Gorgona y otros espacios naturales amenazados por las bases militares

Gorgona es uno de los tesoros naturales más importantes para Colombia. Se trata de una isla en el pacífico que ha sido reconocida como Patrimonio Biológico de la humanidad por su exuberante biodiversidad y especies únicas en el mundo. Asimismo, allí suceden procesos biológicos fundamentales para los ecosistemas marinos, como la migración de ballenas. De hecho, la isla tiene un enorme potencial para el turismo de naturaleza.  

Sin embargo, su historia tiene muchos matices. Fue una cárcel de alta seguridad por 25 años, hasta que la sociedad civil exigió que cerrará. "En 1984, científicos, ambientalistas y defensores de derechos humanos lideraron una campaña para que se cerrara la prisión. Así se creó el Parque, quedando incluida una valiosa porción de área marina circundante. Ha sido denominada ‘Isla Ciencia’ por la cantidad de información que ha dado a los investigadores para entender los ecosistemas y para el manejo efectivo del área protegida", señala Parques Nacionales Naturales. De hecho, allí se han desarrollado planes reconocidos internacionalmente por su trabajo en la preservación de tortugas y otras especies. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza tiene a este parque, que comprende a las islas de Gorgona y Gorgonilla, en su lista verde de áreas protegidas. "El Parque Nacional Natural de Gorgona es un pequeño paraíso de diversidad que salta a la vista cuando se aborda desde las profundidades del mar", señala la organización.

No obstante, desde hace algunos años, se ha convertido en un punto de mira para los intereses de la geopolítica estadounidense. En 2015, la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales ANLA expidió la resolución 1730 en la cual se permitía la ejecución de un proyecto de una estación de guardacostas. Posteriormente, en 2018 hay una nueva resolución (00772) que solicita el Ministerio de Defensa en la cual se aclaran aspectos de este proyecto. Lo cierto es que se trata de un proyecto en alianza con la armada de Estados Unidos. 

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Muchas voces que se oponen

Hoy, los habitantes de Guapí, Cauca, municipio al cual pertenece la isla, están pidiendo al presidente Gustavo Petro que desapruebe esta licencia ambiental e impida la construcción de esta base. Las razones son que las diferentes instalaciones que se pretenden hacer allí, con depósito para combustibles, una torre con radar y un muelle de 132 metros, tendrían afectaciones negativas sobre los ecosistemas de este patrimonio de la humanidad. Asimismo, las comunidades no desean injerencia estadounidense en sus territorios.

Son diversas las voces que se han sumado para exigir al gobierno que no permita la construcción de la base militar en Gorgona. Líderes sociales y ambientales, periodistas, activistas y organizaciones se han manifestado para oponerse. Asimismo, comunidades locales de la zona de influencia del Parque Gorgona han estado reclamando que nunca se les consultó sobre este proyecto y que se oponen al muelle y a la base militar. De hecho, la vicepresidenta, Francia Márquez, ha apoyado estos reclamos.

No obstante, las voces están divididas. La periodista María F. Fitzgerald, para la Revista Cambio, hizo una investigación al respecto y entrevistó a varios expertos ambientales que fueron consultados para desarrollar el proyecto, como Sandra Valenzuela, presidenta del Grupo de Expertos de la Lista Verde en Colombia, o Rodrigo Botero, director de la Fundación para la Conservación y el Desarrollo Sostenible. Este último indicó para la revista Cambio que: “No estoy de acuerdo con el discurso de quienes, sin saber mucho sobre la obra, están condenándola. La presencia de la Armada podría ser muy buena para detener muchos delitos ocurridos en la zona. Sin embargo, considero que se ha movido también mucha desinformación sobre el proyecto”. 

Otras bases militares estadounidenses en América Latina y el mundo 

Estados Unidos cuenta con cerca de 800 bases militares por el mundo. Las razones que desde el país norteamericano esgrimen para justificar la construcción de estas bases militares están relacionadas con la lucha contra el crimen organizado, el narcotráfico o el terrorismo, así como la facilitación a la ayuda humanitaria, la cooperación y la atención ante desastres naturales. No obstante, un análisis más profundo permite entender que estas suelen estar ubicadas en territorios estratégicos para los intereses de este país, ya sea por sus recursos naturales, su posición estratégica para el comercio o la situación política del lugar. 

Es decir, realmente es una cuestión de geopolítica y los colombianos no son los únicos que han tenido que enfrentarse con el dilema de la construcción de estas bases. De hecho, Estados Unidos ya tiene cerca de 80 bases en América Latina y El Caribe. Una de las bases más recientes que ha causado confrontaciones es la base de Neuquen al sur de Argentina, en la frontera con Brasil y Paraguay. Casualmente, allí se encuentran reservas de gas, petróleo y litio. Diversos medios locales y organizaciones sociales han denunciado esta construcción y exigido que se impida el avance de esta base.

Asimismo, la base militar estadounidense de Rota, Cádiz, ha generado cuestionamientos en España. La agrupación Ecologistas en Acción ha denunciado derrames de combustibles y desperdicios en el mar que dañan el ecosistema marino. Además, hay múltiples investigaciones que señalan que las bases militares dejan tóxicos allí en donde se encuentran. Por ejemplo, una investigación publicada en el medio Scientific America denuncia que en Afganistán quedaron diversos residuos tóxicos y contaminantes por las bases estadounidenses,

Es preciso señalar que las bases militares de Estados Unidos han sido ampliamente cuestionadas por múltiples conceptos, no solamente por la afectación a los ecosistemas. De hecho, en Colombia, ha habido denuncias por violaciones a derechos humanos por parte de soldados, como abusos sexuales cometidos con menores. Así, además de la afectación ambiental, hay otros factores a considerar.