El dolor lumbar es la principal causa de discapacidad en el mundo
Un estudio de la Revista Británica “The Lancet” revela que más de 600 millones de personas sufrieron de dolores lumbares en el 2020. Esto es lo que debes saber sobre esta dolencia y cómo prevenirla.
Foto: Freepik
LatinAmerican Post | Erika Benitez
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El lumbago o lumbalgia es uno de los dolores más comunes y frecuentes en el campo de la salud. Según un estudio publicado por la Revista “The Lancet Rheumatology”, sobre la prevalencia de esta patología, más de 600 millones de personas la sufrieron durante el 2020. Y se estima que para el año 2050 serán alrededor de 800 millones de personas las que sufrirán de dolor lumbar, un aumento del 36.4% en el número total de casos.
Los autores de la publicación definen el lumbago como el dolor o molestia que se siente en la parte baja de la espalda. Dependiendo de su intensidad y causas, puede persistir durante un tiempo prolongado de semanas. Por lo general, un alto porcentaje de estos dolores no tienen una explicación concreta. Sin embargo, existen varias prácticas como el tabaquismo y las malas posturas que son factores de riesgo clave de esta dolencia.
El estudio se realizó con base en los datos recolectados de una investigación epidemiológica observacional a nivel mundial sobre diferentes patologías entre 1990 y 2020, para estimar la prevalencia de la lumbalgia en más de 200 países. El estudio denominado “Global Burden of Disease”, reveló que el lumbago es la principal causa de discapacidad en todo el mundo y es más frecuente en mujeres que en hombres en todos los grupos de edad. Además, ocho de cada diez personas en el mundo lo sufrirán al menos una vez en su vida.
Esto se debe fundamentalmente al crecimiento poblacional, excepto en aquellas regiones en las cuales, el envejecimiento de la población parece ser la razón principal del aumento del número de casos para el año 2050. La prevalencia del dolor lumbar aumenta con la edad, aproximadamente a los 85 años.
¿Cuáles son los “malos hábitos” que le hacen daño a nuestra espalda?
Quien nunca sintiera dolor en la parte baja de la espalda, se puede considerar un ser privilegiado. Aunque no se habla mucho del tema, es más común de lo que parece. El dolor lumbar o lumbago se presenta primordialmente por malos hábitos posturales, es decir, malas posturas en la vida diaria o al dormir. A esto se le suma un estilo de vida sedentario, pasar muchas horas de trabajo frente al computador o hacer ejercicios con mala técnica, así como el tabaquismo y la obesidad.
Otros factores que inciden en la aparición del lumbago son las exposiciones a levantamientos de objetos muy pesados; agacharse de forma inadecuada; mantener posturas incómodas en el trabajo o actividades diarias; estar expuesto a vibraciones fuertes y realizar tareas que se consideran físicamente exigentes. Por otra parte, “el dolor lumbar obliga a más personas a abandonar el lugar de trabajo que cualquier otra condición de salud crónica” señala The Lancet Rheumatology.
Tales datos generaron preocupación entre los especialistas, quienes compartieron algunos tips y hábitos que puedes adquirir para entender y prevenir esta dolencia.
¿Cómo prevenir los dolores lumbares?
Una de las principales recomendaciones que dan los expertos para evitar los dolores de espalda es mantener una vida activa, con actividad física regular. Una musculatura tonificada es primordial para que ninguna zona de tu espalda (cervical, dorsal o lumbar) sufra. Así lo confirma un estudio publicado el año pasado por la Revista de fisioterapia ortopédica y deportiva que buscaba determinar qué tipo de ejercicio es mejor para reducir el dolor y la discapacidad en adultos con dolor lumbar crónico. Según el estudio, “Las estrategias de autocontrol para el dolor lumbar incluyen minimizar el reposo en cama, permanecer activo y regresar al trabajo y a la actividad habitual lo antes posible”.
El ejercicio es el mejor aliado para que en el corto plazo se logre reducir el dolor y la discapacidad. Sin embargo, es fundamental que el ejercicio esté guiado por expertos y fisioterapeutas que enseñen la técnica correcta para fortalecer los músculos de la espalda, sin causar lesiones o más dolor.
De acuerdo con los resultados de la investigación, las intervenciones más efectivas para disminuir el dolor lumbar fueron las actividades de pilates, mente-cuerpo y ejercicios básicos. Para los casos en los que se presenta una discapacidad, las mejores opciones son: pilates, ejercicios básicos y de fuerza. El entrenamiento de pilates tiene una gran ventaja y es que trabaja todo el cuerpo de manera holística, por lo que ninguna parte queda descompensada. Se recomienda también realizar estiramientos al inicio y al finalizar la jornada, para evitar dolores y molestias que pueden ocasionar las malas posturas, por ejemplo en los lugares de trabajo.
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Dentro de los tratamientos que suelen usarse para tratar los dolores de espalda se encuentran las terapias físicas que aplican tratamientos duales, es decir, alternando calor y frío. Asimismo, se suele emplear la terapia manual y en algunos casos el suministro de analgésicos. Sin embargo, es importante tener presente que estas recomendaciones no reemplazan la revisión de un especialista, si el dolor es severo y está afectando tus actividades diarias, debes acudir al médico para que determine el mejor tratamiento a seguir.
Teniendo en cuenta que el dolor lumbar es la principal causa de discapacidad en todo el mundo, sobre todo para las personas de mayor edad, se suman otras acciones más integrales que vale la pena destacar. La década 2021–2030 fue designada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), como la “Década de las Naciones Unidas para el Envejecimiento Saludable”. En esta propuesta se brinda una plataforma sólida para mejorar y dar mayor alcance a iniciativas de salud locales, regionales y globales para desarrollar y mantener la capacidad funcional, y el bienestar de las personas de edad avanzada. Todo esto, a través de campañas de concientización y recomendaciones constantes para que la población se mantenga activa y saludable. Para llegar a la vejez con salud y minimizar las dolencias, hay que mantener hábitos saludables desde la juventud.