Cuando el presidente de un club se harta de sus jugadores
Por malos resultados, los dirigentes del Olympiacos y del Sporting de Lisboa tomaron decisiones drásticas con sus jugadores
Existen situaciones deportivas adversas que generan que los presidentes de los clubes pierdan los estribos y empiecen a señalar a sus propios jugadores. Este es el caso de Evangelos Marinakis, presidente del Olympiacos F.C. de Grecia, y de Bruno de Carvalho, presidente del Sporting de Lisboa de Portugal. A raíz del bajo nivel demostrado por sus jugadores y por la falta de resultados positivos, ambos directivos decidieron acusar a sus jugadores de la mala situación, tomando decisiones radicales con el futuro de estos.
Leja em português: Quando o presidente de um clube está cansado de seus jogadores
Olympiacos, de vacaciones
El pasado 31 de marzo se jugó una jornada más de la liga griega de fútbol, y el Olympiacos no pudo pasar del empate a un gol con el Levadiakos. El equipo rojo de la ciudad de El Pireo marcha en la tercera posición, pero con dicho empate parece haber sepultado sus opciones al título. Este lapidario resultado generó el malestar de las directivas, en especial el del presidente del club, Evangelos Marinakis.
Según la prensa griega, Marinakis se comunicó inmediatamente con los jugadores del equipo y los señaló directamente por los malos resultados, multándolos y enviándolos a vacaciones anticipadas. “Voy a reconstruir Olympiacos desde cero y se convertirá en el equipo con el que soñamos yo y el resto de los seguidores, que ya hemos aguantado bastante. Se van desde hoy de vacaciones. Y la multa es por este empate y por el otro 1-1 ante el Panathinaikos”, habría afirmado Marinakis.
La decisión estaría respaldada por la estrategia de utilizar a los jugadores de las categorías inferiores. “Sólo piensan en sus bonitas casas y en sus cochazos. No les preocupa nada el equipo. Los jugadores del filial aman al Olympiakos y a nuestra afición mucho más que ustedes. Yo pago millones para que lo tengan todo. He despedido a tres entrenadores por ustedes y parece que al final son ustedes los culpables”, habría añadido el ofuscado presidente.
El Olympiacos ha ganado las nueve últimas ligas del fútbol griego, sin embargo, esta crisis institucional parece haber dejado atrás todo rastro de éxito. El club jugará el próximo 16 de abril un nuevo partido de la liga griega, y allí se comprobará si Marinakis cumplirá con su radical decisión.
Sporting de Lisboa, guerra en redes sociales y motín
El Sporting Clube de Portugal, más conocido como el Sporting de Lisboa, está atravesando por un momento de la temporada en el que parece estar dejando escapar la liga de Portugal y la UEFA Europa League. El equipo perdió el pasado 31 de marzo contra el Braga por la liga y el cinco de abril perdió contra el Atlético Madrid por la competición europea, lo que sacó de casillas a Bruno de Carvalho, presidente del club.
Facebook fue el lugar elegido por Carvalho para mostrar su descontento y publicó frases como: “En lugar de ser 22 como deseaba, a menudo hemos jugado con nueve, y eso, se paga caro”, y “Ver graves errores de parte de internacionales y jugadores experimentados, no hizo más que aumentar nuestro sufrimiento”. Además, Carvalho cuestionó a jugadores como Coates, Mathieu, Gelson, Fábio, Bas Dost y Montero.
Varios jugadores reaccionaron a estos graves señalamientos del presidente del club y se manifestaron en sus cuentas de Facebook e Instagram. "Somos el Sporting de Portugal… Sudamos, peleamos y honramos siempre la camiseta que llevamos. ¡No creemos en los jugadores perfectos porque siempre queremos evolucionar!”, publicaron varios jugadores en sus respectivas cuentas.
Carvalho publicó en su cuenta de Facebook su descontento con la actitud de los jugadores. “Niños mimados que no respetan nada ni a nadie, en el Sporting de Portugal no vivimos en una república bananera", afirmó Carvalho. El directivo también sostuvo que los jugadores que habían realizado el motín estaban inmediatamente suspendidos y que se enfrentarían a sanciones disciplinarias del club.
El 7 de abril se reunieron los jugadores, el cuerpo técnico y el presidente para resolver la terrible situación. Se definió que los jugadores no serán suspendidos pero sí se les abrirán procesos disciplinarios. “Llego a la conclusión de que la suspensión impuesta a los atletas no tendría efecto de castigo ya que sólo serviría como excusa para que no cumplan sus funciones y las obligaciones por las que se les pagan”, afirmó Carvalho en su cuenta de Facebook una vez culminada la reunión.
Presidir un club no es fácil, pero tampoco lo es dirigirlo o representarlo en el campo de juego. Muchos de los problemas de los clubes deben solucionarse en privado y con la mayor disposición posible. No obstante, esto es una tarea improbable debido a la pasión que emana el deporte. Estos son apenas dos casos en los que los dirigentes de un club se salen de sus cabales a raíz de la tensión que genera el fútbol y los malos resultados.
LatinAmerican Post | Javier Aldana
Copy edited by Marcela Peñaloza