El tinte hispanoamericano y caribeño de la NBA
Veteranos hispanoamericanos vuelven a tomar roles determinantes en la NBA, así como nuevas figuras comienzan a brillar
Con casi treinta partidos disputados a esta altura de la temporada de la NBA, varios jugadores iberoamericanos están despuntando con sus respectivos equipos. Tal es el caso de viejos conocidos como el puertoriqueño José Juan Barea, base armador de los Dallas Mavericks, o el escolta zurdo argentino Emanuel Ginobili. A estos nombres pueden agregarse los del dominicano Al Horford, perteneciente a la escuadra de los Boston Celtics.
Como representantes hispanos, aparecen los hermanos Gasol, Pau y Marc: el primero, jugador de los San Antonio Spurs, y el segundo de la escuadra de Memphis Grizzlies. Igualmente hay otros nombres que comienzan a estar bajo los reflectores, como Ricky Rubio, del Utah Jazz, o José Manuel Calderón, de los Cleveland Cavaliers.
De este lado del charco, los veteranos Manu Ginobili y José Juan Barea han retomado cierto protagonismo con sus equipos. Ginobili, internacional con la selección argentina, volvió a las duelas de la NBA para su temporada número 16, luego de que el año anterior circularan rumores acerca de su posible retiro. Este año, Manu ha promediado 8.3 puntos en poco más de veinte juegos, estando en la cancha cerca de veintiún minutos. Las condiciones fueron las propicias para que Ginobili, con casi 40 años, volviera a tener un rol importante ante las lesiones de Tony Parker y Kawhi Leonard; Manu ha comandado a la segunda escuadra saliendo de la banca. San Antonio tiene, al 7 de diciembre, récord de 17 ganados por ocho perdidos, ocupando el tercer lugar en la Conferencia del Este. Caso contrario es el de Dallas Mavericks, una escuadra bastante mayor, como lo representa el caso de J. J. Barea, nacido en Puerto Rico hace 33 años. Este año, el de Mayagüez promedia 12 puntos y 5.4 asistencias en 25 partidos jugados. Sin embargo, las cosas para Dallas no van bien, ya que marchan últimos en el Este, con un récord de 7-18.
Por otro lado, los jugadores nacidos en España continúan destacando con sus respectivas escuadras. José Calderón, quien este año esperaba un rol más bien desde la banca, ha jugado 16 partidos para Cleveland, aprovechando la coyuntura ocasionada por las lesiones de Derrick Rose e Isaiah Thomas. Calderón promedia poco más de dos puntos y 48.5% de tiros de campo. Cavaliers marcha segundo en la Conferencia del Este, detrás de Boston. Por otra parte, los hermanos Gasol siguen teniendo roles importantes en sus equipos. El 5 de diciembre, Marc ayudó con 21 puntos a acabar la racha de Memphis de 11 partidos sin conocer la victoria. Su hermano, Pau, promedia 11.2 puntos por encuentro esta temporada, acompañando a Ginobili en San Antonio. Otro viejo conocido es Ricky Rubio, quien llegó a la liga en 2011, sumándose a las filas de Minnesota Timberwolves, aunque este año fue traspasado al Jazz de Utah. El base armador se encuentra en medio de los contrastes, ya que esta es la temporada que menos minutos ha jugado (28.7 por partido), pero en la que su cociente de puntos es el más alto de su carrera en la NBA (11.9 por partido): el Jazz marcha octavo en el Oeste, con 13 ganados y 13 perdidos.
Vale la pena mencionar a jugadores como Al Horford, oriundo de República Dominicana, quien desde el año pasado se hizo de la titularidad con los Celtics de Boston, equipo que tiene el mejor récord de la liga, liderando el Este con 22 ganados y 4 perdidos. Por España, podríamos mencionar a los hermanos Hernangómez, Juancho y Willy, con Denver Nuggets y New York Knicks, respectivamente, quienes esperan aportar para que sus equipos lleguen a play-offs.
Latin American Post | Jesús Koyoc
Copy edited by Laura Rocha Rueda