Venezuela amenaza con cerrar fronteras para frenar contrabando y escasez
Con el objetivo de reducir la escasez de productos básicos y frenar el contrabando de extracción, el presidente venezolano Nicolás Maduro amenazó con cerrar los límites aéreos y marítimos hacia Aruba, Curazao y Bonaire. Así lo declaró el mandatario durante un reciente pronunciamiento, agregando que para la frontera con Colombia se tiene preparado una “nueva sorpresita”.
"Nos están desmembrando las mafias, inclusive he pensado en cerrar toda vía de comunicación, comercialización de todo tipo, aérea y marítima con Aruba, Curazao y Bonaire en cualquier momento", declaró el Maduro, explicando que dicha medida se tomaría para evitar que comerciantes locales continúen pasando productos subsidiados por el gobierno venezolano para ser vendidos en islas caribeñas y ciudades de la frontera Colombiana a precios convenientes.
No es la primera vez que Nicolás Maduro responsabiliza a agentes externos al Gobierno por la escasez de alimentos y medicinas en el país. Pero los gremios comerciales refutan dicha acusación, argumentando que el modelo económico del oficialismo ha sido el responsable por la falta de producción y planificación, sucesos que han producido un colapso económico y social en el país con los índices de inflación y desnutrición más altos de Latinoamérica y el que se ha convertido en un campo de batalla donde se lucha por comida.
La estrategia de Nicolás Maduro con el cierre de las fronteras no es nueva. En 2015, el paso fronterizo entre Colombia y Venezuela fue cerrado por 72 horas con el objetivo de ejercer control hacia las mafias comerciales y cambiarias de ambos países. Sin embargo, este plazo luego se extendió de manera indefinida y terminó con enfrentamientos entre las partes que dejaron un saldo de tres oficiales heridos.
En esta ocasión, el presidente venezolano no declaró cuál será su estrategia de bloqueo con las ciudades fronterizas con Colombia, pero indicó que su Gobierno tiene preparadas algunas sorpresas para Cúcuta y Macao. “Lo he pensado seriamente, por las mafias que se llevan todo: el aceite, los cauchos (llantas), el champú, la comida, todo. Y para Cúcuta y para Maicao les tenemos una nueva sorpresita, no puedo decir más”, expresó Maduro durante su intervención para medios estatales.
‘Robo por hambre’
La escasez en el país que cuenta con el 20% del total de las reservas de petróleo en el mundo ha traído consigo una nueva modalidad de atraco catalagoda como ´robo por hambre´. Allí la delincuencia común ha dejado de buscar lujos o dinero por arrebatar comida de las manos de ciudadanos.
Los adultos mayores son los principales afectados de este flagelo. Sin embargo toda la comunidad se ha convertido en objetivo de malhechores cuando caminan por las calles, en supermercados o transporte público, con bolsas de mercado. En Venezuela, una libra de arroz, pan, harina o verduras, empieza a representar el mejor estímulo para incentivar el atraco común.
Venezuela es un país altamente dependiente de las importaciones, pero estas han reducido de manera drástica debido a la caída en los ingresos petroleros que aportan el 96% del total de las divisas del país. A esto se suma el desabastecimiento de alimentos y medicinas, la violencia común, la migración masiva y una inflación que, según el FMI, superará los 2.300 puntos porcentuales en 2018.
Latin American Post | Khrisna Jaramillo
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