Zapatistas anuncian disolución de “municipios autónomos”
En un cambio histórico, el movimiento zapatista en México ha declarado la disolución de sus autoproclamados municipios autónomos, señalando el fin de una era que comenzó con su levantamiento de 1994 por los derechos indígenas. La declaración del subcomandante Moisés señala la escalada de violencia de las pandillas en Chiapas como telón de fondo de esta importante decisión.
Foto de : EZLN
Latin American Post Staff
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La disolución de los Caracoles
El Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), un grupo rebelde indígena del sur de México, anunció recientemente la disolución de los municipios autónomos que formaron tras su levantamiento de 1994. Los zapatistas captaron la atención del mundo cuando se levantaron en armas el 1 de enero de 1994, el mismo día en que se promulgó el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN). Su lucha por los derechos indígenas y su resistencia contra lo que consideraban las fuerzas homogeneizadoras de la globalización resonaron a nivel mundial, llamando la atención sobre la difícil situación de las comunidades indígenas en México.
Los municipios, conocidos como los "Caracoles", han funcionado como entidades semiindependientes durante casi tres décadas. Estas áreas declaradas autónomas en los años posteriores al levantamiento armado, se han gobernado según principios zapatistas sin interferencia directa del gobierno mexicano. El movimiento, aunque en gran medida pacífico desde los enfrentamientos de los años 90, ha seguido defendiendo los derechos y la soberanía de los indígenas, rechazando los programas de ayuda del gobierno y manteniendo un nivel de autogobierno de facto.
Desafíos a lo largo de la frontera con Guatemala
En una conmovedora declaración del subcomandante rebelde Moisés, fechada en "noviembre" y carente de la retórica poética tradicional del grupo, los zapatistas reflexionan sobre los desafíos que plantea la escalada de violencia a lo largo de la frontera con Guatemala. Si bien no se declara explícitamente, esta violencia parece haber influido en su decisión de disolver los municipios autónomos. Sin embargo, el comunicado promete mayores explicaciones y detalles sobre la nueva estructura de la autonomía zapatista en el futuro.
En medio de esto, el anuncio aborda la influencia potencial de las próximas elecciones presidenciales de 2024, insinuando la conciencia del grupo sobre el panorama político más amplio. Históricamente, los zapatistas se han involucrado en el proceso electoral, en particular presentando un candidato en 2018, aunque su enfoque principal ha estado en el autogobierno local más que en la política nacional.
Los Caracoles como centros comunitarios
A pesar de la disolución, los "Caracoles" seguirán funcionando como centros comunitarios, cerrados a los forasteros, lo que indica un retiro del escenario global mientras mantienen su compromiso con la organización local y los servicios comunitarios. La introspección del EZLN se produce cuando muchos miembros más jóvenes de las comunidades zapatistas se han ido en busca de oportunidades laborales y educativas, una tendencia observada por antropólogos como Gaspar Morquecho.
El aislamiento social y económico se ha convertido en un factor significativo para el EZLN, que en los últimos tiempos ha roto muchas de sus alianzas externas. Este aislamiento ha sido tanto una elección estratégica como una consecuencia de la creciente violencia que azota a Chiapas, un estado ahora marcado por el narcotráfico y las batallas entre cárteles poderosos. Estas actividades criminales han dado lugar a bloqueos de carreteras, secuestros y otras formas de violencia que ponen en riesgo la seguridad y el bienestar de los habitantes de la región.
En un ambiente donde el gobierno mexicano ha desplegado miles de tropas y miembros de la Guardia Nacional aparentemente para combatir el crimen, los zapatistas argumentan que estos esfuerzos están más enfocados en controlar la migración, supuestamente bajo directivas del gobierno estadounidense. Esto refleja una desconfianza profundamente arraigada entre el EZLN y las autoridades estatales, un legado de décadas de conflicto y negociaciones fallidas.
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Desafío y legado
A pesar de la grave situación, los zapatistas se mantienen desafiantes e invitan a la gente a conmemorar el 30º aniversario de su levantamiento. Este gesto subraya su continua relevancia y el espíritu perdurable de su movimiento. Si bien las próximas celebraciones pueden estar rodeadas de incertidumbre, el legado de los zapatistas y su lucha por los derechos indígenas sigue siendo un capítulo poderoso en la historia de México.