Entrevista a Paloma Valencia: “Tengo una agenda de mujer, pero es una agenda distinta al feminismo”

LatinAmerican Post inicia un especial sobre las mujeres en la carrera presidencial de Colombia. La primera invitada es la senadora y precandidata uribista, Paloma Valencia. Descendiente de políticos y miembro de una de las familias más reconocidas del país, espera llegar a ser la primera mujer en ocupar el máximo cargo político en el país.

LatinAmerican Post.: ¿Qué opina usted del papel de la mujer en la política colombiana?

Paloma Valencia: Es un papel que tiene que terminar de subir las escaleras. Porque las mujeres venimos avanzando en el tema de la igualdad de derechos. Pero todavía, después de tantos años, no ha habido una mujer en Colombia que haya sido presidente. Yo creo que solo se ha concluido de construir el ascenso de la política de la mujer cuando alguien haya sido presidente y entonces todas la niñas de este país y mujeres jóvenes que quieran entrar a la carrera política vean una posibilidad real de ser presidente también. Yo no creo que las mujeres seamos mejores que los hombres o algo por el estilo. Pero sí es mejor una sociedad donde las mujeres tienen espacios abiertos.

L.P.: ¿Cree que la ausencia de mujeres en la presidencia de Colombia es debido al machismo dentro de la política del país?

P.V.: Hay mucho machismo, claro. Se ve cuando uno mira las pocas mujeres candidatas que hay. Se ve en la falta de oportunidades que le dan a las mujeres y sobre todo, los colombianos no sabemos cómo tiene que ser una mujer que pueda gobernar. Creo que es una pregunta que aún la gente se hace. ¿Cuáles son las características que tiene que tener una mujer que gobierne en Colombia?

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L.P.: ¿Qué opina de las mujeres en el gabinete y en el congreso? ¿Cree que han aportado a la mujer en Colombia?

P.V.: Yo creo que hay mujeres buenísimas en la política. Hay un gran esfuerzo de sobresalir, de hacer las cosas bien, de ocupar un lugar y ocuparlo bien. Hacer de esa oportunidad un ejemplo para todas las mujeres y yo creo que todas son conscientes de que ser mujer en la política está abriendo o cerrando espacios para las mujeres. Entonces, todas al estar muy conscientes de eso, tratamos de hacer las cosas extremadamente bien.

L.P.: ¿Cómo ve usted a sus rivales políticas a la presidencia?

P.V.: Yo creo que cada una de las dos mujeres que hay, la doctora María Fernanda Cabal y la doctora Francia Márquez, encarnan cosas muy distintas. Por su puesto, una (Cabal) es muy amiga mía y hace parte de mi partido. La otra (Márquez) es una líder de mi departamento, también del Cauca, con una visión distinta, un poco odiosa en mi opinión.

L.P.: ¿Tiene usted mujeres de las cuales se ha inspirado en la vida política, en la profesional o en la familiar?

P.V.: De la familia, definitivamente Josefina Valencia, que fue mi tía abuela, que fue una de las mujeres que logró conquistar el voto para las mujeres durante el Gobierno del General Rojas. Fue la primera ministra mujer, la primera gobernadora mujer y fue una de las primeras mujeres elegidas senadoras. Para mí es un gran orgullo ver todo lo que hizo, la fuerza de carácter que tuvo, las batallas que dio y los logros. Tengo ese referente en mi familia que me impulsa mucho.

En el mundo hay mujeres que son increíbles. Uno no puede dejar de pensar en la Pola y su valentía, en su ejemplo y su coraje. En Manuelita, al lado del libertador, dando todas esas batallas tan grandes que ella misma dio. Y en las  mujeres políticas, uno tiene que empezar por Angela Merkel, que es tal vez una de las políticas de derecha más importantes del mundo, con un liderazgo, no solo en su país, de ella dependía toda Europa. Margaret Thatcher, pues maravillosa, también.

Cómo no mencionar a nuestra vicepresidenta, que es el cargo más alto al que haya podido llegar una mujer. Noemí Sanín, que es un ejemplo, de lo que pueden hacer las mujeres y de haber liderado y de haber sido capaz de casi haber sido presidente de este país. Tal vez, ninguna otra mujer como ella ha llegado tan lejos en ese propósito. Yo diría que los derechos de las mujeres, se van construyendo como escaleras. Una vez, alguien hace algo, entonces ese piso ya quedó listo para que la siguen te generación puedan subirlo, entonces siempre hay que pensar en qué escaleras estamos construyendo y esa escalera queda lista. A quienes construyeron todas las escales hacia abajo, recordarlas con admiración.

L.P.: ¿Usted se considera feminista y qué opinión le merece el movimiento?

P.V.: No, feminista no, porque feminista tiene un contexto de izquierda y yo no soy de izquierda ni comulgo con esas ideas. Yo creo que yo tengo una agenda de mujer, pero es una agenda distinta al feminismo. No creo en el aborto como un derecho, tampoco creo que haya que meter a todas la mujeres a la cárcel porque se practican un aborto bajo las tres condiciones que tiene la corte Constitucional. No creo que las mujeres tengan que salir a trabajar y si no salen a trabajar, entonces no se realizan y están oprimidas por el modelo patriarcal. Creo que las mujeres son libres de escoger lo que quieren. Creo que las mujeres sí tenemos un papel especial con nuestros hijos y que el Estado tiene que trabajar por las madres cabeza de hogar para suplirles las dificultades que implica no tener una pareja y que por lo tanto el cuidado de los hijos está entera y 100% a manos de ellas. Entonces ahí sí, si quisieran ir a trabajar entonces enfrentan unas dificultades muy grandes. Creo que el Estado tiene una deuda pendiente con las madres cabezas de hogar, que son el 40% de los hogares de este país. Tenemos que avanzar en consolidar espacios grandes para que todas las mujeres tengan mejores de derechos en Colombia.

*La entrevista fue resumida para fines de comprensión.