Existen tres tipos de somatotipos que tendrás que tener en cuenta a la hora de entrenar y alimentarte 

En los últimos años parece haberse disparado el interés de las personas en llevar una vida activa y en mantener una alimentación balanceada y saludable. Pese a lo positivo que esto pueda llegar a ser, el no alcanzar los objetivos deseados está trayendo consigo una serie de lesiones y trastornos alimenticios con cifras preocupantes. 

En México, según Excelsior, cada año se documentan 20 mil casos nuevos de bulimia y anorexia entre adolescentes, lo que ha representado un aumento del 300 por ciento en los últimos 20 años. 

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A la hora de establecer metas con respecto a nuestro cuerpo, es importante entender que no todos somos iguales: de acuerdo con MundoFitness, existen tres tipos de somatotipos o tipos de cuerpos que tendrás que tener en cuenta a la hora de entrenar y alimentarte. 

Según el diario Deporte y Vida, una persona endomorfa va a tener dificultades para perder peso corporal ya que, a pesar de tener una ingesta calórica baja, tienen un metabolismo lento y un cuerpo genéticamente redondo. Estas personas deberán realizar cuatro sesiones de cardio a la semana para quemar la acumulación de grasa, evitar el entrenamiento de peso y los carbohidratos que no sean saludables.

Además, según explica a BBC Mundo Juan Francos Marco, licenciado en ciencia deportiva del centro de alto rendimiento, "para alguien endomorfo es mucho más difícil cualquier actividad física que para una persona del grupo ectomorfo o mesomorfo, y eso hace que tengan más predisposición a llevar una vida más perezosa."

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Por su parte, los ectoformos tienen cuerpos muy delgados, un metabolismo acelerado y dificultad para ganar peso. Es recomendable que estas personas no hagan sesiones de cardio largas y seguidas porque pueden perder peso rápidamente; por el contrario, el entrenamiento de fuerza con pocas repeticiones y descansos prolongados, es ideal para aumentar la masa corporal. 

“Es muy difícil cambiar con ejercicio ciertos parámetros marcados genéticamente, como la altura o anchura de las caderas; pero sí hay otros con mucho más margen de modificación, como el tejido muscular, la grasa y, sobre todo, la postura” dijo Marco. 

Por último, los mesomorfos tienen la magnitud músculo-esquelética relativa y pueden parecer muy atléticos sin serlo necesariamente. Se recomienda combinar ejercicios de fuerza y potencias con entrenamiento aeróbico para mejorar la resistencia cardiovascular. Además, deberán consumir proteínas en cada comida, abundantes vegetales y cantidades moderadas de carbohidratos.

El buscar resultados rápidos se puede volver problemático para las personas, por lo que es importante entender que hay aspectos acerca de nosotros que no podemos cambiar y con los que debemos convivir. 

"Si no ven la recompensa aparecen las dudas y cuestionan si está valiendo la pena el esfuerzo" concluyó Marco, para quien, lo más importante, es entender que los procesos requieren tiempo, voluntad y dedicación para obtener una recompensa. 

LatinAmerican Post | Luisa Fernanda Báez
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