La casa de las flores: el nuevo placer culposo de Netflix
Si viste Luis Miguel sin parar, entérate de este, el nuevo dramón de Netflix
Cualquiera que haya crecido en Latinoamérica, ha visto en algún momento de su vida la típica telenovela de media tarde conformada por exageraciones dramáticas y personajes cargados de emoción. La nueva serie de Netflix, dirigida por Manolo Caro, llega como un soplo de aire fresco ante este género.
Y es que luego del sorprendente éxito, que la plataforma de streaming tuvo con Luis Miguel: la serie, no es de extrañar que continúe con la narrativa de las telenovelas.
Ya en las redes sociales se puede ver el efecto que ha generado esta serie con elementos virales como el: #PaulinaMoraChallenge, en el que los usuarios imitan a una de las protagonistas.
Ay sí, mucha risa con el #PaulinaDeLaMoraChallenge síganle. Los estoy observando. pic.twitter.com/Y0WZlrPU89
— La casa de las flores (@CasaFloresTV) 14 de agosto de 2018
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La serie (Sin spoilers)
La casa de las flores inicia con la frase de Vincent Van Gogh: "la normalidad es un camino pavimentado. Es cómodo para caminar, pero nunca crecerán flores en él". Narra la historia de la familia De La Mora, que en apariencia es perfecta, pero queda al descubierto tras un trágico suceso que tenía como propósito revelar los secretos que todos escondían.
La familia está compuesta por la madre, Virginia (interpretada por Verónica Castro, uno de los íconos de la televisión mexicana), quien es la gerente de la florería que durante cincuenta años ha sido la base de la fortuna de la familia; el padre, Ernesto (interpretado por Arturo Ríos), por quien se origina la implosión de sucesos que le darán vida a la serie; y los hijos: Paulina (interpretada por Cecilia Suárez), la mayor y principal apoyo de la familia, Julián (interpretado por Darío Yazbek Bernal), el vago y consentido hijo menor, y Elena (interpretada por Aislin Derbez), la hija arquitecta que vive en Estados Unidos.
Es fácil identificarse con esta familia, ya que involucra dramas cotidianos y actuales en los que todos los miembros de la familia podrán verse reflejados. Desde como eliminar a una hermana del grupo de WhatsApp tras una discusión, enojarse con la familia tras los únicos que no se enteraron de alguna situación o secreto, hasta intentar ganarse la aprobación de los padres a todo lugar.
¿Por qué un placer culposo?
La serie, que más que serie es realmente una telenovela, sigue la tradición de estas últimas al tener como objetivo dejar un mensaje educativo, el cual es la aceptación de sí mismo, la importancia de la honestidad y el no caer en perjuicios. Además, aborda temas como la bisexualidad, la transexualidad, matrimonios interraciales (que parecen un tema de antaño, pero que en la realidad se mantienen) y el sexo casual, con el propósito de normalizarlos. Por ejemplo, hay un diálogo que tuvo eco en las redes sociales, en el que Paulina le reprocha a su hermano sugerir vengarse de su ex novia revelando con cuántos se había acostado: “No vamos a ser parte de esa cultura machista que humilla a las mujeres por tener vida sexual activa, naco".
Con mucho humor negro, temas controversiales y una fuerte crítica a la fría y controladora clase alta no solo mexicana, sino latinoamericana, que vive de las apariencias y del qué dirán, La casa de las flores logra enganchar y convertirse en un placer culposo muy fácil de ver, lleno de equilibrio entre el humor y el drama.
LatinAmerican Post | Camila González C.
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