¿Cómo cuidar de la piel luego de hacerse tatuajes?

Un tatuaje es una forma de modificación corporal en la que a partir de agujas u otros instrumentos se aplican tintas y pigmentos sobre la dermis (segunda capa de la piel, luego de la epidermis). Diversas culturas en el mundo han realizado tatuajes en su gente durante miles de años, muchos de estos funcionaban como símbolo de poder, protección o fe.

Aunque está históricamente comprobado que es un arte milenario, los tatuajes no siempre han sido bien vistos por la sociedad. Hacia finales del siglo 18, en occidente, los tatuajes solo fueron populares entre los marineros y las personas que tenían condenas en la cárcel. En el continente americano no es hasta 1870 que se crea el primer estudio de tatuajes en Nueva York. Posteriormente, el auge del tatuaje toma una pausa y se retoma en 1960 con los “hippies”. Luego de 1960, el tatuaje comienza a adquirir otro significado hasta la popularidad que tiene actualmente. Según un estudio de la firma alemana Dalia Research, cerca del 38% de la población mundial tiene un tatuaje.

Ahora, si tienes un tatuaje o piensa hacerse uno, es indispensable saber qué cuidados debe tener. Si bien un tatuaje es algo que se puede realizar en cuestión de minutos u horas, has modificado tu piel con pigmentos y has generado heridas cutáneas que deben ser cuidadas y atendidas de la mejor manera posible. Es por ello que a continuación te informamos de algunos cuidados básicos antes y después de un tatuaje.

Antes: 

1. Un tatuaje económico puede salir más caro de lo que parece, es mejor gastar un poco más, pero con la seguridad de que se va a hacer en un lugar certificado por las entidades sanitarias competentes en tu país.

2. Revisa qué estilo de tatuaje quieres y qué profesional lo puede hacer. Como en todo arte, hay tatuadores especializados en ciertos estilos.

3. Ten en cuenta que en el estudio utilicen tintas certificadas y avaladas por las entidades competentes.

4. Piensa en los colores que deseas emplear para el tatuaje, según la Academia Española de Dermatología y Venereología, la tinta roja es la que más reacciones anómalas puede provocar en su piel.

5. Evita las drogas, el alcohol o la cafeína 24 horas antes de tatuarse.

Después: 

Este es el punto más importante, no solo para evitar problemas dermatológicos, sino para mantener la calidad del tatuaje. Para Neftalí Ordóñez, tatuador con más de 17 años de experiencia y creador del estudio taller Embera Tattoo, lo más importante es seguir las instrucciones del profesional: “Principalmente, siempre se recomienda que se debe lavar muy bien la zona con jabón neutro, secarla cuidadosamente con papel dando pequeños golpes (no se debe frotar). Es necesario aplicar una fina capa de crema hidratante 2 o 3 veces al día”.

Te recomendamos leer: Así es como la música puede mejorar tu calidad de vida, según los expertos

¿Los cuidados pueden cambiar dependiendo del lugar del tatuaje?

Ordóñez afirma que los cuidados pueden cambiar sustancialmente si los tatuajes están en partes con pliegues (como los codos o rodillas), si están en zonas de “difícil acceso” (como detrás de las orejas), o si son en partes del cuerpo que continuamente pueden sudar (como los pies). Para estas zonas es indispensable ser más rigurosos con la limpieza y el cuidado.

¿Los cuidados pueden llegar a variar dependiendo del estilo o los colores que se apliquen?

“Actualmente, cuando se hace un trabajo de muchas horas y ha necesitado de mucha tinta como los 'blackout' algunos tatuadores están recomendando una técnica de curación en seco, es decir, con menos crema de lo normal. Los resultados de esta técnica son óptimos, pero siempre va a depender de las recomendaciones del profesional, ya que es quien sabe cuánta tinta se utilizó y qué tipo de 'daño' se pudo hacer en la piel”, afirmó Ordóñez.

Otras recomendaciones que debe tener en cuenta:

1. Normalmente, luego de finalizar, el profesional limpiará la zona en la que se trabajó, aplicará una crema hidratante y cubrirá el tatuaje con un plástico para protegerlo. Este plástico comúnmente debe mantenerse durante las primeras 24 horas (de ser posible).

2. Evita tocar el tatuaje con las manos sucias.

3. Evita usar ropa ceñida al cuerpo que pueda generar fricción con la piel. Esto puede llegar a causar infecciones o retrasar el proceso de curación.

4. No consumas alcohol el primer y segundo día luego de tatuarte. Tanto el alcohol como cierto tipo de comidas irritantes puede generar inflamaciones o reacciones cutáneas no deseadas.

5. Hidrátete constantemente. Según la American Academy Dermatology Asociation (AAD), mantener la piel hidratada es fundamental para que sane más rápido un tatuaje y se mantenga el color. Así mismo, esta institución recomienda no hidratar la piel con productos a base de petróleo o vaselina porque en algunos casos puede desvanecer la tinta. Recuerda no solo hidratar la piel con cremas, sino bebiendo agua a diario.

6. Protégelo del sol y aléjalo de camas de bronceado y lámparas solares. Según U.S Dermatology Partners, aunque un tatuaje necesita luego de los primeros meses sol y aire fresco, es preciso que cada vez que lleves tu tatuaje descubierto apliques bloqueador con un FPS mínimo de 30. Durante los primeros meses, protegerlo del sol es importante para evitar el desvanecimiento de la tinta e irritaciones cutáneas. Así mismo, no se recomienda el uso de camas de bronceado o las lámparas solares.

7. Evita utilizar cosméticos en la zona del tatuaje.

8. Consulta un dermatólogo si tu piel llega a tener alguna reacción alérgica o notas algún cambio importante en el tatuaje.