Reseña de “Gato con Botas 2”: El ascenso de una leyenda animada
El último trabajo animado de Dreamworks no ha dejado de recibir elogios de críticos especializados y de la audiencia en general. Te contamos en esta reseña el motivo del éxito detrás de "Gato con Botas 2".
Foto: Universal Pictures
LatinAmerican Post | Yolanda González Madrid
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El cine animado ha estado, en su mayoría, dominado por Disney. Pero en 2001 surgió una propuesta interesante por parte del estudio Dreamworks. Se trata de "Shrek", película que diez años más tarde inspiraría el spin-off de uno de los personajes más carismáticos de ese universo. Ahora, más de una década después, "Gato con Botas 2" llega a la gran pantalla con una historia épica sobre el miedo y el amor.
La vigencia de la saga es incuestionable y eso es una de las cosas que los fanáticos más agradecen. La trama se desarrolla gracias a una buena combinación entre acción, aventura y comedia. En esta ocasión, el queridísimo Gato con Botas se encuentra en una situación límite, ya que tras haber vivido apasionadamente al máximo descubre que ha quemado ocho de sus nueve vidas. A partir de entonces emprende un viaje con la única finalidad de cumplir un último deseo.
Joel Crawford es el director de esta película y junto a él hubo un grandioso equipo de guionistas, quienes supieron plasmar un mar de sensaciones que convierten al "Gato con Botas 2" en una pieza tan humana como conmovedora. Asimismo, también hay que resaltar el reparto de nivel con la voz principal de Antonio Banderas, además de otras destacadas participaciones como Salma Hayek, Harvey Guillen, Florence Pugh, Wagner Moura, entre otros.
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En búsqueda del último deseo
Muy pocas secuelas logran igualar, y hasta superar, a sus antecesoras. El "Gato con Botas 2" es un ejemplo de ello. Poderosa, divertida y con una animación poco convencional para lo que nos ha acostumbrado Hollywood, el film presenta una propuesta riesgosa apta para toda la familia. El miedo a la muerte, a la realidad, y un homenaje a la vida son elementos que hacen que la magia de esta franquicia supere las expectativas.
La idea del director no era la de regalarle a la audiencia una historia llena de risas, sino también ahondar en diferentes propuestas. El terror no se disfraza y va directo con el miedo que genera el antagonista. A su vez, la comedia tiene un estilo muy ambiguo, que termina funcionando a la perfección. Al final ambos detalles se fusionan con una animación muy al estilo de anime japonés.
El tiempo le ha pasado factura al Gato con Botas y eso le hace sentir un profundo temor. A pesar de ser una leyenda, contempla cabizbajo su inevitable destino. Pero las leyendas también mueren, así gocen de muchas vidas, y eso es lo que quiere dar a entender Crawford. El espíritu aventurero del protagonista no se apaga y de allí a que haga caso omiso a las palabras de su doctor, quien le aconseja que cuelgue las botas antes de que pierda su novena y última vida.
Como es de esperarse, el felino decide aprovechar al máximo esa última oportunidad que le queda para retirarse por todo lo alto de su oficio. A partir de entonces se desencadenan una serie de sucesos que lo llevan a buscar una estrella mágica cuyo poder es el de conceder un solo deseo. Y es que en ese viaje lleno de hazañas comprenderá el poderoso significado de la amistad y con ello a valorar los pequeños detalles de la felicidad.
El punto más alto de la película está en las secuencias de acción, que de una u otra manera calca el estilo anime y, además, combina la animación 2D y 3D. Esto va a la par con el mensaje que transmite, pues de forma inteligente toca temas poco explorados en los largometrajes dirigidos al público infantil. Al final, la muerte llega a todos por igual.
Además de un personaje ya conocido como Kitty Patitas Suaves, a la travesía se le añade otro que logra tocar la fibra del Gato: Perro. Parlanchín como ningún otro, este sabueso sigue manteniendo su buen corazón pese a haber sido abandonado, algo que jugará en favor del protagonista al momento de buscar su redención. La irracionalidad de su fe es la oposición perfecta al terror de la muerte.
Por su parte, el Lobo cazarrecompensas es posiblemente el mejor villano de toda la franquicia. Es omnipresente, huele el miedo de los demás y asusta como nadie. Y es que es lógico que genere todo eso cuando se trata de la representación de la mismísima muerte, de la parca, esa que está detrás de la última vida del Gato. Dicho en otras palabras, es ese terror que hace tambalear la valentía del protagonista.
Al final, hasta lo predecible de la película, dejará un buen sabor de boca. Ciertamente, el Gato con Botas tendrá su final feliz y volverá a salvarse, pero lo hará tomando decisiones inusuales y transitando el camino más difícil. Eso le hará comprender que la inmortalidad es solo una ilusión y que la vida hay que vivirla al máximo, afrontándola con la frente en alto, tomando riesgos, y mirando la belleza y crueldad de la realidad tal como es.
¿Digna de un premio Oscar?
El final de "Gato con Botas 2" no solo llena de nostalgia, sino también de expectativas ante una posible próxima entrega de "Shrek", pues los espectadores reconocerán, al final, la referencia a un país que ya hemos conocido: Muy Muy Lejano. ¿Será una puerta que abrirá nuevamente Dreamworks? Y no parece tan descabellada la idea si recordamos que Disney Pixar hará algo similar con varios de sus títulos.
En cuanto al film de Crawford, los críticos han sabido elogiarla. "Ofrece un cuento desenfadado sobre la apreciación de las nueve vidas que ya tenemos", comenta el portal web IndieWire. Mientras que The Hollywood Reporter le da mayor crédito a la puesta en escena de Antonio Banderas: "se mete de lleno en el papel y transmite toda la exagerada suavidad felina del personaje".
Lo cierto del caso es que "Gato con Botas 2" ya estuvo entre las nominadas a Mejor Película Animada en los Globo de Oro y los Critics Choice Awards. Sin embargo, la verdadera gran batalla de nuestro felino con botas es contra el “Pinocho” de Guillermo del Toro, que también se perfila a quedarse con el galardón en la categoría en los próximos premios Óscar.