Venezuela y la crisis de deuda latinoamericana
¿Qué ocurre luego de que un país se declara en default?
La crisis de la deuda latinoamericana ocurrió entre los años 70’s y 80’s del siglo XX cuando las obligaciones de la región se hicieron impagables. El fenómeno causó lo que se conoce como una década perdida, tal que 10 años pasaron antes de recuperarse la estabilidad financiera de la zona. Dicha recesión benefició a los países exportadores de petróleo.
En la actualidad, Venezuela enfrenta una amenaza similar que podría acarrear consecuencias parecidas, incluyendo intervención internacional que de otra forma no se habría dado.
¿Qué ocurrió?
La conclusión de la Segunda Guerra Mundial condujo a la famosa reunión de Bretton Woods. En dicha reunión, los poderes dominantes del mundo declararon que el dólar estadounidense se convertiría en la moneda base del mundo al tener el respaldo del oro. Con el fin de prevenir una expansión del comunismo, instituciones pro desarrollo como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional abrieron sus ventanillas.
Luego del fin de la guerra, países como Brasil, Argentina y México pidieron grandes cantidades de dinero de instituciones internacionales y bancos comerciales con el fin de aumentar la infraestructura en sus territorios. La medida fue aplaudida por varios estamentos internaciones pues el gasto nacional genera trabajos y aumenta la competitividad de los países.
Desde 1950 a 1960 México, Brasil y Argentina mostraron un desempeño ideal en sus economías, tanto fue así que las grandes instituciones financieras del mundo refugiaron sus valores en bonos nacionales de dichos países que parecían inquebrantables.
Sin embargo, la mayor oposición al sueño de un mundo unido y libre en los años posteriores a la guerra provenía de la OPEC. El bloque petróleo no alineado mantenía un gran poder económico al tener enormes reservas de petróleo. Dicha asociación atacó a occidente en 1973 cuando embargó el petróleo proveniente de Estados Unidos en contravención por la participación de los norteamericanos en la guerra árabe-Israelí.
La consecuencia de un mayor precio de petróleo es una menor cantidad de producto circulando en la economía. Al tratarse de un fenómeno exógeno, las economías de occidente se encontraron con más dinero circulante del que representaba el producto en la economía. Para revertir la situación, los Bancos Centrales aumentaron sus tasas de interés con el fin de “recolectar dinero” y evitar la inflación.
El efecto para Latinoamérica fue catastrófico: por un lado, toda su deuda se hacía más costosa mientras la carga financiera de la mayor parte de las materias primas también aumentó. Con el fin de mantener las condiciones de crecimiento bajo las que los gobiernos latinoamericanos habían llegado al poder fue necesario acudir a préstamos insostenibles que terminarían por generar un profundo daño.
América Latina llegó a deber 50% de su PIB total, unos $315 billones de dólares de la época. México faltó a su deuda en 1982.
Luego del default, instancias internacionales asumieron el control del manejo económico de México pues se consideró al gobierno como incapaz de manejar una crisis que, ciertamente, pudo tener menores efectos. Los grandes bancos renegocian las deudas por el valor de sus intereses, no de su principal – este se paga con las arcas del estado, lo que causa retrasos en el desarrollo de los países hasta por 10 años.
El gobierno de Nicolás Maduro pierde soberanía sobre su territorio día a día, tanto políticamente como económicamente. Ante un impago, las naciones poderosas del mundo perseguirán vorazmente recuperar su inversión en un sistema socialista que una vez más refleja su insostenibilidad. Sin importar sus aparentes colores políticos.
Latin American Post | David Eduardo Rodríguez Acevedo
Copy edited by Susana Cicchetto