“The Eras Tour”: el potente regreso de Taylor Swift a los escenarios

Cuando Taylor Swift anunció “The Eras Tour” acabó el vilo de sus fanáticos después de una espera de casi 5 años en los que la artista tuvo que cancelar su gira original “Lover Fest” debido a la pandemia por COVID-19. Y es que tiene sentido que “The Eras Tour” fuera tan esperado. No hay duda alguna de que Taylor Swift no solo es una de las artistas más amadas de todos los tiempos, sino que también es una de las más talentosas y con las carreras más exitosas. Ha ocupado 9 veces en el #1 de Billboard, 40 veces el top 10 de la misma lista y ha ganado 11 Grammys. 

Su gira, la cual comenzó el pasado viernes 17 de marzo, se llevará a cabo hasta el 9 de agosto y contempla múltiples conciertos en Estados Unidos y dos en Argentina. El viernes inició en Glendale, Arizona, y convocó a más de 70.000 “swifties” que vivieron un momento único en la historia. Y decimos único porque el show que dio la cantante marcó un antes y un después en su carrera. 

Lee también: 8M: Las mujeres en la música siguen luchando por la igualdad

Son 44 las canciones que componen el show que dura poco más de 3 horas y que está dividido en 10 actos musicales correspondientes a sus 10 álbumes de estudio que se presentan en el siguiente orden: “Lover”, “Fearless (Taylor’s Version)”, “Evermore”, “Reputation”, “Speak now”, “Red (Taylor’s Version)”, “Folklore”, “1989”, “Taylor Swift” y “Midnights”.  Así, Swift realiza un recorrido por toda su carrera musical y explora todas las eras que ha vivido desde su debut en 2006. 

El éxito que anuncia el primer concierto de “The Eras Tour”

El concierto de Glendale da cuenta no solo de lo que será el resto de la gira, sino también del arduo trabajo que dedicó la artista durante estos 5 años a crear un show que le dé a sus fanáticos un paso por esa carrera a la que han sido fieles desde el inicio. Paramore y la solista GAYLE fueron los encargados de preceder el show de Swift, que llegó a ser descrito como “teatral”. Y es que el show solo puede ser descrito así, como una increíble obra de teatro en la que la propia Taylor Swift hizo una catarsis de la que hizo parte a sus fanáticos. 

La puesta en escena fue impecable, el escenario se extendió y la pasarela incluso se convirtió en una piscina por la que la cantante nadó hasta llegar al escenario principal. Asimismo, sus cambios de vestuario dejaron todas las bocas abiertas. Swift llevó 13 looks con estilos diferentes representando sus eras y fue vestida por Versace, Nicole + Felicia Couture, Alberta Ferretti, Zuhair Murad, Oscar de la Renta y Roberto Cavalli. Los zapatos que usó también se llevaron muchos halagos. Al parecer, las icónicas botas con cristales bordados que usó fueron hechos a la medida para Swift por el diseñador Christian Louboutin. 

Pero sin duda alguna, lo que más caló en la audiencia fue lo emotivo del concierto. Swift se tomó un momento para agradecer a sus fanáticos por la gran acogida que han tenido sus álbumes de “Fearless (Taylor’s Version)” y “Red (Taylor’s Version)” de los cuales perdió los derechos a sus grabaciones originales, pero regrabó al ser la compositora original. También cantó “Marjorie”, una canción dedicada a su abuela, y durante su presentación no pudo retener las lágrimas. Además, Swift salió solo con la guitarra en varias de sus canciones con melodías más suaves para cantar a un coro con su público, el cual no decepcionó y acompañó de principio a fin a la artista.