Un nuevo capítulo en la guerra de Estados Unidos contra Huawei
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La guerra comercial entre China y Estados Unidos ha sido dura para el gigante tecnológico, que de nuevo está en la mira del gobierno estadounidense
Parece que con cada día que pasa los Estados Unidos toman nuevas acciones en contra de Huawei, la multimillonaria empresa tecnológica China que comercializa sus productos en más de 170 países y que se convirtió el año pasado en el segundo fabricante de teléfonos celulares del mundo, solo detrás de Samsung.
Read in english: A new chapter in the US war against Huawei
Ya se cumple más de un mes desde el arresto de la jefa de operaciones financieras de Huawei, e hija del presidente de la empresa, Meng Wanzhou, en Canadá bajo cargos de violar las sanciones económicas de los Estados Unidos a China. Pero este episodio fue solo el primero de muchos que ahora deben atormentar al gigante tecnológico de Shenzen, China.
Tan solo la semana pasada, el Departamento de Comercio de los Estados Unidos denegó la renovación de la licencia de exportaciones de la compañía Futurewei Technologies Inc., una empresa subsidiaria de Huawei en Silicon Valley dedicada a la investigación y el desarrollo. Esto causo que Huawei no pudiera trasladar sus propios productos desde los Estados Unidos hacia su casa matríz.
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Antes, durante esa misma semana, la policía polaca arrestó a un empleado de Huawei junto con un exoficial de seguridad nacional de este país bajo cargos de espionaje. Aunque las autoridades polacas aseguraron que el arresto se da a causa de las acciones individuales del ciudadano chino, y no con su empresa empleadora, la desconfianza frente a Huawei entre los poderes occidentales naturalmente se disparó a causa del acontecimiento.
Esta saga de acontecimientos obligó al presidente de Huawei, Ren Zhengfei, a romper el silencio y presentarse frente a los medios a hacer declaraciones al respecto. Ren es conocido por ser esquivo y rara vez mostrarse en público, lo que hizo que su aparición frente a un selecto panel de periodistas internacionales fuera especial, desde 2015 no hablaba con medios de otros países.
Durante su intervención aseguró, de acuerdo con el Straits Times, que su compañía no participa en esquemas de espionaje del gobierno Chino. “Amo mi país y apoyó al Partido Comunista. Pero jamás haría algo para hacerle daño al mundo (…) No veo una relación estrecha entre mis creencias políticas personales y los negocios de Huawei.”
El frente solar de Huawei, nueva fuente de sospechas
Apenas ayer, varios miembros del congreso estadounidense, tanto republicanos como demócratas, se expresaron en contra de Huawei, específicamente en contra de su tecnología solar. Según ellos, los productos de energía solar fabricados por Huawei suponen un riesgo para para la infraestructura energética de los Estados Unidos, pues podrían ser hackeadas para ralentizarlas o detenerlas.
El representante demócrata por California Jerry McNerney se expresó al respecto. “Si continuamos usando equipos fabricados por proveedores indignos de confianza nos estamos saboteando a nosotros mismos. Nuestras agencias de inteligencia han advertido a las empresas estadounidenses que en Huawei no se debe confiar, y tenemos que tomarnos su advertencia en serio”, se lee en el Financial Times.
Avanza una investigación criminal
Una investigación criminal, reportada por primera vez por el Wall Street Journal, aparentemente está en curso en contra de Huawei por sospechas de espionaje corporativo y por el “robo de secretos del negocio”.
Las acusaciones surgen, aparentemente, de una demanda por parte de la empresa de telecomunicaciones T-Mobile, interpuesta en el 2014, en dónde aseguraban que Huawei robó tecnología clave para el desarrollo de un robot desarrollado por T-Mobile para probar teléfonos móviles.
LatinAmerican Post | Pedro Bernal
Copy edited by Luisa Fernanda Báez Toro