Omnilife-Chivas de México acelera su crecimiento global con una base en Texas

Omnilife-Chivas, el gigante mexicano de suplementos y bienestar, está consolidando su presencia global con la construcción de una innovadora planta de producción en Texas y movimientos estratégicos en América Latina y Europa.

Planta en Texas y la Tendencia del Nearshoring

Omnilife-Chivas, grupo líder en suplementos nutricionales y productos de bienestar, impulsa su expansión global con una nueva fábrica en Dallas, Texas. En una entrevista con EFE, el CEO y presidente Amaury Vergara destacó la visión de la empresa para aumentar su capacidad de producción internacional y reducir la incertidumbre ante posibles disputas comerciales entre EE.UU. y otras regiones.

La inversión en Texas supera los 35 millones de dólares en tecnología y automatización. Vergara explica que el proyecto no es solo una expansión, sino un plan estratégico para abastecer varios mercados con mayor eficiencia. “Hemos invertido más de 20 millones de dólares en dos áreas de propiedad”, señala. “Y solo en equipo, el costo asciende a otros 15 millones de dólares”.

Actualmente, Omnilife-Chivas depende en gran medida de su planta en Guadalajara, que opera al 95 % de su capacidad. La nueva instalación en EE.UU. aumentará la capacidad productiva y mitigará riesgos arancelarios. Si surgen barreras comerciales, tener una planta en EE.UU. ofrecerá una ventaja clave.

Vergara señala que esta decisión se alinea con la tendencia global del nearshoring, en la que las empresas trasladan o expanden su producción cerca de sus principales mercados. La planta en Texas operará en la segunda mitad de 2026, facilitando el envío de productos a Asia y Europa. “Desde EE.UU., es más fácil distribuir nuestros productos internacionalmente”, enfatiza Vergara. Además, ayuda a reducir costos de logística.

Este movimiento también responde a esfuerzos globales para mitigar riesgos en la cadena de suministro. Al acercarse a los mercados clave de América del Norte, Omnilife-Chivas minimiza problemas de transporte, fluctuaciones cambiarias y tensiones geopolíticas.

Expansión en América Latina y Europa

La planta en Texas es una de las inversiones más ambiciosas de Omnilife-Chivas, pero forma parte de una estrategia geográfica más amplia que también incluye América Latina y Europa. En 2024, las ventas de la compañía superaron los 580 millones de dólares, con México y EE.UU. como sus principales mercados. Sin embargo, la región andina, especialmente Perú y Colombia, se proyecta como un foco de crecimiento.

Vergara menciona que países como Perú, Ecuador, Colombia y Guatemala han mostrado un crecimiento constante en ventas, convirtiéndose en objetivos clave para inversiones en distribución y promoción. Los mercados centroamericanos como El Salvador, Guatemala y Costa Rica también son estratégicos, sirviendo como puertas de entrada a un crecimiento regional más amplio. Esto refuerza la posición de Omnilife-Chivas entre las 20 principales empresas de mercadeo multinivel.

En Europa, la empresa tiene presencia en España e Italia y busca expandirse en la Unión Europea mediante la obtención de permisos y la adaptación de etiquetas de productos a las normativas locales. “Si viajas a Europa y miras nuestras etiquetas, verás que están impresas en todos los idiomas de la UE”, explica Vergara. Desde España, su centro estratégico, la compañía distribuye productos a múltiples países europeos.

Al centralizar la logística en España, Omnilife-Chivas aprovecha su conocimiento del idioma y la cultura para navegar las complejas regulaciones de la UE, facilitando la expansión y asegurando el cumplimiento de altos estándares de calidad y seguridad.

El enfoque se basa en fabricar productos cerca de sus mercados de venta y adaptarlos a las preferencias locales. Vergara subraya la importancia de ofrecer suplementos de calidad alineados con los hábitos alimenticios y tradiciones de cada región, asegurando accesibilidad sin importar si los consumidores están en Lima o Roma.

Automatización Innovadora y Perspectivas Futuras

Una pieza clave en la estrategia de Omnilife-Chivas es la inversión continua en tecnología y automatización. En los últimos tres años, la empresa ha destinado más de 20 millones de dólares a mejorar la producción y fortalecer la seguridad digital. Esta apuesta por la innovación abarca toda la cadena de valor, desde la adquisición de materias primas hasta la entrega final de los productos.

La inteligencia artificial (IA) y el análisis de datos desempeñan un papel crucial en la optimización operativa. “Tenemos tecnología para medir la productividad en tiempo real”, dice Vergara. “Analizamos desde el tiempo de inactividad de las máquinas, ya sea por fallos mecánicos o factores humanos, hasta las tasas de producción. Con IA, obtenemos conclusiones clave para mejorar nuestros procesos”.

La estrategia de automatización va más allá de la maquinaria. La seguridad de la información es una prioridad para proteger recetas, datos de la cadena de suministro y la información de los clientes. Este doble enfoque en eficiencia operativa y seguridad digital refuerza la confianza de los consumidores a nivel global.

A pesar de desafíos económicos como la inflación y cambios en regulaciones comerciales, Vergara ve oportunidades de crecimiento. “Las crisis suelen traer más oportunidades”, afirma. Omnilife-Chivas mantendrá una estrategia de inversión firme, incluyendo la expansión de su planta en Guadalajara en los próximos cinco años, una vez que la instalación en Texas ayude a aliviar las limitaciones actuales.

Estos cambios consolidarán la posición de la empresa como líder en el mercado global de mercadeo multinivel y bienestar. Omnilife-Chivas también pone gran énfasis en la investigación, el desarrollo de nuevos productos y el apoyo a iniciativas con impacto social, elementos clave para su crecimiento sostenido.

El objetivo de Vergara es lograr que Omnilife-Chivas sea una referencia en múltiples regiones, ofreciendo productos de bienestar a una audiencia cada vez más consciente de la salud. La empresa aprovechará su conocimiento cultural, las últimas tecnologías y una estrategia financiera sólida para adaptarse a las dinámicas del comercio global.

No obstante, el hito más inmediato será la puesta en marcha de la planta en Texas en 2026, un movimiento que definirá la identidad de Omnilife-Chivas en los próximos años. Si la compañía alcanza sus objetivos, podría convertirse en un caso de estudio sobre cómo una empresa mexicana puede aprovechar el nearshoring, la automatización y la diversificación de mercados para asegurar su éxito en el escenario internacional.

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Vergara se mantiene optimista y cree que Omnilife-Chivas apenas está comenzando a demostrar su potencial. “Estamos orgullosos de nuestro origen y del camino recorrido, pero aún queda mucho por hacer”, concluye. La empresa seguirá explorando nuevos mercados e invirtiendo en tecnología para responder a las cambiantes necesidades de los consumidores en todo el mundo.