Mujeres en el deporte: la discriminación no para en medio oriente
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Una pasión eclipsada por una actitud separatista hacia los sectores femeninos en el ámbito deportivo, y en diversos países de la conflictiva región asiática
La discriminación de género practicada en los países del Oriente Medio o también llamado "Oriente Próximo", es una de las más usuales y comunes debido a su política basada en la religión, donde el Corán, en este caso, es el instrumento donde se rigen los Estados y, dependiendo de su práctica ortodoxa, las mujeres están condenadas a pasar al último escalafón de la sociedad, sin privilegios de ningún tipo. El ámbito deportivo no es la excepción.
Recientemente el mundo deportivo fue testigo nuevamente de una acción de discriminación de género, en este caso por parte de una nación: Irán. El diario británico The Telegraph informó que la televisora estatal iraní, la cual posee los derechos de transmisión de la Bundesliga alemana, prohibió la salida al aire del encuentro entre el Bayern de Munich y el Ausburgo, debido a que el árbitro que estaría normando el juego sería una mujer, la famosa alemana Bibiana Steinhaus, una de las más reconocidas a nivel mundial.
El argumento para censurar y prohibir su transmisión fue la “inadecuada” vestimenta que muestra “gran porción de carne” de la referee alemana, según el Estado Islámico que controla la censura acorde a las creencias religiosas, el cual es el principal estamento de Irán. Desde la llamada revolución de 1979, cuando es derrocado el Sha de Irán, implantando un gobierno ortodoxo musulmán regido por el entonces Ayatolá Homeini, bajo las normas establecidas por el Corán, a las mujeres se les prohibió la práctica de cualquier deporte y su asistencia a los estadios.
Luego de más de 30 años, como lo informa el diario inglés, Irán posee un equipo nacional femenino de fútbol, pero limitada a jugar como “hijab” para cubrirse el cabello, franelas manga largas y pantalones deportivos, para evitar exponer cualquier parte del cuerpo.
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Esto fue aprovechado por marcas como Nike para promover un nuevo implemento para dichas culturas, como lo es el hijab deportivo:
Caso parecido de discriminación femenina se vivió a principios de este año en el Reino de Arabia Saudita, como lo indica el Diario Público, donde se desarrolló en la ciudad de Yeda, la Supercopa de Italia donde se encontrarían la Juventus ante el AC Milan en el estadio Rey Abdullah, por negociaciones previas entre la Liga italiana de la Serie A y el gobierno saudí para atraer fanaticada de la región, y en contraprestación recibir una cuantiosa suma de dinero.
Las normas que establecieron las autoridades del gobierno saudí para vender las entradas fueron: sólo pueden entrar mujeres al evento si van debidamente acompañada de hombres, y serán separadas en zonas específicas para mujeres, muy al estilo "apartheid" de segregación sudafricana pre-Mandela. Esto trajo todo tipo de críticas dentro de Italia en diversas esferas
No solo en el fútbol se vive la discriminación
El Diario Las Américas, en un reportaje realizado hace casi dos años, entrevistó a la alpinista saudí Raha Moharrak, primera mujer de dicho país en alcanzar la cumbre del Everest, donde pide a su gobierno que flexibilice sus políticas contra las mujeres para la práctica deportiva, que sea más incluyente y fomente la participación sin tantas barreras.
La aplicación ortodoxa de la "sharia" (ley islámica), donde no permite a las niñas en los colegios practicar educación física, separa a los hombres y mujeres de compartir en sitios públicos, y por ende la práctica deportiva en lugares abiertos, lo que a largo plazo ha originado problemas de salud para las mujeres por estas limitantes. Siempre las mujeres quedarán marginadas y limitadas, pasando al último plano social.
En el año 2016, Irán era sede del campeonato mundial masculino de Voleybol de Playa, seleccionado por la Federación Internacional de Vóleibol (FIVB), como lo informa el diario El Mundo de España, dejando una nueva polémica. La prohibición de las mujeres de asistir como espectadoras en el evento, al considerar "inmoral para los ojos femeninos la imagen de un hombre en pantalones cortos", como cita el artículo.
A pesar de las presiones ejercidas por la federación internacional, argumentando la violación de uno de sus artículos en cuanto a la discriminación y exclusión de las mujeres para asistir a eventos deportivos de dicha disciplina, y con una falsa creencia que el gobierno iraní iba a ceder, no resultó como se esperaba y el ejecutivo dejó claro su posición de la prohibición que data de 1979.
Existen una larga lista de casos parecidos en esta región del planeta, donde la religión como instrumento político ha dejado de lado el importante papel de la mujer que juega en cada uno de los sectores de la población, convirtiéndose en sólo un instrumento de procreación sin mayores derechos, sólo los permitidos por los hombres. Algunos países de oriente próximo han flexibilizado el papel de la mujer y "occidentalizado" sus políticos, incluyendo las deportivas, tal es el caso de Jordania y Qatar.
Otros casos de discriminación a las mujeres en el deporte que no tienen que ver con la religión sino con un tema cultural machista en occidente, donde, en pleno siglo XXI se presentan casos de diferencias salariales y menor exposición en cuanto a la transmisión de eventos deportivos femeninos. Las mujeres han sentado precedentes en el sector deporte, acortando la brecha imaginaria entre los hombres y las mujeres creada por la misma sociedad. Se mantiene la esperanza que la igualdad e inclusión de género se complete en este siglo, como parte de las metas de desarrollo sostenible para el año 2030.
LatinAmerican Post | Gabriel Moros
Copy edited by Vanesa López Romero