Abordando la contaminación del aire en América Latina: las 10 ciudades que lideran la lucha
La contaminación del aire presenta un desafío crítico en las ciudades latinoamericanas, con millones de residentes lidiando con sus efectos perjudiciales para la salud y el medio ambiente. Desde la Ciudad de México hasta Guadalajara, estos centros urbanos están a la vanguardia de los esfuerzos para combatir la contaminación y salvaguardar el bienestar público.
Foto: Pexels
LatinAmerican Post
Escucha este artículo
El problema de la contaminación del aire es perjudicial para la salud humana. Según datos de la OMS, cada año alrededor de 10 millones de personas mueren por los efectos a corto y medio plazo de la inhalación de toxinas debidas a la contaminación del aire. Para medir la calidad del aire se utiliza el IQA (Air Quality Index), que identifica diariamente el nivel de pureza o contaminación de una zona geográfica concreta. Los contaminantes del aire se identifican en dos tipos: gases, entre los que se encuentran el monóxido de carbono, el dióxido de nitrógeno y el dióxido de azufre, entre otros.
En segundo lugar se encuentran las partículas en suspensión (PM2.5 y PM10), las cuales son consideradas las más peligrosas por la facilidad que tienen para ingresar a las vías respiratorias, provocando múltiples problemas respiratorios e incluso paro cardíaco. El índice se divide en los siguientes indicadores: Bueno (entre 0 y 50 puntos), Moderado (entre 51 y 100), Nocivo para colectivos sensibles (entre 101 y 150), Nocivo (entre 151 y 200), Muy nocivo (entre 201 y 300) y Peligroso (con más de 301 puntos). Si bien América Latina no es una de las regiones con mayores índices de mala calidad del aire, varias ciudades alcanzan niveles elevados.
Estas son las 10 ciudades latinoamericanas que más necesitan controlar la contaminación del aire:
Ciudad de México, México
La Ciudad de México figura constantemente entre las ciudades más contaminadas de América Latina, con concentraciones de PM2,5 que superan con creces las directrices de la OMS. A pesar de los esfuerzos continuos para mejorar la calidad del aire, la ciudad enfrenta desafíos importantes que resultan en miles de muertes prematuras cada año.
Lima, Perú
La calidad del aire de Lima ha experimentado fluctuaciones en los últimos años, y un aumento en los niveles de contaminación plantea nuevas preocupaciones para la salud pública. A pesar de los esfuerzos para mitigar la contaminación, las concentraciones de PM2,5 siguen siendo elevadas, lo que subraya la necesidad de adoptar medidas sostenidas para abordar las causas fundamentales de la contaminación del aire.
Bogota Colombia
Bogotá declaró recientemente una alerta ambiental debido al aumento de los niveles de contaminación del aire, particularmente en comunidades marginadas. Dado que las concentraciones de PM2,5 superan las directrices de la OMS, la ciudad se enfrenta a importantes riesgos para la salud, lo que pone de relieve la urgente necesidad de medidas integrales de control de la contaminación.
Santiago de Chile, Chile
A pesar de su belleza escénica, Santiago de Chile enfrenta persistentes desafíos de contaminación del aire exacerbados por las actividades industriales y las emisiones vehiculares. Si bien el Índice Mundial de Calidad del Aire las clasifica como “Buenas”, las concentraciones de PM2,5 siguen siendo motivo de preocupación y requieren esfuerzos sostenidos para mejorar la calidad del aire.
São Paulo, Brasil
Como la metrópoli más grande de Brasil, São Paulo se enfrenta a niveles de contaminación del aire que afectan desproporcionadamente a las comunidades marginadas. A pesar de la clasificación como “Buena” por el Índice Mundial de Calidad del Aire, las concentraciones de PM2,5 plantean importantes riesgos para la salud, lo que subraya la necesidad de políticas de transporte y planificación urbana sostenibles.
La Paz, Bolivia
La Paz enfrenta graves desafíos de contaminación del aire, exacerbados por su gran altitud y sus actividades industriales. Dado que las concentraciones de PM2,5 exceden las pautas de la OMS, la ciudad enfrenta importantes riesgos para la salud, lo que requiere medidas urgentes para abordar las fuentes de contaminación y proteger el bienestar público.
Quito, Ecuador
A pesar de su belleza natural, Quito se enfrenta a niveles de contaminación del aire que superan las directrices de la OMS, lo que plantea graves riesgos para la salud de los residentes. Como una de las capitales más altas del mundo, Quito enfrenta desafíos únicos para mitigar la contaminación y salvaguardar la sostenibilidad ambiental.
Buenos Aires, Argentina
Buenos Aires lucha contra la contaminación del aire derivada de las emisiones de vehículos y las actividades industriales. Si bien se están realizando esfuerzos para mejorar la calidad del aire, las concentraciones de PM2,5 siguen siendo motivo de preocupación, lo que pone de relieve la necesidad de una planificación urbana sostenible y medidas de control de la contaminación.
Caracas, Venezuela
Caracas enfrenta persistentes desafíos de contaminación del aire exacerbados por las emisiones vehiculares y la urbanización. A pesar de la clasificación como “moderada” por el Índice Mundial de Calidad del Aire, los niveles de PM2,5 plantean importantes riesgos para la salud, lo que requiere estrategias integrales de control de la contaminación.
Lee también: Biodivercities: el proyecto latino que combina cemento y naturaleza
Guadalajara, México
Guadalajara enfrenta niveles de contaminación del aire que exceden las pautas de la OMS, particularmente durante períodos de mucho tráfico y actividad industrial. A pesar de los esfuerzos en curso para mejorar la calidad del aire, las concentraciones de PM2,5 siguen siendo elevadas, lo que subraya la necesidad de medidas integrales de control de la contaminación.
La contaminación del aire sigue siendo una preocupación apremiante en las ciudades latinoamericanas, donde millones de personas enfrentan importantes riesgos para la salud. Se necesitan medidas urgentes para abordar las causas fundamentales de la contaminación, implementar soluciones sostenibles y garantizar un futuro más saludable para todos.