La carrera del colombiano como entrenador inició en 2006 y luego de muchos logros hoy está en la palestra gracias al triunfo del México sobre Alemania

Nativo de Risaralda, Colombia, y con 57 años, el entrenador colombiano Juan Carlos Osorio hoy demuestra porqué expertos y especialistas del fútbol lo han llamado el nuevo Marcelo Bielsa o el Pep Guardiola de Latinoamérica. Aunque sus logros no son pocos, recientemente su nombre ‘retumba’ en el mundo.

México es un país que le dio la oportunidad de dirigir su primera selección nacional, aunque lo ha criticado duramente por su estilo de dirigir con rotaciones constantes de jugadores. Sin embargo, el primer triunfo del ‘Tri’ ante Alemania, el campeón de la Copa Mundial de 2014, es una gran alegría en el pueblo mexicano, que al menos por unos días los hace olvidar su posición contra Osorio, asegura el portal Infobae.

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No es un aparecido

Sin embargo, Osorio lleva años tocando puertas. Fanático de Bielsa y Guardiola, el colombiano es un estudioso diligente y un amante de los entrenamientos de baloncesto, deporte del que toma movimientos para sus entrenamientos.

"Es un obsesivo de los entrenamientos. Sus grandes maestros han tenido vínculos con otros deportes colectivos en espacios reducidos: vóleibol, baloncesto, balonmano. Es un profesor porque le gusta enseñar, no le dice al jugador 'hay que hacer esto', él le dice lo que hay que hacer y por qué. Tiene una gran capacidad para convencer", reveló el periodista Jorge Andrés Bermúdez, con quien Osorio escribió su libro “La Libreta de Osorio” en 2015.

La mencionada publicación explica la filosofía de juego del risaraldense, que no es más que la repetición de ejercicios y situaciones para hacer que el futbolista reaccione a los estímulos del juego de manera subconsciente, según explica Infobae.  "A él le apasiona estar día a día, ver que un jugador de pronto esté desarrollando mal un movimiento en el campo y generar una ejercitación para ayudarle a mejorar", comentó Bermúdez.

Esas ideas se han visto reflejadas en los equipos que ha dirigido y con los que ganado títulos. Su famosa libreta no es un mito, es una realidad. Por cada partido y jugada, Osorio utiliza un lapicero azul para marcar aciertos y otro rojo para anotar los errores en el mencionado cuaderno, aún durante el propio desarrollo del encuentro. Esto es indicio de su trabajo constante.

Un camino ligado al éxito

Su primer equipo fue Millonarios en 2006, uno de los conjuntos más tradicionales del fútbol ‘cafetero’. Aunque no obtuvo títulos, el colombiano ya comenzaba a dar muestras de su manera de jugar de forma ofensiva. En 2008 se coronó monarca de la Conferencia Este con los New York Red Bulls de la Major League Soccer, luego regresó a su país para dirigir al Once Caldas, con quien ganó el Torneo Finalización 2010.

Luego alcanzó seis títulos entre 2012 y 2014 como técnico del Atlético Nacional, que incluyó la Superliga y la Copa Colombia en 2012, el Torneo Apertura, la Copa Colombia y el Torneo Finalización en 2013 y el Torneo Apertura en 2014.  

Posteriormente llevó su sello al Sao Paulo de Brasil en 2015, pero la experiencia apenas duró cinco meses porque apareció en el camino una oferta de la Federación Mexicana de Fútbol (Femexfut).

Pese a múltiples críticas por las rotaciones de jugadores, con el ‘Tri’ Osorio clasificó invicto en las eliminatorias de Concacaf. No obstante, el colombiano tuvo la ‘desgracia’ de recibir dos goleadas: una ante Chile en la Copa América Centenario 2016 (7-0) y otra ante Alemania en la Copa Confederaciones 2017 (4-1), que lo pusieron aún más en el ‘ojo del huracán’.

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Fiel a su idea

De acuerdo con Infobae, Osorio explicó el porqué de su política de no tener titulares fijos. Para el colombiano, la estrategia genera confusiones en los oponentes y eleva las posibilidades tácticas de sus dirigidos. "Las estructuras del conjunto varían en función de las necesidades y las circunstancias de turno, del rival", señaló.

El constante entrenamiento y la selección del grupo son los dos factores claves con los que se mueve Osorio. "Así como en la vida no podemos elegir a nuestros hijos, en el fútbol muchas veces tampoco podemos elegir a los jugadores", detalló el risaraldense en su libro.

El plan de seis meses

Un artículo del diario El Espectador detalla los minutos posteriores al partido México-Alemania en el que Osorio de alguna manera aleccionó a sus detractores: el estratega colombiano entró a la cancha y festejó con cada uno de sus jugadores. Esto lo hizo primero con el legendario Rafa Márquez, después con Hugo Ayala, y así con cada uno hasta llegar al portero Guillermo Ochoa.

“Pudimos efectuar el plan que diseñamos hace seis meses. Tuvimos muchas bajas en este tiempo, pero se logró el objetivo. Me alegro por los jugadores y por la hinchada. Sin embargo, la Copa del Mundo apenas comienza y hay que seguir trabajando. Esto es para los que creyeron. Y para los que no, quiero decirles que seguiremos dando lo mejor para convencerlos”, apuntó el colombiano en rueda de prensa posterior al juego.

Aunque parece un hecho que Osorio dejará el combinado nacional azteca apenas culmine esta Copa del Mundo, este histórico triunfo puede marcar un antes y un después. El objetivo ahora será mantener la solidez mostrada ante Alemania, avanzar en el grupo F y tratar de alcanzar los ansiados cuartos de final que se le resisten desde 1986. No sabemos qué pasará, pero serán la afición y la prensa especializada quienes decidan si el 17 de junio de 2018 fue el momento que marcó una mejor relación con el nuevo Marcelo Bielsa o el Pep Guardiola latinoamericano, como bien divulgó El Espectador.

Latin American Post | Onofre Zambrano

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