No todos los Fintech usan tu dinero de manera responsable
Latinoamérica es un centro de inversión y crecimiento de las empresas Fintech, es decir, empresas que aportan una nueva forma de hacer negocios mediante redes sociales
Brasil, México y Colombia se ubican respectivamente en los tres primeros lugares en cuanto a innovación de start ups Fintech, es decir, empresas que han entrado al mercado financiero aportando una nueva forma de hacer negocios a través de medios digitales. Estas empresas se presentan, a su vez, como una alternativa a los bancos tradicionales, pues democratizan y hacen aún más eficientes las transacciones que históricamente se habían relacionado con las entidades bancarias. Préstamos, créditos o transacciones económicas son algunas de las apuestas que las Fintech han tomado.
Sin embargo, últimamente también es común ver a los bancos más tradicionales relacionarse con estas iniciativas, como es el caso de organizaciones como BBVA, Scotiabank o Santander. BBVA, por ejemplo, se ha preocupado en brindar un conocimiento básico a sus clientes acerca de las Fintech y temas relacionados, como las regtech (empresas de regulación a través de la tecnología) o las criptomonedas, a través de artículos que pueden encontrarse en las páginas web de las diferentes sedes de países latinoamericanos y España.
El crecimiento de las Fintech en Latinoamérica
Según cifras aportadas por Finnovista, para junio de 2018, el crecimiento de las Fintech en América Latina ha experimentado un crecimiento cercano al 50% en las diferentes regiones, siendo Brasil quien ha pasado a liderar este proceso. Si bien México se perfilaba como la mayor industria de la región, que de 2017 a 2018 ha tenido un crecimiento del 40% representado en 125 nuevas empresas Fintech, Brasil ha logrado alcanzar esta primera posición. Una de las causas, aunque no la única, puede ser la existencia de Nubank.
El Nubank es un proveedor de servicios de pago brasileño al que solo se puede acceder de manera virtual y que se sitúa como una empresa “unicornio”, pues ya alcanzó una valuación de mil millones de dólares tras haber recaudado más de 330 millones en inversión, reporta Reuters. Resulta interesante, al margen de quién lidere el número de empresas Fintech en funcionamiento, que la región tenga un crecimiento tan elevado, lo que indica una amplia oportunidad de negocio e inversión extranjera en las iniciativas locales.
Los retos de las Fintech
A pesar de todas las posibilidades que ofrecen las Fintech a sus clientes y de las alternativas que traen en materia de seguridad, tanto financiera como de información, estas empresas aún tienen grandes retos para superar, especialmente en Latinoamérica. Por un lado, las Fintech se encuentran desprotegidas legalmente hablando, pues en la mayoría de los Estados no existe una regulación específica, a excepción de México, quien recientemente aprobó una ley al respecto. Por otro lado, está el tema de la inclusión al sistema financiero y el acceso a Internet.
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La ley Fintech mexicana se presenta como la primera ley en su tipo, la cual busca proteger a sus clientes y el patrimonio que depositan sus usuarios, de acuerdo con CNN en Español. Esta ley, que se promulgó en medio de controversias pues algunos expertos afirmaban que era demasiado temprano para legislar un campo en pleno desarrollo, es una medida que establece parámetros fijos, tanto para las empresas como para los clientes.
Entidades de regulación mundial, como el GAFI, han sido enfáticas en la necesidad de crear marcos legales de referencia para las Fintech, ya que existe un grave riesgo de que los usuarios se vean involucrados en delitos de los que no tienen conocimiento alguno. Lavado de dinero, transacciones fraudulentas o suplantación de identidad, son algunos de los riesgos potenciales que identifica esta entidad, creando un panorama difícil. ¿Son acaso las Fintech un riesgo inevitable, debido a su gran crecimiento y a la falta de conocimiento por parte de sus usuarios?
Además de la necesidad de una regulación legal, los países latinoamericanos deben hacer un amplio esfuerzo para garantizar un mayor acceso de sus comunidades al sistema financiero y a la red. Estas son dos características fundamentales para que las Fintech prosperen y sean una verdadera alternativa de democratización de los canales financieros más comunes, como el crédito y las transacciones financieras.
Sin lugar a dudas este campo, que aún se encuentra en crecimiento, tendrá en los próximos años un papel relevante, incluso mayor al que ahora desempeña. Es posible que, incluso, el panorama financiero pase a ser totalmente determinado por las Fintech y sus nuevas alternativas de negocio.
LatinAmerican Post | Jorge Ovalle
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