Guillermo del Toro se tira al agua
¿Por qué "La forma del agua" ha arrasado en las nominaciones a los Óscar?
No han sido suficientes los premios obtenidos en el American Film Institute, los Globos de Oro, el Festival de Cine de Venecia, los Hollywood Film Awards, entre otros. Esta vez, "La forma del agua" le apunta a los Premios Oscar con 13 nominaciones entre las que se encuentra mejor película, mejor guión, mejor dirección y diseño de producción. Pero tanto reconocimiento no es gratuito, su director, el mexicano Guillermo del Toro, con el filme, da cuenta de su florecimiento en el mundo del cine, con un estilo particular que le permite meterse en una categoría de cine de autor.
Al igual que en películas como El laberIGNORE INTO del Fauno y Hellboy, del Toro le apuesta a la historia de amor entre un monstruo anfibio lleno de bondad y una mujer muda llamada Elisa. El filme que se desarrolla en el contexto de la Guerra Fría, no solo es acertado en cuanto a su vestuario y fotografía, sino que logra mezclar el contexto histórico con la fantasía, sin perder su verosimilitud y sin dejar de lado una crítica a los seres humanos y a todo lo que significa su ambición y sus políticas, las cuales muchas veces son más destructivas que favorecedoras.
Esto se aclara cuando las pretensiones de los personajes que trabajan para el gobierno norteamericano y ruso se van haciendo evidentes y entre ellos comienzan a establecer una serie de planes que apuntan a sacrificar a la criatura que fue atrapada en un río de Suramérica. Por un lado los americanos pretenden matarla para diseccionarla con fines científicos y por el otro, los rusos solo quieren liquidarla. A ello, se suman los personajes que están en contra de dicho sacrificio, personajes excluidos de la sociedad como Elisa (la mujer muda), Zelda (una mujer afro que es su compañera de trabajo) y Giles (su mejor amigo, que es homosexual).
La película no solo se queda en personajes, disfraces y una historia que parece ser sencilla. "La forma del agua" también se adentra en la música, la literatura y el cine. No es gratuito por ejemplo que Elisa viva encima de un cinema, que Giles recurra a la poesía para referirse a ella, porque al fin y al cabo, esta película ensalza a Hollywood. Lleva consigo la forma de "El monstruo de la laguna negra", un filme de la Guerra Fría dirigido Jack Arnold, que fue de terror, y que sale nuevamente a la superficie, en salas de cine, a través del último trabajo de Guillermo del Toro. Esta película, aunque no encaja dentro de alguno de los géneros cinematográficos, ha logrado quedarse con las mejores críticas y ante todo entretener a su audiencia.
Así, mientas Del Toro, a través de su monstruo enaltece la naturaleza y exalta el silencio del que es dueño Elisa, con recursos poderosos como la música y actuaciones de gran envergadura, evita que el filme recaiga en momentos aburridos, logrando así, un efecto contrario en donde acción y romanticismo también son protagonistas.
De esta manera "La forma del agua" rescata una belleza que no es evidente ante cualquier tipo de ojos, una belleza que es profunda, como el agua.
Latin American Post | María Alejandra Gómez
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