¿Más lejos de la igualdad de género? Las brechas han aumentado y tienen nuevas caras

La pandemia causó un impacto social, económico y político que terminó en retrocesos en muchas áreas: debilitó los sistemas de salud, aumentó las brechas educativas y las tasas de pobreza y la desigualdad. La igualdad de género no fue indiferente a su paso y miles de mujeres en el mundo se vieron en situaciones de vulneración a sus derechos. Por esta razón, este 8 de marzo de 2023 llega con información sobre la compleja situación de las mujeres y niñas en el mundo, y la necesidad de continuar luchando por el reconocimiento de los derechos de las mujeres y el establecimiento de garantías para que se cumplan sus derechos.

“Se desvanecen ante nuestros ojos”: estas fueron las palabras que usó el Secretario General de la ONU para hablar de los avances que se habían conseguido durante décadas en los derechos de las mujeres, que constantemente se ven amenazados. Además, agregó que la igualdad de género estaría a unos 300 años de distancia si se continúa por la misma ruta. Paradójicamente, esta misma organización es la muestra de un botón: desde su creación ha habido 9 secretarios generales, ninguno de ellos mujer. Sin embargo, la mitad de la población mundial es femenina. 

Pese a esta crítica, esta organización tiene organismos especializados, fondos y programas que trabajan en todo el mundo para conseguir objetivos en el mejoramiento de la calidad de vida de millones de personas. En el marco de la 67ª sesión de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, ONU Mujeres y la OIT han revelado datos sobre las últimas mediciones respecto a la igualdad de género y sus brechas. 

Te recomendamos leer: 25N Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer: historia y por qué marchar

Era digital y desigualdad de género: grandes desafíos 

La era digital y los cambios acelerados que se están viviendo en lo que se ha conocido como la cuarta revolución industrial supone nuevos desafíos casi en todas las áreas de la vida. Al respecto, las Naciones Unidas ha señalado que los espacios en línea están propiciando nuevos escenarios para ejercer violencia contra las mujeres, mientras se facilita el anonimato e impunidad de los agresores. Asimismo, evidencia que hay discriminación en el sector tecnológico. Por último, señala que las normativas mundiales y leyes no son suficientes y claras para garantizar una protección de los grupos vulnerabilizados. 

“Las mujeres tienen un 18% menos de probabilidades que los hombres de poseer un teléfono inteligente y muchas menos de acceder a Internet o utilizarlo. Solo el año pasado 259 millones más de hombres que de mujeres se conectaron a internet. Solo el 28% de los graduados en ingeniería y el 22% de los trabajadores en inteligencia artificial a nivel mundial son mujeres”, explicó Sima Bahous, directora de ONU Mujeres, en un comunicado de prensa. Asimismo, se estima que solo 1 de cada 5 personas trabajadoras de la inteligencia artificial son mujeres. 

Así, parece que los cambios de la revolución tecnológica se dan a ritmos tan acelerados que no se han desarrollado regulaciones y soluciones adecuadas a este ritmo. Además, dependiendo del contexto, las herramientas digitales se han convertido en una forma de empoderamiento, independencia y conocimiento. Por ejemplo, permiten acceder a educación virtual o contactar con redes de apoyo. Por otra parte, las competencias digitales son indispensables hoy en día para ingresar a muchos mercados laborales. Si en todos estos campos las mujeres se están quedando atrás, es muy complejo resolver esas desigualdades históricas. 

Las diferencias laborales son mayores de lo que se pensaba

Por su parte, la Organización Internacional del Trabajo OIT publicó un informe titulado "Nuevos datos sobre las diferencias de género en el mercado laboral". En este se señala que el 15% de las mujeres en edad de trabajar, y con deseos de hacerlo, se encuentran desempleadas, frente al 10,5% de los hombres. Al respecto, la OIT ha desarrollado un nuevo indicador llamado la brecha de empleo, que incluye a todas las personas en edad de trabajar que están interesadas en encontrar un empleo. "Al utilizar este indicador y no la tasa de desempleo, quedan al descubierto desequilibrios de género más acentuados en cuanto al acceso a un oficio y las condiciones laborales".

Asimismo, indica que aún existe una "penalización por la maternidad", es decir, una discriminación laboral de las mujeres por ser madres. A esto se suma su trabajo extra en las labores de cuidado. Por otra parte, se señala que la diferencia entre las regiones es enorme. "La disparidad de género en los países de renta baja y media-baja es también más amplia: las mujeres ganan 29 y 33 céntimos por dólar, respectivamente, por cada dólar que ganan los hombres", señala la OIT. En los países de renta media-alta y alta, los ingresos de las mujeres se sitúan en 56 y 58 céntimos. Esto muestra que la desigualdad es transversal. 

Por otra parte, hasta el 17 de marzo se estará realizando el 67º período de sesiones de la Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW67), la reunión más importante de las Naciones Unidas para tratar los temas relacionados con la igualdad de género. Este año su lema será: “Innovación y cambio tecnológico, educación en la era digital para lograr la igualdad de género y el empoderamiento de todas las mujeres y niñas”.