América Latina se tambalea por las interrupciones globales de Microsoft
Una interrupción global de las computadoras causada por una actualización defectuosa de CrowdStrike en los sistemas Microsoft Windows interrumpió los servicios esenciales en toda América Latina, poniendo de relieve las vulnerabilidades en industrias interconectadas como la banca, la aviación, los medios y la atención médica. Este artículo explora el impacto y la recuperación en la región.
Los usuarios y las empresas de diversas industrias esenciales en América Latina, incluidas la banca, la aviación, los medios y la atención médica, se están recuperando de lo que se llama la “mayor interrupción informática” de la historia. La interrupción fue causada por un error en una actualización de CrowdStrike para el sistema operativo Microsoft Windows, que provocó que los sistemas se congelaran en la infame “pantalla azul de la muerte”, como explicó el CEO de CrowdStrike, George Kurtz, en la plataforma de redes sociales X.
El experto en ciberseguridad Troy Hunt, que dirige el popular sitio web de información cibernética HaveIBeenPwned, confirmó la escala global del apagón y lo calificó como el apagón informático más importante jamás registrado.
Un llamado a la calma: no es un ciberataque
Kurtz enfatizó que el incidente no fue una violación de seguridad o un ciberataque sino un problema aislado para el cual se brindó soporte para ayudar a los clientes a actualizar sus sistemas. Según expertos informáticos consultados por Efe, la última actualización de los controladores Falcon contenía errores que afectaron inmediatamente a Azure, la plataforma de computación en la nube de Microsoft utilizada para construir, probar, desplegar y gestionar aplicaciones y servicios.
Esto provocó la aparición generalizada de pantallas azules que indicaban fallos del sistema y la necesidad de reiniciar los servidores. Kurtz se disculpó por las interrupciones y aseguró que los ingenieros de CrowdStrike habían resuelto el problema, aunque advirtió que algunos clientes podrían tardar un tiempo en restaurar las operaciones por completo.
Sector Aeronáutico en América Latina
La interrupción de Microsoft provocó problemas en el registro de pasajeros, errores de conexión de red y fallas en el sistema de información de las aerolíneas en todo el mundo, lo que provocó cancelaciones y retrasos masivos de vuelos. Los países latinoamericanos, incluidos Argentina, Panamá, República Dominicana, Perú, Honduras y Chile, experimentaron interrupciones mínimas, y las aerolíneas nacionales e internacionales informaron operaciones en su mayoría normales.
Sin embargo, algunos países latinoamericanos sintieron el impacto de manera más significativa. Por ejemplo, aunque la infraestructura de la aviación se vio menos afectada directamente en México debido a sistemas propietarios protegidos contra interferencias externas, todavía hubo retrasos y cancelaciones en vuelos internacionales. Por el contrario, Brasil experimentó problemas en algunos canales de atención al cliente de las distribuidoras de electricidad e inestabilidad en bancos como Bradesco, Next, Neon y Banco Pan. No obstante, los servicios de control del tráfico aéreo y suministro eléctrico se mantuvieron estables.
En Panamá, el Aeropuerto Internacional de Tocumen experimentó retrasos menores, mientras que en Argentina, Aerolíneas Argentinas informó breves interrupciones en sus sistemas de emisión de boletos y check-in, pero rápidamente implementó planes de contingencia para minimizar el impacto.
Impacto en la banca y la atención sanitaria
Los efectos de la interrupción se extendieron más allá de la aviación. Los bancos, instituciones, organizaciones y hospitales de América Latina también enfrentaron perturbaciones importantes. En Brasil, algunos bancos reportaron inestabilidad y ciertos hospitales experimentaron retrasos en el acceso a la información de los pacientes, aunque los servicios críticos continuaron con sistemas de respaldo.
En México, el sector financiero informó interrupciones menores, pero la mayoría de los bancos mantuvieron sus operaciones sin impacto significativo gracias a sólidas medidas de ciberseguridad. Los hospitales de toda la región enfrentaron diversas interrupciones, y algunos tuvieron que posponer procedimientos no urgentes y priorizar la atención de emergencia.
El sistema de salud de Argentina evitó interrupciones significativas, y los hospitales utilizaron procesos manuales para continuar con la atención de los pacientes mientras se restablecían los sistemas. De manera similar, en Chile, los servicios de salud experimentaron solo breves interrupciones y se reportaron tiempos de recuperación rápidos.
Recuperación y resiliencia
Recuperación y resiliencia en América Latina La interrupción global, si bien destacó la interconexión y las vulnerabilidades de los servicios esenciales de América Latina, también mostró la resiliencia y los rápidos esfuerzos de recuperación de la región. El incidente subrayó la importancia de medidas sólidas de ciberseguridad y planes de contingencia, pero también la capacidad de la región para recuperarse.
En respuesta a la interrupción, los gobiernos y sectores privados de América Latina están reevaluando sus estrategias de ciberseguridad para evitar incidentes similares. La necesidad urgente de mejorar la colaboración entre los países de la región para fortalecer sus defensas contra tales perturbaciones nunca ha sido más evidente. Este incidente sirve como un claro recordatorio de la necesidad de adoptar medidas sólidas de ciberseguridad y una planificación integral de contingencias.
Este incidente sirve como un claro recordatorio para que América Latina invierta en infraestructuras de TI más resilientes y seguras. A medida que las industrias se recuperan, es crucial que se implementen urgentemente mejores estrategias de coordinación y respuesta para mitigar los riesgos de interrupciones generalizadas y garantizar la estabilidad de los servicios esenciales.