¿Por qué este departamento colombiano se ha fijado como el nuevo objetivo de muchas economías?

Las dinámicas económicas han cambiado en los últimos años, conseguir nuevos mercados aliados y posibilidades de ampliar inversiones fructíferas, ha sido una tarea que están buscando los principales países exportadores. Sin embargo, hay una característica atractiva presente en la región latinoamericana, y es que aparte de tener paisajes encantadores, casi de ensueño, sus industrias en vías de crecimiento se están convirtiendo en un nicho de alianzas continentales.

Antioquia se ha caracterizado por ser un departamento con un potencial económico gigantesco, con minería, turismo, tierras fértiles y esa esencia de emprendimiento presente en sus habitantes le ha permitido colocar ciudades como Medellín entre las promesas futuras para inversiones y negocios. El crecimiento se ha dado a tal punto que la región ocupa el primer puesto de crecimiento y desarrollo de eventos en América Latina según el Rankin Internacional de Industrias ICCA, superando incluso a capitales como Lima, Perú.

Además, según un estudio publicado por el Grupo Banco Mundial, Medellín se ubica entre las cuatro urbes que más genera posibilidades para hacer negocio en Colombia y en top 10, de las 50 ciudades de Latinoamérica con mejor estrategia para la inversión extranjera según la revista América Economía en su edición 2017-2018, codeándose con Chicago, Nueva York, Montreal, Los Ángeles, y Miami. Esto demuestra las dinámicas competitivas del mercado actual.

Saltando nuevamente al marco departamental, en Antioquia hay regiones con suelos muy fértiles. Uno de los mejores ejemplos está en el oriente antioqueño, donde regiones como el Urabá son potencia mundial en la producción y exportación bananera. Este y otros productos han llamado la atención de países como Corea del Sur, país con el que Colombia sostiene un TLC, donde al contar sólo con un 30% de su territorio para la siembra y cultivos, tienen la necesidad de importar productos agrícolas y de material prima. 

Otra de las características que favorece al departamento Antioqueño es la alianza del pacífico que une a Chile, Colombia, México y Perú, quienes en bloque forman la octava economía mundial, al representar el 50% del comercio exterior de la región y el 47% de los flujos de inversión extranjera, según el Centro de Estudios Asia Pacífico de Eafit. Esta realidad ha causado que Canadá demuestre serias intenciones de crear un vínculo con el departamento, esto sumado al vacío actual en la región, tras el incremento en la rigurosidad de políticas de migración en Estados Unidos tras la llegada de Donald Trump.

Algo que no podemos obviar es la necesidad de infraestructura que tiene no sólo Colombia, sino el vecindario en general, este ha sido otro aliciente para la llegada de empresas extranjeras que aportan sistemas tecnológicos, para su óptimo desarrollo; trenes, metros, vías de conexión primarias y terciarias son algunas de las necesidades que están creciendo de manera continua dentro de Antioquia y el país.

Por último, como no mencionar el colorido de su calles y veredas, gente amable y tradiciones como las que son el eje central de la Feria de las flores, “el desfile de silleteros”, que atrae a propios y extraños de toda el Área Metropolitana del Valle de Aburrá y el mundo. Esto se ha convertido en uno de los principales eventos turísticos de América Latina , al igual que Colombiamoda, el evento textil más importante de este lado del continente.

Es así como en una breve explicación se detalla es porque Antioquia es un nuevo destino para inversores y sin duda alguna la posibilidad de poder asentar industrias que puedan tener una visión a mediano y largo plazo de todo el potencial que genera esta cuna de arrieros.

Latin American Post | Julio Abella

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