El fútbol no tiene fecha de vencimiento para Kazuyoshi Miura
El japonés es el futbolista profesional más longevo de la actualidad
El japonés es el futbolista profesional más longevo de la actualidad.
El jugador se ha convertido en el futbolista más longevo. / Foto: IG / yokohamafc_official
LatinAmerican Post | Theoscar Mogollón González
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El nombre de Kazuyoshi Miura quizá no sea tan reconocido para el amante del fútbol promedio. Sin embargo, la historia que hay detrás de él debe ser una de las más peculiares de todas. ¿La razón? Es el jugador profesional en actividad de mayor edad y que, además, ostenta el récord de ser el más longevo que todavía disputa partidos de manera internacional. Actualmente cuenta con 53 años y sin duda alguna es de los personajes más referentes en la cultura nipona.
Cuando Argentina y Maradona se consagraban en el Mundial de México 1986, el fútbol comenzaba a trascender fronteras y a tomar una mayor globalización, expandiéndose a rincones del mundo donde este deporte no tenía tanta trascendencia. Justo ahí, a mediados de los años 80, un quinceañero Miura dejaba su natal Japón para formarse como futbolista al otro lado del continente, específicamente en Brasil.
Al llegar a la ciudad de San Pablo, el joven se instaló en una de las comunidades japonesas en el exterior más grandes del mundo luego de la Segunda Guerra Mundial. Mientras intentaba abrirse camino en el fútbol ante los brasileños, Miura se fue ganando la vida con trabajos como vendedor o guía turístico. Una vida para nada fácil, pues no tenía casa fija y debió pasar por varios albergues.
Sus inicios en el balompié los dio con el Matsubara, club amateur de los japoneses de la ciudad paulista. No obstante, gracias a su increíble talento firmó su primer contrato profesional en 1986 con el Santos FC, aunque solo jugó dos partidos. A partir de allí vistió las camisetas de Palmeiras, Clube de Regatas, EC XV de Novembro, Coritibia y nuevamente Santos, todo esto hasta 1990. En suelo carioca terminó ganando el Campeonato Alagoano con el Regatas (1987) y el Campeonato Paranaense con Coritibia (1989).
Ya con una experiencia en el mejor fútbol de América, Miura regresó a Japón para jugar con el Yomiuri SC, club semiprofesional de la Japan Soccer League. Para 1992 la entidad se profesionalizó y cambió su nombre a Verdy Kawasaki. Poco después, con la intención de crear la liga profesional de Japón (J League), los cerebros en marketing no dudaron en darle el protagonismo a Miura con una increíble campaña que contribuyó enormemente en su endiosamiento. El delantero aportó para que el equipo ganara las dos primeras ediciones (1993 y 1994), así como la Copa J League.
Luego de esto, se convirtió en el primer japonés en jugar en Italia tras su cesión al Genoa. Sin embargo, Miura no logró adaptarse al fútbol italiano, además de tener problemas con el entrenador y sufrir una fuerte lesión en su debut ante el AC Milan. Aún así, el nipón jugó un total de 21 partidos con solo un gol, ante la Sampdoria. Al finalizar la temporada, si bien recibió varias ofertas de otros clubes extranjeros, optó por quedarse cuatro años más con el Verdy Kawasaki, convirtiéndose en una de las máximas referencias de su país.
Para añadir un logro más a su currículum, regresó al viejo continente cedido al Dinamo Zagreb de Croacia en el mercado invernal de 1999, esto con la intención de convertirse en el primer japonés en jugar la Liga de Campeones. Sumado a esto, terminó dicha temporada ganando la liga croata. Tras retornar a su país, jugó con Kyoto Purple Sanga por dos temporadas y luego con Vissel Kobe por otras cuatro.
Ya para el año 2005, Miura fichó con el Yokohama FC, su actual equipo y que en aquel entonces se encontraba en la Segunda División. Tuvo una breve salida en diciembre de ese mismo año con destino a Australia, con el Sydney FC para jugar el Mundial de Clubes. Al regresar a la entidad nipona, ayudó en el ascenso del club a la J League siendo el futbolista más veterano de la máxima categoría con 46 años.
Una estrella fuera de las canchas
Cabe resaltar que Miura es un personaje muy ligado a la farándula. En 1993 contrajo matrimonio con la actriz y modelo Risako Shitara, una japonesa nacida en New York, por lo que le posibilitó filmar varios comerciales para distintas marcas y protagonizar un par de películas del Detective Conan. A esto también le podemos sumar una sección que tuvo en un programa de TV de variedades con su famoso <<Kazudance>>, su famoso baile al ritmo de batucada.
Por otra parte, el también denomiado <<King Kazu>> tenía un imán increíble para la publicidad. Y es que mientras estuvo en Brasil llamó la atención de muchas personas, ya que era inédito ver a un japonés jugar con la misma calidad de un brasileño. Eso le valió portadas en diarios y revistas. De hecho, cuando en Japón se enteraron de esa eventualidad le llovieron los contratos publicitarios. Gracias a ese fenómeno, la famosa Copa Kirin invitó a clubes brasileños en esa época y todo fue un verdadero suceso.
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Mientras estuvo por Europa, con el Genoa específicamente, la compañía de radios nipona Kenwood patrocinó la camiseta del equipo. A su vez, su fichaje con el Zagreb fue con la intención de atraer dinero japonés en un momento crítico por el que pasaba Croacia en ese entonces, según llegó a confesar el presidente de la entidad Flagno Tujman.
Como se trataba de una figura muy popular, Yoichi Takahashi se inspiró en él para crear el comic Captain Tsubasa (Supercampeones), muy reconocido en los años noventa. "Es muy obvio, Tsubasa está inspirado en nuestro King Kazu, al punto que deja Japón para ir a jugar a Brasil. Sus vidas profesionales casi corren al mismo tiempo", confesó el autor del manga.
Su única deuda: el Mundial
A nivel de selección, Miura también dejó una huella muy importante. En total llegó a disputar 98 partidos y anotó una cifra de 55 goles, convirtiéndose en el segundo goleador histórico de Japón por detrás de Kunishige Kamamoto. Su debut oficial fue en 1990 y dos años más tarde formó parte de la selección que ganó la Copa Dinastia y la Copa Asiática, donde además fue el jugador más valioso.
Sin embargo, no todo fue color rosa para él. Camino al Mundial de 1994, Miura fue titular en casi todos los partidos, anotando 12 goles en 14 apariciones, solo que la selección quedó a las puertas de esa clasificación en la última jornada. En las Eliminatorias del 98, King Kazu contribuyó en gran medida para que Los Samuráis Azules clasificaran a su primera cita mundialista, no obstante, de forma inexplicable el DT Takeshi Okada lo dejó fuera de la lista final.
Muchos comentan que el estratega nunca se entendió con ese delantero que se ponía tinte en el pelo, bailaba samba y salía en las revistas. Un par de años más tarde, un 6 de junio del 2000 para ser exactos, Miura jugaba su último partido con la selección japonesa en un amistoso ante Jamaica en Casablanca, Marruecos.
Pero el destino le tenía preparado un regalo por su gran entrega y disciplina. En 2012, con 45 años, fue llamado para formar parte de la selección nipona que disputó el Mundial de fútbol sala de la FIFA en Tailandia. Allí, Japón se enfrentó en fase de grupos a Brasil, Portugal y Libia, clasificando a los octavos de final donde caerían derrotados por 6-3 ante Ucrania.
Sin fecha de vencimiento
Para el 2017 superó el récord del inglés Stanley Matthews como el futbolista profesional más veterano del mundo. "Haré esfuerzos diarios para conseguir el objetivo de quedarme en esta división y no olvidaré los sentimientos de agradecimiento y de pasión por el fútbol. Haré lo posible para ser capaz de ayudar el equipo a ganar", dijo el japonés en ese entonces.
Pero todo parece indicar que ese récord seguirá extendiéndose hasta quién sabe cuándo. En este mismo 2020, tras la reanudación del fútbol japonés tras la pandemia del Covid-19, Kazuyoshi Miura batió dicho registro luego de disputar 63 minutos en la victoria por la mínima del Yokohama FC ante el Sagan Tosu, el pasado 5 de agosto. Y es que con 53 años, Miura todavía juega al fútbol como si se tratase de un adolescente.