Identidad cultural, un juego de rol
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La globalización y la identidad cultural en un proceso amplio, diverso y convergente que cada día se acerca más a un juego de rol.
Es evidente que la globalización ha modificado la manera en que aprendemos, nos conectamos, nos comunicamos y hacemos de nuestros procesos culturales un “juego” constante que le apuesta a nuestra identidad; a modificar lo que somos.
En el hacer, en la cotidianidad, estamos inmersos en hábitos culturales que dejan en evidencia lo que somos, lo que construimos como seres culturales en permanente contacto con diversas circunstancias donde la misma manera de relacionarnos ha sido permeada por las nuevas tendencias y las nuevas maneras de generar identidad.
La proximidad, la velocidad y dinamismo con el que se viene exponiendo la cultura, ha permitido que generemos con facilidad nuevos imaginarios, nuevos escenarios con los que tengamos más afinidad o nos sintamos más identificados. Ahora las distancias no importan, hoy podemos tener una relación multicultural, intercultural y enriquecer, en la medida en que lo deseemos, nuestros conocimientos, experiencias e imaginarios.
La creatividad hoy se nutre sin limitante alguno, todos los seres humanos tenemos alternativas relevantes para adoptar lo que queremos, lo que nos identifique o sencillamente nos guste de otras culturas.
Es entonces la globalización un proceso amplio, complejo y diverso mediante el cual hemos logrado aprender nuevas maneras de comunicarnos, acercarnos y sobre todo desarrollar desde lo que se desconoce, nuevas maneras de expresar lo que sentimos, lo que nos une, lo que nos identifica.
LatinAmerican Post |Caren Contreras
Copy edited by Susana Cicchetto
