años atrás.
En los años 50, con el cambio drástico en la forma de vestir de las mujeres, se convirtió en lo usual, mientras que en un comienzo era la excepción la mujer que se depilaba.
Actualmente, como afirma PlayGround, “el vello de las mujeres se considera antiestético, antihiénico e incluso (por extraño) antinatural”, lo cual es, precisamente, lo que busca cambiar esta nueva tendencia.
LatinAmerican Post | Juliana Suárez
Copy edited by Vanesa López Romero