“Titane”: la impactante y polémica ganadora de la Palma de Oro a la mejor película del 2021

El Festival de Cannes es uno de los mejores certámenes para los amantes del “buen cine”. La actual edición tuvo una gran ganadora:"Titane", una película francesa de tipo thriller que está escrita y dirigida por Julia Ducournau, que, además, se convirtió en la primera mujer en ganar en solitario este certamen.

Recordemos que, para 1993, Jane Campion lo obtuvo en asociación con Chen Kaige, por "Adiós a mi concubina". Esto también es importante, pues la competición oficial contó con 24 largometrajes, cuando lo habitual es no tener más de 20. Incluso, más de 30 filmes quedaron fuera de esta competición, todo en 12 días.

Pues bien, este certamen de calidad regresó por todo lo alto, ya que en la edición del 2020 no se pudo llevar a cabo por la crisis de la COVID-19. Con un 40% de menor público y acreditaciones, el nivel fue alto, coronándose con "Titane", una película que tuvo una proyección tan polémica como aclamada. Veamos por qué.

Lea también: La cuota que tiene Latinoamérica en el Festival de Cannes 2021

"Titane": la Palma de Oro

Lo primero que debemos mencionar es que la propia celebración fue un tanto “accidentada”. Esto sucedió porque Spike Lee, reconocido director de grandes películas de los Estados Unidos, reveló antes de tiempo cuál sería la ganadora de este certamen. Recordemos que esta personalidad es el presidente de jurado, por lo que esta declaración acabó siendo cierta.

Ahora bien, la decisión está bien justificada: "Titane" es una película impactante. Esta obra trata sobre una asesina en serie, donde se incluyen escenas realmente explícitas y violentas, que hizo que algunos espectadores abandonasen la sala e, incluso, perdieran el conocimiento.

Según retrató la web Lenta, algunos presentes no soportaron la “crueldad” que se exhibía en varias escenas, hasta el punto de llegar a vomitar o requerir ayuda médica inmediata. No es la primera vez que sucede algo similar en este género, pero sí es cierto que es una de las pocas veces que adquiere tanta notoriedad en un festival de esta envergadura.

Ahora bien, además de la impresión visual que causa el realismo de varias escenas despiadadas, la propia narrativa es increíble. Nuestra protagonista, Alexia, es una bailarina exótica que cautiva al público. Con un predominio del sub-género slasher, nos topamos con una obra perturbadora, donde aparecen pesadillas relacionadas con el cuerpo y el salvajismo de la brutalidad.

Esto se consigue gracias a la increíble dirección de la cineasta francesa, que logra enganchar a los espectadores desde el primer minuto y quiere dejar en claro que su intención es destacar y no pasar desapercibida. El guion es acelerado, tal y como debe serlo una cinta con estas características, pero también su propia fotografía e incluso la banda sonora logran combinar con este género.

Incluso, podría decirse que es una especie de “mejora” de lo que se pudo ver en "Crudo", su trabajo del 2016 que también había sido muy bien recibido dentro del terror francés. También hay algo de crítica social, pues la propia directora hace una especie de condena sobre la cultura de los automóviles que cosifican a las mujeres, en este caso caracterizado por una protagonista andrógina.

Por otro lado, las actuaciones logran transmitirnos las incertidumbres e incluso los terrores de muchos de los personajes. Allí destacan los talentos de Vincent Lindon, Agathe Rousselle, Garance Marillier y Laïs Salameh, entre otros, que logran darle verosimilitud a una historia con toques de terror-fantástico.

Justamente, cuestiones relacionadas con la corporalidad, el feminismo, el sexo o la sangre permiten compararla con algunas producciones de directores de enorme prestigio, como Cronenberg o Tarantino. Sin embargo, Ducournau logra su propio estilo, con un filme que no busca ser pretencioso, pero que se luce dentro de su propio universo. 

Provocativa, sorpresiva e impactante, "Titane" no es una película para todo el mundo. Los amantes del terror se encontrarán con una obra que tiene sus propias licencias creativas, pero que logra pulir este género hasta el punto de combinar la crítica social con el cine fantástico y escenas brutales de gore.