Un sindicato industrial alemán sentó un precedente después de negociar un acuerdo que privilegia las condiciones laborales sobre los salarios

Los trabajadores de las industrias del metal y electricidad en Alemania se han asegurado el derecho de reducir su tiempo de trabajo de 35 a 28 horas por semana. IG Metall, el sindicato más grande del país y uno de los más poderosos del mundo, negoció un acuerdo para proporcionar a sus trabajadores mejores condiciones en términos de equilibrio entre el trabajo y la vida personal.

Para el próximo año, 2019, los trabajadores del metal y la ingeniería en el sudoeste de Alemania pueden optar por trabajar 28 horas a la semana durante un máximo de dos años y luego volver a su semana laboral habitual. Evidentemente, a los empleados se les pagará de acuerdo con las horas que trabajan, pero esta reducción temporal a menos de 6 horas al día les permitirá combinar el trabajo y la vida familiar de maneras más flexibles.

Según The Telegraph, el acuerdo ahora cubre a alrededor de 900,000 trabajadores en el estado de Baden-Württemberg, pero es probable que provoque cambios similares en todo el país y en diferentes industrias. Además, a los empleados también se les otorgará un aumento de 4.3% en los salarios desde abril después de que el sindicato rechazó un aumento de 6.8% para asegurar la reducción de horas.

Sin embargo, esta no fue una negociación fácil entre los empleadores e IG Metall. Como informaba Independent UK, "el acuerdo se produce después de que IG Metall llamara a tres huelgas de 24 horas y derribara a los trabajadores en varias empresas de ingeniería".

Si bien se ha dicho que trabajar menos horas les permitirá a los empleados cuidar a niños, ancianos o parientes enfermos; las personas también podrían optar por tomarse más tiempo para relajarse, dedicarse a pasatiempos, entre otros.

Los empleadores no pueden bloquear a los trabajadores individuales para que no acepten la reducción temporal de las horas de trabajo. Sin embargo, a cambio, las empresas se adjudicaron el derecho de ofrecer contratos de 40 horas a quienes estén dispuestos a trabajar más.

El acuerdo fue negociado con representantes de más de 700 compañías. Algunos de ellos dijeron que sus empleadores ya ofrecían opciones de trabajo flexibles y que el acuerdo no sería perjudicial. Otros mostraron cierta preocupación sobre las consecuencias que estas medidas pueden ocasionar, según CNN.

Las negociaciones han tenido lugar en un contexto muy particular. El año pasado, la economía alemana creció a su ritmo más rápido en seis años y el desempleo es el más bajo desde 1990. Como lo expresó la BBC, "después de un período de 10 años donde los salarios han crecido solo un 0,81%, como promedio. la economía se ha recuperado, los sindicatos sintieron que era su turno de exigir a los empleadores ".

Además, los acuerdos que se han alcanzado pueden sentar un precedente no solo para el resto del país, sino también para otras economías de todo el mundo. Por ejemplo, la tasa de desempleo de Estados Unidos se mantuvo en un mínimo de 17 años en enero de 2018 y, según el Financial Times, los últimos datos de empleo apuntan a una aceleración en el crecimiento salarial. Esto podría conducir a un mayor poder de negociación de los trabajadores en EE. UU., similar a lo que sucedió en Alemania.

Latin American Post | Paula Bautista

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