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Colombia: Omar Camacho, el controvertido nuevo Ministro de Minas

Las opiniones de Omar Camacho sobre Hugo Chávez y los hermanos Castro parecen no compaginar con el cargo que se le confirió, ¿podrá cumplir con el reto de la transición energética de Gustavo Petro?.

Omar Camacho

Foto: Omar Camacho

LatinAmerican Post | Santiago Gómez Hernández

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No termina por consolidarse el gabinete del presidente Gustavo Petro, con la salida de Irene Vélez son once los ministros que renunciaron a su gobierno. Ahora, al Ministerio de Minas y Energía llega el presidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos, Omar Camacho Morales, quien tiene la responsabilidad de llevar adelante la transición energética, pero no sin una dosis de controversia por sus posiciones políticas e ideológicas.

¿Quién es Omar Camacho?

Es ingeniero eléctrico, físico y doctor en ingeniería por la Universidad Distrital Francisco José de Caldas, además de tener una maestría en administración de energía y fuentes renovables por el Instituto Tecnológico de Estudios Superiores Monterrey. Como profesionista fue asesor legislativo y profesor en su alma máter. En cuanto a cargos públicos, su experiencia se limita a poco más de un mes como presidente de la Agencia Nacional de Hidrocarburos y su nombramiento como Ministro de Minas y Energía en sustitución de Irene Vélez.

Al igual que su antecesora, llega con la incertidumbre que causa su poca experiencia en la carrera pública, lo que pone en duda su expertise sobre el ministerio que ocupa. Hay dos temas trascendentales en esta cartera en el gabinete de Gustavo Petro: por un lado, llevar a cabo de forma exitosa la transición energética, un objetivo principal en la actual administración. Por otra parte, la gestión de contratos de exploración y explotación en temas de minería y petróleo, principalmente, que tienen a los empresarios del sector en constante tensión que se refleja en el valor de sus acciones. El caso más próximo es el de Ecopetrol que está a la espera de poder continuar con la exploración petrolera.

Por último, Camacho debe enfrentar otro problema: él mismo. Sus filiaciones, acciones y declaraciones sobre temas de izquierda "radical" como el chavismo, castrismo, socialismo, guerrilla y otros, lo han puesto en una situación complicada. Esto se ha visto reforzado especialmente frente al sector empresarial que desconfía de su imparcialidad a la hora de tomar decisiones para gestionar la explotación de recursos en el país. Han vuelto a la opinión pública sus viejos tuits de apoyo a Hugo Chávez y Fidel Castro, así como su candidatura por Comunes, el partido que se convirtió en brazo político de las FARC tras el proceso de paz y considerado radical de izquierda.

La transición energética de Petro

El expresidente Iván Duque se comprometió en la COP26, realizada en 2021 en Edimburgo, a reducir en 51% la emisión de gases de efecto invernadero para 2030. La protección a la biodiversidad de Colombia y la alineación del país a los esfuerzos internacionales para combatir el cambio climático impulsaron esta agenda, el gobierno de Petro da continuidad con lo que se denomina transición energética. Durante el gobierno de Duque fue señalado por hacer marchar su agenda sin tomar en cuenta a pueblos originarios afectados por minería y los estragos de la guerrilla, así como a organizaciones ambientalistas y de la sociedad civil. La tarea de Omar Camacho es impulsar la transición a energías limpias para producir 8 gigawatts hacia el final del gobierno, actualmente Colombia produce apenas 0.8 gigawatts, es decir, apenas el 10% de esta primera meta.

A diferencia del gobierno de Duque, Petro mostró un interés conciliador con los habitantes de las zonas con potencial para producir energía, principalmente La Guajira que, según Petro, tiene un potencial para producir hasta 20 gigawatts de energía limpia. El otro pilar de la transición en el gobierno petrista es un entorno económico sustentable respecto al nuevo modelo energético de Colombia, un modelo que está aún por probarse vinculando a las empresas, las cadenas de valor, además de los habitantes y pequeños productores que pueden verse beneficiados. En este sentido, el perfil social de Camacho coincide con la visión petrista, por su conocimiento de la población en estas condiciones, sin embargo, su inexperiencia juega en su contra, se enfrentará a un gran escrutinio de cada una de sus acciones, especialmente por la clase empresarial que conocen sus opiniones sobre el mercado, las empresas y su relación con Cuba y Venezuela.

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Ecopetrol

Otro de los temas relevantes en la agenda de Camacho es el caso de Ecopetrol, la empresa está en una encrucijada, las energías renovables ganan terreno en el país y con ello la empresa lo pierde, Si Colombia está orientada a reducir su consumo energético y a ampliar el uso de energías renovables irá reduciendo inevitablemente el tamaño y capacidad de Ecopetrol. El petróleo y el carbón representan más de la mitad de las exportaciones del país, pero la transición parece condenar al sector. Ecopetrol perdió un cuarto de su valor en el mercado bursátil y presiona para que se otorguen nuevos contratos de exploración y explotación que le permitan tener una perspectiva de crecimiento a futuro pese a las limitaciones de la transición. La empresa afirma que cuenta con reservas equivalentes a ocho años de producción, por lo que es urgente la exploración de nuevos yacimientos. Con Camacho y Petro en el poder difícilmente se entregarán nuevos contratos para minería y extracción de petróleo, es eso lo que más preocupa a los inversionistas, la posición radical del nuevo ministro que podría ser un obstáculo para negociar.

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