Los regresos más memorables del deporte

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Muchos deportistas han demostrado que cualquier episodio doloroso puede ser superado, siempre y cuando, se afronte con convicción

En el deporte como en la vida misma hay momentos de la más infinita gloria, así como también de los más sufridos pesares, que aparecen repentinamente para probar el cuerpo y mente del ser humano. Por eso, en este artículo exclusivo de Latin American Post, te contamos la historia de cinco reconocidos deportistas, que en su momento, cuando atravesaban momentos de la más absoluta brillantez en sus respectivas carreras, tuvieron que enfrentar duros golpes del destino.

Niki Lauda

El primer caso digno de relatar es del ex piloto de Fórmula 1 Niki Lauda. El austríaco, siendo en aquella época campeón del mundo, en medio de un lluvioso Grand Prix de Alemania del año 1976, sufrió uno de los accidentes automovilísticos más escalofriantes  y recordados de la historia, luego de estrellarse contra una baranda en medio de la pista mojada. “El siniestro fue espantoso: Lauda perdió en una curva el control de su bólido que fue a dar contra la protección y quedó envuelto en llamas, donde fue arrollado por otro coche”.

No obstante, pese a durar varios meses en la clínica, con quemaduras en más del 80 por ciento de su cuerpo y cualquier cantidad de huesos rotos, Niki pudo volver a la disciplina e incluso llegó a conquistar dos campeonatos mundiales más para su palmarés (1977-1984), dejando un legado en la disciplina nunca antes visto.

Vinny Pazienza

Es natural ver cómo los boxeadores frecuentemente están involucrados en polémicas y excesos. Sin embargo, el drama que vivió Vinny Pazienza, boxeador estadounidense de la época de los noventa, superó todos los parámetros. Detalla el portal Desdelring, que en el año 1991 cuando mejor avanzaba la carrera de Vinny como boxeador e incluso era campeón del mundo peso ligero, enfrentó un accidente de tránsito que lo llevó a partirse el cuello.

Cuenta Desdelring que tuvieron que incrustarle con tornillos un aparato en su cráneo para inmovilizar su cervical y sus doctores le dijeron que más nunca volvería a pelear; que si recuperaba la movilidad del cuello ya eso sería un milagro. Lo que no sabían los especialistas es que siempre termina teniendo más fuerza la voluntad que la ciencia, y esto fue lo que llevó al Demonio de Pazmania a retomar sus entrenamientos y regresar a la disciplina por la puerta grande, no sólo para volver a boxear sino para ser nuevamente campeón del mundo, venciendo en aquel momento al imbatible Roberto “Mano de Piedra” Durán.

Andrés Galarraga

El 18 de febrero de 1998 fue seguramente el día más impactante en la vida del ex beisbolista venezolano Andrés Galarraga. El Gato tenía 36 años y estaba por cerrar una extraordinaria carrera en las grandes ligas, cuando fue diagnosticado con cáncer. Tenía un Linfoma No Hodking (LNH) en su tercera vértebra lumbar.

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Narró en aquel momento Galarraga, según un artículo de Personajes historicos, que desde que el médico tratante le dijo que, pese a ser difícil podría curarse del cáncer, él hizo todo lo posible para salvarse:“siempre fui optimista, me lo planteé como el juego más importante de mi vida en el cual debía hacer todo lo que tuviera para vencer, y lo hice”.

Y así fue, luego de dos años de exigente recuperación, “El Gato” no sólo volvió a la vida de antes sino también al béisbol. Jugó por cinco temporadas más de la gran carpa con el más alto nivel físico y se convirtió en un embajador de la lucha contra esta terrible enfermedad.

Ronaldo Nazario

Otro de esos relatos que ha marcado un antes y después en el deporte universal es el que tiene que ver con el futbolista brasileño Ronaldo Nazario. Detalla Historias biografias que el “fenómeno” sufrió múltiples y recurrentes lesiones que lo llevaron a pasar momentos del más puro dolor y frustración.

Lo más sorprendente de este caso es que, si bien durante reiteradas oportunidades Ronaldo tuvo que enfrentar el drama de romperse ligamentos y tendones de sus rodillas, el momento más traumático de su carrera lo vivió minutos previos a la final de la Copa del mundo Francia 1998. “Cuando Ronaldo se preparaba para afrontar la final contra Francia, fue víctima de una convulsión en el hotel. Afortunadamente fue auxiliado por sus compañeros de cuarto y a pesar de su estado, decidió jugar aquel importante partido, en donde si bien salieron derrotados en cancha, él considero haber ganado la copa de su vida”.

Michael Phelps

Es evidente que la fragilidad mental ante tanto éxito también puede llegar a ser de impacto negativo en la vida de algunos deportistas. Uno de los ejemplos  más claros es el de Michael Phelps, quien pese a ser considerado un “Dios” de la natación, detalla el portal Emol, durante mucho tiempo tuvo que lidiar con problemas de drogas y alcohol a causa de episodios depresivos.

Narra Emol que la vinculación más clara del nadador con las drogas se dio en 2014, ya siendo dueño de 18 medallas de oro. Esto luego de que fuera sorprendido por la policía conduciendo a altas velocidades bajo los efectos de droga y alcohol, incidente que lo llevó a reconocer sus problemas e internarse en una clínica por seis semanas para desintoxicarse y acudir recuperado a las Olimpiadas de Rio 2016.

“Creo que esta ha sido la zambullida más difícil de mi vida. Volver a ganar ha sido un verdadero sueño hecho realidad”, confesó el tiburón de Baltimore luego de conquistar en Rio cinco oros más y llegar a 23 para convertirse en el atleta más consagrado en la historia del deporte olímpico.

LatinAmerican Post | Freddy Gonzales

Copy edited by Juan Gabriel Bocanegra