NEGOCIOS Y FINANZAS

Trinidad y Tobago logra importante acuerdo de gas con Shell y Venezuela

El Ministro de Energía de Trinidad y Tobago, Stuart Young, expresó su satisfacción con la decisión de Shell de explotar el campo de gas Manatee, lo que marca un paso significativo en la cooperación energética regional.

En un avance significativo para el sector energético de Trinidad y Tobago, Shell ha decidido seguir adelante con la explotación del campo de gas Manatee, decisión que ha merecido elogios del Ministro de Energía e Industrias Energéticas del país, Stuart Young. Este campo, descubierto en 2005, forma parte de un descubrimiento transfronterizo entre Venezuela y Trinidad y Tobago en el área de Loran-Manatee, que cuenta con alrededor de 10 billones de pies cúbicos de gas natural.

El campo de gas Manatee es un activo crítico en el panorama energético de la región, con sus vastas reservas divididas entre Venezuela (7,3 billones de pies cúbicos) y Trinidad y Tobago (2,7 billones de pies cúbicos). Este desarrollo impulsará el sector energético de Trinidad y Tobago y será un momento crucial para la colaboración energética regional. La importancia estratégica del campo se magnifica por su ubicación y el volumen de recursos, lo que lo convierte en una de las iniciativas de gas natural más importantes del Caribe.

La estatal venezolana Petróleos de Venezuela (PdVSA) anunció a finales de diciembre que había concedido una licencia a Trinidad y Tobago para la extracción y exportación de gas en colaboración con Shell. Esta licencia, con vigencia de tres décadas, contempla una fase inicial de producción de 185 millones de pies cúbicos diarios. La asociación subraya un importante esfuerzo cooperativo transfronterizo para mejorar la seguridad energética y las perspectivas económicas de ambas naciones.

Preparando el escenario para el crecimiento futuro

El Ministro de Energía, Stuart Young, destacó en su página de Facebook que el proyecto se encuentra actualmente en la fase de aprobación, y se espera que la producción comercial comience en 2028. Este cronograma indica una progresión cautelosa pero optimista desde la planificación hasta la ejecución, lo que subraya las complejidades de los proyectos energéticos a gran escala y desafíos logísticos.

La Decisión Final de Inversión (FID) del proyecto está prevista para ser aprobada a finales de este año. Esta decisión allanará el camino para el desarrollo de hidrocarburos más importante de Trinidad y Tobago en las últimas dos décadas. El ministro Young atribuye el progreso de este proyecto a la visión y el liderazgo del primer ministro, y enfatiza el papel de la previsión y la iniciativa gubernamentales para hacer realidad proyectos de gran escala.

Colaboración entre el gobierno y la industria

En sus declaraciones, el Ministro Young también destacó la importancia de la competencia gubernamental y la confianza depositada en ella por grandes socios internacionales como Shell. “Este avance es un logro importante para Trinidad y Tobago y no habría ocurrido sin la confianza y competencia de este Gobierno, así como nuestra fe en Trinidad y Tobago”, comentó.

Estas colaboraciones son cruciales para garantizar la seguridad energética y la sostenibilidad en Trinidad y Tobago. La capacidad del gobierno para lograr acuerdos con importantes actores de la industria refleja su compromiso de aprovechar los recursos naturales de manera responsable y estratégica. Además, el Ministerio de Energía de Trinidad y Tobago emitió una licencia el 17 de octubre de 2023, válida hasta el 31 de octubre de 2025. Esta licencia autoriza al gobierno de Trinidad y Tobago, a la Compañía Nacional de Gas de Trinidad y Tobago, a Shell PLC y a sus afiliadas para realizar negocios con el gobierno venezolano y PdVSA en el campo Dragón, ubicado en aguas venezolanas frente a la costa noreste y adyacente a la costa noroeste de Trinidad.

Las implicaciones regionales de estos acontecimientos son profundas. A medida que Trinidad y Tobago fortalece su sector energético, muestra cómo las naciones pueden gestionar y utilizar eficazmente sus recursos naturales a través de la cooperación internacional. La participación de Venezuela, a pesar de sus complejas circunstancias políticas y económicas, añade una capa de importancia geopolítica a este proyecto, mostrando cómo los recursos energéticos pueden actuar como puentes en la diplomacia y las asociaciones económicas.

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El avance en el proyecto del campo de gas Manatee representa un paso significativo en la estrategia energética de Trinidad y Tobago. Promete impulsar la economía local aprovechando importantes reservas de gas natural y fortalece la posición del país como líder en energía dentro del Caribe. Se espera que la colaboración con Shell y Venezuela bajo este nuevo acuerdo traiga beneficios a largo plazo, asegurando un suministro constante de energía y fomentando la estabilidad económica en la región. A medida que estos planes lleguen a buen término, probablemente sirvan como modelo para la futura cooperación energética internacional, particularmente en áreas ricas en recursos naturales pero plagadas de inestabilidad política y económica histórica.

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