¿Un buen momento para comprar oro?
Entienda por qué podría ser mejor invertir en este metal que en Bitcoins
En el mundo de las inversiones nada es seguro. Si lo fuese, todos seríamos millonarios. Sin embargo, nos valemos de la información del mercado para analizar nuestro entorno y generar perspectivas no exploradas públicamente que pueden interesarle.
Para empezar, una inversión es una compra que cualquier individuo con el capital necesario puede hacer con el objetivo de adquirir un bien bajo la expectativa de que este mantenga o incremente su valor en el futuro.
El oro es un activo que cumple con las características del dinero: sirve como un medio de cambio y de pago, tiene una forma de ser medido, sirve como depósito de valor, su valor depende de sí mismo, es durable físicamente y permite usarse como reserva de riqueza. El mayor atractivo del oro es que existe físicamente, a diferencia de los billetes o las criptomonedas que son esencialmente confianza. Históricamente el oro tiene una relación inversa con el dólar: cuando existe una alta tensión militar o política en última instancia se teme que la Reserva Federal pueda entrar en default, es decir, impago de sus obligaciones. En circunstancias de amenaza un inversionista prefiere contar con su riqueza de forma física y no a través de un certificado.
Respecto a la situación mundial actual, el 13 de septiembre de 2017 Corea del Norte amenazó con “hundir” a Japón con una bomba nuclear. El reloj nuclear llegó a marcar tres minutos antes de media noche en enero del mismo año y el mercado de armas experimentó una creciente en su demanda. Como es de esperarse, el valor actual del oro se encuentra en su rango tope desde 2014 con un valor de 1,322.20 dólares por onza, lo cual honra la teoría.
Adicionalmente tenemos al nuevo jugador financiero en el mundo, la Bitcoin. Lejos de saber el verdadero valor del mercado de la criptomoneda, sabemos que el total de monedas circulando en el mercado hoy, su “market cap”, es de 63.11 billones de dólares. Adicionalmente debe saber que la inversión en Bitcoins fue la “posición” más tranzada hoy en Wall Street.
Una Bitcoin costaba 610 dólares el 5 de octubre de 2016, mientras que el 2 de septiembre de 2017 costaba 4969.10 dólares. Su valor se octuplicó en menos de un año. Defensores de la criptomoneda defienden su uso al enunciar que su oferta es fija, que es fungible –una Bitcoin u otra no tienen diferencia-, es altamente divisible y no se puede falsificar. Estas son las mismas características del oro.
Volviendo a los hechos sabemos que los líderes económicos del mundo han endurecido sus posiciones en contra de la criptomoneda, para más información lea: Autoridades económicas del mundo en contra de la Bitcoin. Sin discutir si están en lo cierto o no, hay que reconocer su posición preponderante en la operación del mundo, y su amenaza conjunta contra la Bitcoin no debe tomarse a la ligera.
Las amenazas de los gobiernos han generado una contracción en los precios de la Bitcoin, pues esta depende del número de transacciones que se puedan efectuar con ella. Cuando China decide hacer ilegales transacciones con Bitcoin y Estados Unidos hace saber que no respalda el medio de valor, automáticamente se cierra el mercado de las dos mayores potencias del mundo, lo que limita las posibilidades de circulación de la criptomoneda.
Si en su restaurante favorito le dicen que una de cada 5 Coca Colas está envenenada mientras que todas las Pepsi están bien, quizás decida sustituir su consumo de Coca Cola por Pepsi. Si usted compra Bitcoin por los mismos motivos que compra oro y la Bitcoin está bajo ataque, quizás sea prudente abandonar la Bitcoin y volver al oro.
Latin American Post | David Eduardo Rodríguez Acevedo
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